Ion Izagirre (1989, Bahrain-Merida) estrenaba su rol de líder en vueltas de una semana en Andalucía y respondió con creces, con los mejores, hasta que una caída en la contrarreloj -vestido con su nuevo maillot de campeón de España- le impidió luchar por la victoria final. Afortunadamente, no sufrió lesiones graves y ahora se recupera y entrena para “disputar con garantías” la París-Niza. Izagirre no falló y estuvo con Valverde y Contador tanto en la subida a Monachil como en el final en Peña del Águila; a 5” del liderato a falta de su carta de la crono. Sin embargo, todas sus ilusiones se vinieron abajo en una curva.
-¿Cómo se encuentra de su caída en Andalucía?
-Me encuentro bastante bien, mejor de lo esperado la verdad, aunque tengo el cuerpo un poco magullado. Pensaba que iba a ser algo más. Tengo rasponazos, quemaduras, heridas, todo superficial, y me estoy recuperando bien. Te tienes que quedar con que no fue algo peor. Al principio tenía miedo de tener alguna rotura o una fisura, hasta que los exámenes descartaron todo y ya empezamos a pensar en la recuperación.
-En cualquier caso fue una faena.
-Tenía buenas sensaciones. Está claro que trabajas para disputar las carreras y tenía asumido mi rol de líder para disputar Andalucía. Yo había estado con los mejores los días anteriores y tenía opciones de victoria. Da rabia terminar así, también por el equipo, por todo el trabajo que había hecho por mí. Me quedo con las buenas sensaciones que he tenido… y que espero volver a tener.
-¿Cómo fue la caída?
-Fue sobre el kilómetro 4, en una pequeña curva a derechas, en bajadita, que te echaba hacia afuera; había un cruce, una isleta, la carretera no estaba en buen estado… Se juntó todo y quizá entré demasiado rápido. La curva se me vino encima y se me fue la rueda delantera.
-¿Qué me dice de Valverde y Contador?
-No hay quien pueda con ellos. Son dos corredorazos, no hay más que ver su palmarés. Alejandro ahí sigue, a esa edad y competitivo, ganando ya desde febrero. Parece como un buen vino, cada año mejora. No tiene límite.
-¿No fue extraño salir a rueda de Valverde después de compartir equipo durante tres años?
-Se hace raro. El día que ganó Pinot fuimos un tiempo a relevos. Es bonito. Después de compartir tres años con un gran corredor y de ser tu líder, de un año para otro somos rivales y luchamos codo con codo.
¿Cómo está siendo su adaptación a la estructura del Bahrain-Merida?
Siempre va a costar porque hemos empezado de cero, somos gente de diferentes países, corredores jóvenes y es todo nuevo, la logística, el staff… Cada uno está cogiendo su sitio; según pasen los días, será más fácil para todos.
-¿Con qué objetivo va a afrontar la París-Niza?
-Sabiendo que el nivel será aún mayor que Andalucía para luchar por la victoria. Cada equipo tendrá un líder. Yo también tengo ganas de disputar con garantías. Espero recuperar y entrenar bien estos días para disputar la París-Niza. El verme con los mejores me ha dado confianza. Para arriba quizá algunos tenían un punto más, porque es gente más explosiva, Contador, Valverde, Pinot, pero he sabido estar cerca de ellos y jugar mis cartas. Mi idea es hacer lo mismo en la París-Niza y estar delante.
-¿Cuáles piensa que son las claves del recorrido?
-Es un recorrido complicado. Los primeros días, aunque puedan parecer para el sprint, espero tensión y peligro por el viento. La crono con esa llegada para arriba de tres kilómetros me gusta y el final en alto de 15 km al 7% es para escaladores. Espero poder estar ahí con los mejores. Y no hay que olvidar último día en Niza que suele ser alocado e intenso.