Gema Hassen-Bey corona la Bola del Mundo en su reto hacia el Kilimanjaro

Gema Haasen Bey, durante su ascenso a la cima alcarreña © @LauraGomez

Gema Haasen Bey, durante su ascenso a la cima alcarreña © @LauraGomez

El pasado día 17, tras cuatro horas y media de ascenso, treinta minutos antes de lo previsto, la atleta paralímpica Gema Hassen-Bey llegó a la cima de la Bola del Mundo, situada en la sierra de Guadarrama a 2.265 metros de altura.

Acompañada por más de cuarenta personas, por Susana Pérez-Amor, subdirectora del área Mujer y Deporte del Consejo Superior de Deportes, por la olímpica Carlota Castrejana y por la actriz y deportista Kira Miró, la Bola del Mundo se convirtió por un día en «la cima de las mujeres» en una jornada deportiva de encuentro y de emprendimiento femenino. Destacó el eje femenino del reto «Cumbre Bey-Kilimanjaro Challenge», con el lema: «Las mujeres podemos alcanzar nuestras cimas».

Como parte de su reto «Cumbre Bey-Kilimanjaro Challenge», Gema abordará varias cimas nacionales e internacionales. La primera montaña que conquistó el pasado mes de junio, fue el Monte Abantos, a 1.753m., cuyo recorrido llevó a la atleta 12 horas, y posteriormente realizó el Camino de Santiago acompañada por 200 personas con movilidad reducida, con el objetivo de promover rutas accesibles en Galicia para todo tipo de personas.

Este fin de semana ha conquistado los más de dos mil metros de la Bola del Mundo, venciendo un desnivel de 400 metros impulsando su handbike Explorer all-terrain solamente con sus brazos y enfrentándose a rampas de 19%. Después de esta cima, el siguiente propósito será alcanzar una subida de 3.000 metros, hasta llegar a los 5.895m de altura del Monte Kilimanjaro.

«Estoy satisfecha por culminar esta nueva cima. He tenido que tirar mucho de brazos y no había ningún llano para tomar un respiro. La subida ha sido muy dura, sobre todo en las últimas rampas tan elevadas. No es lo mismo la potenciación muscular de las piernas que las de los brazos, pero aún así no me rendí hasta ver la cima. Compartir las vistas de toda la sierra de Madrid con las mujeres que me han acompañado ha sido el mejor regalo. Ahora tenemos la certeza de que todas podemos alcanzar nuestras cimas sean cuales sean. Aunque mi objetivo es el Kilimanjaro, también es la primera vez que una mujer en silla de ruedas sube la Bola del Mundo».

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