Chris Froome (Sky) es el líder y Romain Bardet (Ag2R) uno de los aspirantes. Sin duda es una de las batallas que se van a poder ver en las etapas que restan para cerrar un Tour de Francia que a menos de una semana para su fin está realmente muy abierto. «No voy a dar ningún segundo gratis porque lo mismo que tuve un mal día en los Pirineos, podría tener un mal día en los Alpes», ha manifestado hoy el líder de la carrera. «Hasta ahora no he dado el cien por cien», ha asegurado, por su parte, el líder del Ag2R. «Estoy buscando con paciencia el buen momento para atacar. Espero que llegue. Tengo confianza porque ya luché por el triunfo el año pasado», dijo.
Froome dice que va a más en la competición, que se va sintiendo más fuerte pese a los evidentes síntomas de debilidad que ha demostrado: «Me siento mejor a medida que la carrera avanza. Incluso con la etapa de ayer, me sentí muy bien, y con suerte, eso es una señal de sincronizar las cosas bien y entrar en el Tour realmente fresco. Espero que esta tercera semana me encuentre en mi mejor momento».
También habló el líder de los márgenes tan pequeños entre todos en la general: «Esto es lo que esperábamos. Las diferencias en la general son mínimas. Cada rival presenta una amenaza diferente. Si nos fijamos en Fabio Aru, ganó el primer asalto de montaña en la Planche des Belles Filles y Romain Bardet siempre ha sido fuerte en la última semana, y tiene el equipo para respaldarlo. Por supuesto, como vimos ayer, me puso bajo mucha presión ayer y realmente tuvimos que usar todo el equipo para mantener el control de la situación».
Pero no se olvida Froome del tapado de este Tour: «Rigoberto Uran no hace tanto ruido, pero está bien situado en la general y para la contrarreloj del sábado es el más fuerte de los hombres de la general».
Bardet, paciente y seguro de sí mismo
«El Tour se gana con paciencia, con la capacidad de no rendirse. Hay que explotar todas las oportunidades, aunque haya pocas opciones de que salgan. El que no lo intenta no gana. Hay que mantener la calma y tratar de imponer nuestro estilo en los momentos clave«, señaló el líder francés, la esperanza de un país que sueña con ver a uno de los suyos en la cima del mundo ciclístico.
«Por el momento me centro en la montaña. Voy a correr las dos etapas de los Alpes como si fueran dos clásicas, sin hacer cálculos«, indicó, esto es, sin pensar en la crono que queda. «El equipo está en un excelente momento ¿Por qué no afrontar lo que queda con una sonrisa sin dejarse invadir por el estrés?», aseguró aludiendo a la presión que, por detrás y tan solo a cuatro segundos, le ejerce el colombiano Urán.