Redacción Ciclo 21 / RFEC
El segundo día de competición en el programa olímpico de ciclismo en pista vivirá el debut de los representantes españoles. Juan Peralta ya ha sido protagonista en los Juegos Olímpicos de Río, aunque fuera de la pista, al conocer a uno de sus ídolos, Rafael Nadal, la semana pasada. “Fue una experiencia increíble. Venía de entrenar, vi que él estaba en una cancha y me paré para verle. Mi sorpresa fue cuando Toni -tío y entrenador del tenista- se me acercó para interesarse sobre mi prueba. Luego vino Rafael y pude hacerme unas fotos con él, cumpliendo un sueño”.
Ahora el sueño será otro, intentar conseguir el diploma olímpico en la prueba de velocidad, la única que afrontará en su segunda experiencia olímpica, después de que en Londres 2012 compitiera en el keirin. “Estar en Río es un premio al trabajo y a la regularidad de sobre todo los dos últimos años. Sabía de la dificultad de la clasificación, por eso decidí centrarme sólo en una prueba, en este caso la velocidad. Repetir experiencia olímpica es importante para mí y voy a disfrutarlo al máximo”.
Peralta comenta que “la preparación ha ido bien, no he tenido ningún contratiempo de importancia. En la competición internacional C1 que hice este verano conseguí estar en el podio y en la concentración previa en Valencia tuve buenas sensaciones y me salían buenos tiempos”.
El de Figarol insiste en las diferencias con respecto a la anterior cita olímpica. “La velocidad es una prueba totalmente diferente a el keirin que fue la que hice en Londres. Y la participación aquí es mucho mayor, ya que aquí estamos 27 corredores, con todos los países importantes con dos, y sólo 18 pasan a los enfrentamientos directos, quedando nueve fuera. Llego con más experiencia, más maduro. Si me saliese todo perfecto, podría llegar a estar en torno a ese octavo puesto y conseguir el diploma que sería sobresaliente para mí. Pero a la vez también soy consciente que puedo quedar el 25 en los 200 metros, incluso mejor, y no pasar a los enfrentamientos…”
Por ello, reconoce que es “difícil ponerse un objetivo. Creo que hay 6 o 7 corredores que estarán un punto por encima del resto y que se repartirán las medallas, y después estamos los otros 20 donde creo que habrá mucha igualdad y puede pasar de todo. Lo único que quiero es poder dar mi 100% y que el trabajo realizado durante todo el año se vea en la pista”.
La participación española en las pruebas de pista de los Juegos Olímpicos de Río se completa, junto a Juan Peralta, con las velocistas Tania Calvo y Helena Casas, debutantes olímpicas y que intervendrán en tres pruebas, por este orden: velocidad por equipos, keirin y velocidad individual.
Casas comenta que “me he adaptado bastante bien a los horarios y condiciones de Río y en los entrenamientos en pista he tenido muy buenas sensaciones, lo que es un aliciente más, ya que llegaba en un gran estado de forma, con mucha ilusión y muy motivada. En las concentraciones, los tiempos han sido mejores que los del año pasado. Para mí estar en Río supone mucho, ya que es la recompensa al trabajo realizado durante muchos años, especialmente los dos últimos, que han sido muy duros buscando la clasificación”.
En parecidos términos se expresa Calvo. “He preparado esta cita con mucho mimo, entrenando muy duro, aunque las últimas semanas he bajado el ritmo para llegar más descansada. Estar aquí es un sueño hecho realidad, la recompensa a muchos años en que estás luchando por ser cada día mejor”,
Será en la prueba por parejas en la que hagan su debut con serias opciones de quedar entre las ocho mejores. Y es que la dupla española ha estado siempre en esas posiciones de diploma en los últimos cinco Mundiales: sextas en 2014, séptimas en 2013 y 2015 y octavas en 2012 y 2016, si bien en el último Campeonato, en Londres, se trataba de no correr riesgos y de asegurar matemáticamente la clasificación olímpica. “Mi esperanza es que queden séptimas u octavas –indica el seleccionador, Salvador Meliá-. Quedarse más atrás sería una pequeña decepción, vista la trayectoria que han tenido hasta aquí”.
“Es la prueba que más hemos preparado -valora la vasca- y en la que más opciones tenemos de conseguir diploma. ¿La medalla? Hay que reconocer que nos falta un puntito más para estar más adelante”, a lo que la catalana añade que “quién sabe si en el futuro podría llegar, estamos trabajando en ello. Siendo realistas, podemos quedar las séptimas y si somos muy optimistas y se nos dan bien las cosas, incluso más arriba”.
La segunda prueba para alavesa y tarraconense será el keirin, que se disputa al completo el sábado 13, con el formato habitual: primera ronda y repescas en la sesión matinal y semifinales y finales en la vespertina. “Es la prueba más imprevisible de las tres que van a realizar, aunque un buen resultado sería que entrasen en semifinales”, analiza el seleccionador.
La participación de las españolas se cerrará con la velocidad en tres jornadas: el domingo están programados los 200 metros, los dieciseisavos y su repesca; el lunes los octavos con su repesca y la final 9-12, y el martes, los cuartos, las semifinales y finales, así como la final 5-8. “Tania tiene que pasar el corte y su objetivo debe ser superar la primera ronda y llegar a octavos. Helena lo tiene más complicado y con que superase los 200 metros me daría por satisfecho”, termina Meliá.