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Hay tiendas ciclistas y hay tiendas ciclistas: aquéllas a las que uno va simplemente a hacerse con nuevo material y otras que son algo más que un sitio en el que comprar y reparar bicicletas o hacerse con ropa y accesorios, y pasan a convertirse en lugares en los que pasar el tiempo y charlar con su personal. Y no hay nada mejor que un lugar con carácter propio que te ayude a disfrutar mejor del mundo del ciclismo, a conocer gente con la que organizar escapadas o simplemente un sitio en el que ver una buena competición en directo con un café en la mano. Varias de estas tiendas cuentan con su propia versión online, por lo que si no tienes la oportunidad de visitarlas podrás deleitarte con sus catálogos y permitirte un pequeño (o gran) capricho. Si no te viene bien tirar de ahorros, siempre puedes recurrir a empresas que ofrecen minicréditos rápidos para este tipo de gastos.
Estamos seguros de que nos dejamos muchas fuera de la lista, pero hemos querido hacer una selección de cinco tiendas con renombre internacional, que cuentan con un espíritu propio y que, por su diseño, su historia o su compromiso con las escenas locales han sabido destacar de las demás. Algunas de ellas son tiendas ciclistas, otras son lugares de encuentro y otras son una mezcla de las dos cosas, pero todas ellas, excepcionales.
718 Cyclery (Nueva York, EE.UU.)
Los responsables de 718 Cyclery fundamentan su negocio en una idea muy sencilla: que son servidores de una tradición y una tecnología que ha cambiado poco durante más de 100 años, pero no sus guardianes ni sus propietarios. Según se definen: “Nuestra tienda es un lugar en el que la arrogancia o los aires de superioridad no tienen cabida. Si tienes una duda o pregunta acércate a nosotros y la responderemos encantados, y si te pica la curiosidad asómate a nuestro taller mientras trabajamos”.
Es esta actitud humilde y cercana lo que les convierte en una de las tiendas favoritas de los ciclistas neoyorkinos, posiblemente uno de los más lugares más estresantes y frenéticos del mundo para moverse en bicicleta.
Cherubim (Tokyo, Japón)
Fundada en 1965, un año después de los Juegos Olímpicos de Tokyo, Cherubim es una de las tiendas con más reconocimiento y recorrido de la escena ciclista internacional. El país nipón es un lugar de contrastes, en el que conviven la tecnología más avanzada y los procesos de fabricación minuciosos y artesanales, y esta tienda (que fabrica algunos de los cuadros más punteros del mercado) no es para menos. Han sabido adaptarse a los cambios tecnológicos durante más de 50 años, pero siempre sin perder su espíritu y su firme compromiso con la tradición que los ha hecho famosos.
Pave (El Prat de Llobregat, Barcelona, España)
Pave podría pasar fácilmente como galería de arte contemporáneo en lugar de como tienda ciclista. Este espacio de 700 m² resulta realmente único y está diseñado con tal detalle que hará las delicias de los más exigentes. Fundada en 2011, la tienda parte de la idea de ofrecer a sus clientes un espacio totalmente diferente de la tienda o taller tradicionales. Así, Pave cuenta, además de con un espacio dedicado a los últimos productos, con un lounge en el que ver la competición de la temporada y tomar algo u hojear libros y revistas especializadas, e incluso con una zona de duchas para usar después de una buena sesión de entrenamiento. Sin duda, unos de los mejores lugares de encuentro para ciclistas de todo el mundo.
Rapha Cycle Club (Londres, Inglaterra)
Rapha es muy probablemente la marca de ciclismo más lujosa que existe, y sus puntos de venta no se quedan cortos. Al no distribuir sus productos más que por su página web, en 2012 decidieron abrir su primer ‘Cycle Club’ permanente en Londres para darle a la compañía una cara visible. Famosos por su patrocinio del equipo Sky, sus precios elevados y los materiales que utilizan para su equipamiento (como la lana merino), la tienda ofrece a sus consumidores una experiencia del más alto nivel para acompañar la imagen de marca que han construido online durante años. Cuenta con su propia cafetería y con un espacio en el que colgar el casco, descansar después de una larga etapa y charlar con otros entusiastas de las dos ruedas viendo el Giro, la Vuelta o el Tour. ¡Imprescindible si visitas Londres!
Vecchio’s Bicicletteria (Boulder, Colorado, EE.UU.)
Aunque se encuentre en EE.UU., esta tienda toma su nombre y su inspiración en las antiguas tiendas italianas, no sólo de ciclismo, sino también sastrerías o talleres en los que la actividad que realizan sus trabajadores es directa, auténtica y sin aditivos comerciales, y desde luego siempre con el consumidor en mente. Su especialidad son las ruedas fabricadas por encargo, aunque también venden bicicletas completas (únicamente de acero, al estilo clásico, y de unos pocos fabricantes pequeños) pero siempre orientados a personalizar al máximo el pedido para cada cliente. Supone una mirada al pasado difícil de encontrar hoy en día, y a juzgar por su filosofía, no quieren dejar de ser una tienda pequeña y con encanto.
