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Rafael Márquez, ganando en Zegama © FVC
Rafael Márquez, el corredor andaluz del Lizarte, cierra 2015 con la sensación de que el siguiente paso en su carrera debe ser el salto de categoría.
A sus 24 años, Márquez es uno de los referentes del pelotón amateur de nuestro país. Cada una de las seis temporadas que ha pasado en las filas del Lizarte ha ido creciendo como corredor, además de cosechar buenos triunfos.
La última muestra es este 2015, donde ha alzado los brazos en tres ocasiones , además de una decena de podios más. «El balance es muy positivo, es para estar satisfecho. Sabía que era un año muy importante para mí y he entrenado duro para hacer bien las cosas. Creo que lo he demostrado estando todo el año en la pomada».
Corredor completísimo, ha sido capaz de brillar en todos los terrenos. Al inicio de temporada ya fue capaz de llevarse la 1ª etapa de la Vuelta Costa Cálida (Murcia), siendo el más rápido de un grupo reducido. En junio, pulverizó todos los registros en el Campeonato de Andalucía CRI y se proclamó campeón regional, en un trazado muy explosivo, demostrando que también puede brillar en la lucha contra el crono.
Aunque las mayores alegrías, y los mayores sinsabores, le llegaron en el Torneo Euskaldun. La cara la vivió gracias a la victoria en Zegama, con cinco altos puntuables: «Ha sido el mejor momento de la temporada. Llevaba varias veces dando al palo, y fue una tremenda satisfacción volver a verme en lo alto del podio». La cruz llegaría en Altsasua, donde se iba a decidir la general del Euskaldun. Un pinchazo a 150 metros de meta, le arrebató todas las opciones de pelear el triunfo, y tuvo que conformarse con un meritorio 2º puesto. «Se me quedó la espinita durante unos días, pero ya no hay vuelta atrás. Siempre hay que quedarse con lo bueno».
Acostumbrado a brillar en las carreras al sprint, Márquez se marcó el objetivo de dar un paso adelante en montaña. «He mejorado mucho en las subidas. Este año he mirado mucho el peso, cuidando la alimentación, para estar unos 2 kilos por debajo de lo que solía estar en temporadas anteriores». A la vista de los resultados, objetivo conseguido. Aunque no es conformista, y siempre piensa en buscar nuevas metas: «Lucho por mejorar en todo cada día».
Con la categoría sub-23 ya superada, y habiendo sido uno de los mejores élite de todo el pelotón nacional, el andaluz no duda ni un instante ante sus deseos para 2016: «Ser profesional. Es lo único que pido. Si me dan la oportunidad, la aprovecharé al 100%. Aunque aún no tengo nada cerrado, estoy con mucha ilusión. De hecho, ya estoy trabajando de cara al próximo año por si suena el teléfono con un contrato encima de la mesa».
Sería la culminación de muchos años de esfuerzo y sacrificio en los que Rafael Márquez ha tenido un solo objetivo: pedalear con los mejores. Él es uno de ellos. Solo falta que el sueño se haga realidad.
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