El Tour de Omán desaparecerá del calendario

El erróneo podio © ASO

Rafa Valls fue el último vencedor © ASO

Nicolás Van Looy / Ciclo21

El ciclismo desembarcó en Oriente Medio hace algunos años y lo hizo a golpe de petrodólares. Aquello se recibió como una gran noticia ya que, además de dar la oportunidad a los corredores –especialmente los clasicómanos– de empezar a competir en climas muy benignos y, de esta manera, no tener que depender tanto de concentraciones en nuestro país, que les aseguraban ese buen tiempo, pero les apartaban de la competición. Pero, como suele ocurrir en todos los deportes, cuando las cosas se compran a base de talonario sin tener en cuenta nada más, el futuro a largo plazo no suele deparar buenas noticias. En el caso concreto del Tour de Omán (que tuvo en Rafa Valls a su vencedor en 2015), una carrera que, como el resto de las de la zona, se organiza de espaldas a la población local, que no muestra interés alguno por el ciclismo, y no genera más que gastos a los locales ya que toda la infraestructura proviene de los organizadores europeos, el final de la aventura podría estar más cerca de lo que parece.

Así al menos lo asegura en el Times of Omán Habib Al Zawawi, uno de los máximos responsables de la carrera en aquel país. “Efectivamente, por ahora, la de 2016 es la última edición del Tour de Omán”, acaraba Al Zawawi al ser preguntado por los incesantes y crecientes rumores en este sentido.

El próximo día 16 de febrero se dará la salida a la séptima edición de la carrera omaní que, inicialmente, tuvo un contrato para la celebración de cinco ediciones que se vio prorrogado por dos años más. Al Zawawi reconoció que tiene intención “de seguir negociando” para intentar salvar el futuro de la carrera. Explica que “hablaremos durante la carrera, así que la decisión no puedo decir que sea cien por cien definitiva. La decisión definitiva la sabremos una vez termine la edición de 2016 del Tour de Omán. Haremos un anuncio oficial entonces”.

Uno de los principales escollos en estas negociaciones, como ya indicábamos anteriormente, es el importante dispendio económico que supone la organización de la prueba. Al Zawawi reconoce que “organizar la carrera nos cuesta un total de 2 millones de riales [4,8 millones de euros]”.

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