Cant se anota el Súperprestigio. Van der Poel ha vuelto

Van der Poel, celebrando su triunfo de hoy

Nicolás Van Looy / Ciclo21

El Trofeo Súperprestigio de ciclocross se apaga lentamente de la misma manera que lo hace una temporada que, poco a poco, comienza a ofrecernos imágenes bizarras imposibles de imaginar hace sólo unas semanas, cuando todos los ‘grandes’ se tomaban cualquier cosa tan en serio que resultaba imposible pensar en hundimientos espantosos o renacimientos sorprendentes. Y eso, pasión y resurrección, es lo que hemos visto en sólo 24 horas este fin de semana. Se cerraba el sábado en Sint Niklaas el Trofeo BPost Bank con triunfo del siempre activo Laurens Sweeck y la explosión de un Van der Poel que parecía haberse dejado todas sus fuerzas mentales enterradas en el barro del mundial de Zolder. Pero no. El deporte no es, por fortuna, una ciencia exacta y el holandés, quería llevarle la contraria a todos aquellos que piensan que ya tiene la mente puesta en ese objetivo de estar en Río de Janeiro, y por eso, en el cross de las fresas celebrado hoy en Hoogstraten, el niño del barro ha vuelto por sus fueros.

Con tres puntos de ventaja sobre Pauwels y cuatro sobre Nys, Van Aert no podía tomarse esta penúltima entrega del año con algo de calma. A sus 21 años, busca su primer ‘Grand Slam’, algo a lo que muy pocos pueden aspirar. La ventaja, pese a lo corta que pueda parecer, parece que va a ser suficiente, pero el campeón del mundo necesitará correr a fondo hasta la última vuelta de la última carrera.

Tom Meeusen, cosas que no cambiarán nunca, arrancó fortísimo hoy. Motor a tope. Gas a fondo. Y allá que se iba, otra vez, esta fuerza viva de la naturaleza que, como siempre también, viajaba irremediablemente hacia su bajón a mitad de carrera. Junto a él, se fueron los dos Van der Poel, Sven Nys y Kevin Pauwels.

Ya muy pronto quedó patente que ni rastro quedaba de los dolores de espalda que alegó Van der Poel por su pobre resultado de ayer ni de los excesos que Van Aert ha debido de cometer durante las celebraciones por su título mundial. Fue el holandés el que, en varias ocasiones, intentó sentenciar con uno de esos acelerones tan marca de la casa que, en otras carreras, le han permitido dejar clavada a toda la competencia. Van Aert, esta vez, hacía la goma, pero nunca perdía del todo la estela de su gran rival.

No fue hasta la última vuelta cuando, tras un nuevo acelerón de Van der Poel, el campeón del mundo tuvo que claudicar y conformarse con la segunda plaza. De nuevo batido por su archienemigo. De nuevo, los aficionados soñando con verlos pegarse durante todo un invierno y, por lo tanto, en igualdad de condiciones. Por detrás, Meesuen se dio el lujo de subirse al podio. Esta vez sí pudo con un Nys que sigue aferrándose a un último Súperprestigio que, matemáticamente, todavía podría conseguir aunque ya nadie cree que se le pueda escapar a Van Aert.

Cant se llevó la general del Súperprestigio

Antes de la carrera elite masculina fue el turno de las mujeres. Ayer ya se vio que Sanne Cant no está en su mejor momento de la temporada. Reconoció estar enferma y que sólo su ambición por conseguir cerrar el triunfo final en el Trofeo BPost Bank le dio el coraje para salir de la cama y presentarse en Sint Niklaas. Hoy, en Hoogstraten, las cosas ni iban a ser muy diferentes. La belga, a la que de nuevo se le escapó el mundial y, de nuevo, hubo de subir al podio de Zolder con lágrimas en los ojos, tenía la misión de amarrar el Súperprestigio.

Pero ella es, sencillamente, superior a todas las demás. Como tantas veces le ocurrió a Sven Nys durante su carrera, parece que Cant tiene la virtud de mantenerse mejor que toda la competencia a lo largo del invierno, pero es incapaz de brillar en el día más importante del año. Pese a estar enferma, sólo necesitó tres vueltas para darse cuenta de que nadie iba a poder seguirla.

Fue, sin embargo, la británica Nikki Harris, quizás consciente de las dificultades por las que pasaba si rival belga, la primera que quiso imponer un ritmo muy alto. Junto a ella, se colocaron su compatriota Helen Wyman y las holandesas Sanne van Paasen y Sophie de Boer. Por supuesto, el maillot azul de la campeona de Europa no tardó en pegarse a ese grupo.

Fue Harris la rival más dura para una Cant que, pese a su debilidad, quería terminar con aquello por la vía rápida. Aguantó un rato la inglesa, pero tras tres giros comenzó el recital de una Cant que, decidida, se dio un homenaje para llevarse el doble premio del triunfo en Hoogstraten y la victoria final en la general de Súperprestigio, que ya es suyo a falta de una prueba para su finalización tras haber ganado cinco de las seis pruebas disputadas. Por detrás, De Boer fue la que se impuso en la pelea con Nikki Harris por la segunda plaza.

CLASIFICACIÓN ELITE MASCULINA

CLASIFICACIÓN SUPERPRESTIGIO ELITE MASCULINA (Tras 5 pruebas)

CLASIFICACIÓN ELITE FEMENINA

CLASIFICACIÓN SUPERPRESTIGIO ELITE FEMENINA (Tras 5 pruebas)