Mathieu van der Poel, actual Campeón del Mundo de ciclocross y que tenía previsto viajar hoy hacia Estados Unidos para tomar parte este fin de semana en la cita inaugural de la Copa del Mundo de la especialidad en Las Vegas ha decidido finalmente no realizar ese viaje debido a las complicaciones derivadas de la caída sufrida en el pasado Tour del Porvenir. Pese a que en un principio todo indicaba que el contratiempo iba a ser menor y que bastaría con una semana en el dique seco antes de poder volver a su actividad habitual, una revisión posterior no le deparó buenas noticias, y Van der Poel tuvo que estar parado por un periodo de dos semanas.
Después de volver a los entrenamientos hace menos de una semana, Van der Poel sigue arrastrando complicaciones que le han obligado a no estar en la cita americana, sin duda, un enorme contratiempo ante una temporada fundamental para él. Según sus propias palabras, “la rodilla derecha [la que se lesionó en el Tour del Porvenir, N.d.A.] ya no es un problema. Ahora siento dolor en la rodilla izquierda debido, al parecer, a la sobrecarga que ha sufrido tras mi vuelta a los entrenamientos. Por haber forzado demasiado con la intención de estar en forma lo antes posible”.
Van der Poel ha hecho público que “hoy es el quinto día que, de nuevo, estoy sin subir a una bicicleta. El pasado jueves, debido a los dolores en la rodilla, me sometí a una resonancia magnética en Amberes y ésta reveló una inflamación bastante profunda en la articulación. Ese mismo día me retiraron bastante líquido de la rodilla y desde entonces he seguido un tratamiento de antiinflamatorios y me he estado poniendo hielo, pero no he podido entrenar nada”. Pese a no viajar a América, el joven corredor ha recibido, por fin, buenas noticias. Ayer lunes “estuve con el médico del equipo en el hospital de Edegem y ahora ya tengo el visto bueno para volver a entrenar de forma suave”.
Van der Poel se ha mostrado frustrado por la situación ya que “tenía muchas ganas de estar en Las Vegas. Competir en otro continente mostrando mi maillot arcoíris era algo que me hacía ilusión. Esta, desde luego, no es la manera ideal de comenzar la temporada. Llevo acumuladas tres semanas sin tocar la bicicleta. Eso significa que debo de afrontar un periodo en el que mi único objetivo es volver a alcanzar una forma óptima. Tampoco es lo mejor en el plano mental, pero me recuperaré. Ya pienso en clave de futuro”.
Si todo sale como esperan Van der Poel y los responsables de su equipo, el BKPC-Corendon, el holandés debutará el día 26 de septiembre en el GP de Neerpelt o, a mucho tardar, en la cita inaugural del Súperprestigio de Gieten el día 4 de octubre.