Gema Pascual, presidenta de la Comisión Féminas RFEC

Gema Pascual © RFEC

Desde hace unas semanas, Gema Pascual es la nueva presidenta de la Comisión de Féminas de la RFEC. Un cargo que compatibiliza con el de seleccionadora femenina de Madrid. Una de las ciclistas españolas más destacada de la historia, tanto en carrera como en pista, donde llegó a colgarse la medalla de bronce en el Mundial de Burdeos 2006.

En marzo de 2010 corría su última prueba de carretera, con los colores de Bizkaia-Durango lo que significaba su desconexión del mundo del ciclismo.

-¿Por qué esa decisión?

-Salvo un pequeño contacto que tuve por una petición de Ana Belén Miguelez, que necesitaba piloto para el tándem para seguir corriendo, durante ese tiempo mi alejamiento fue total, también en parte por mi maternidad. Mantenerme al margen me sirvió de mucho, pero subirme al tándem aún más. Me di cuenta que lo que me había venido bien desconectar porque realmente volvía a disfrutar de la bicicleta que ya lo había olvidado. La bici me ha dado mucho. Bueno, realmente no me lo dio, me lo gané, pero también me agotó y necesitaba ese parón. Pero cuando me volví a subir en la bici para ayudar a alguien, la ayuda fue mutua.

-De ahí a la Federación Madrileña…

-Carlos Castaño, con el que compartí muchos entrenamientos en la selección, siempre me estaba diciendo que para cuando me animaba. Y mi respuesta era siempre la misma, que nunca. En febrero recibo otra llamada suya, me cuenta sus planes, y me pide que me anime a coger la selección. Entonces ya no dije que no, pensaba que podría ser. Y tras una reunión que mantuve con Javier Fernández Alba –presidente- y Cristina Arconada –responsable de féminas de la FMC- me decido. Y no solo sale el proyecto de seleccionadora sino que me confían o piden opinión para darle forma al programa de Tecnificación femenina que debemos llevar a cabo con las féminas de Madrid desde la Federación y con la Comunidad de Madrid como apoyo… apenas cinco meses llenos de mucho trabajo por parte de todos. En estos cinco meses hemos trabajado en equipo, y creo que no ha salido nada mal.

-¿Cómo surge el tema de la RFEC?  

-Al poco tiempo de estar en la Madrileña, Fernández Alba me hizo un pequeño comentario, al que no di importancia. Es más, mi respuesta fue  algo así como no me interesa demasiado. Mi trabajo en la Madrileña estaba siendo muy duro, pero muy satisfactorio, tanto en ese aspecto de grupo como con el trabajo con cada una de las chicas. Algún tiempo después es el propio López Cerrón quien se pone en contacto directamente conmigo, para mantener unos días antes del Campeonato de España escolar de Ávila una conversación más larga. Le dije que quería meditarlo, pero diversas personas de dentro del ciclismo femenino y de diferentes rangos me hicieron saber que, al haber dejado Cristina San Emeterio el puesto, se sienten sin apoyo. Lo primero que me preocupaba era si el puesto de presidenta de la Comisión era suponía tener que dejar mi trabajo con las féminas de Madrid, ya que de haberlo sido en ese momento hubiera acabado la conversación. Pero como puedo seguir compatibilizando ambos, aquí estoy.

-¿Cómo has visto la situación?

-Acabo de aterrizar y lo primero que quiero es ponerme al día de todo, tanto desde el punto de vista de la Federación como del nivel de las ciclistas, para poder comenzar a trabajar correctamente. La semana pasada estuve en el Campeonato de España de BTT de Cofrentes, porque aunque el ciclismo femenino se suele asociar a la carretera, hay muchas más disciplinas y quiero escuchar los problemas de todos los colectivos. En general, estamos en un momento en el que han aumentado el número de licencias, así como en número de carreras que se están consolidando. Y con ciclistas que empiezan a ser referencia internacional con sus grandes resultados. Pero la realidad es que, aunque siempre hayamos tenido estos grandes resultados, seguimos estando a mil años del ciclismo masculino. La gran diferencia ahora es que cada vez se ven más mujeres en los cargos, como entrenadoras, como directoras y que lo están dando todo. Y que a nivel social también hay otra percepción. Debemos aprovechar este tirón y reconocimiento a la mujer deportista para intentar mejorar y conseguir muchas cosas, una de ellas es conseguir un ciclismo profesional de calidad, en consonancia al nivel y condiciones que podemos encontrar ya en otros países.

-¿Qué puede aportar al ciclismo femenino?

-Ante todo, quiero trabajar para las ciclistas, porque se lo que es, lo que se siente y aún pienso como deportista. Lo único claro que tengo desde siempre que la corredora es importante desde es momento en que se sube a la bici, y que es igual de buena cuando está bien que cuando está mal. Es más cuando está todo bien… realmente no les hace falta a nadie. Hay que saber estar en todo momento a su lado, sólo por el respeto que se merece. En estos días he recibido infinidad de felicitaciones y es algo que, si te soy sincera, lo agradezco mucho pues venían de gente con la que he compartido equipo, selección, entrenamientos, situaciones… Gente que conozco o me conocen. Pero  lo que más me ha llenado era escuchar a esas personas con las que he estado los últimos cinco meses y cuya llamada de felicitación venia acompañada de un ¿dejas la madrileña? Porque ahora que estabas tú queremos que sigas…. Ahora espero poder ayudar desde esta doble faceta.

-Durante su época de corredora fue especialmente crítica. ¿Puede suponer esto algún problema en su nuevo cargo?

-Yo sigo siendo igual. Creo que no he cambiado nada, quizá que soy más directa. Pero cuando una es exigente tiene que ser crítica. En estos meses en la Madrileña todos te podrán decir que no le doy vueltas a lo que pienso, que cuando algo no me gusta lo digo. Pero cuando me gusta también. Si tengo que llamar la atención lo hago, pero si me la tienen que llamar lo acepto perfectamente. Soy de las que creen que no hay sólo una respuesta válida sino que cada uno tenemos la nuestra y creemos que esa es la correcta. A mi me gusta ver muchas a parte de la mía, porque eso me enriquece a mí y a mi trabajo. Seguro que no podré contentar a todos, porque eso sería imposible, pero si consigo lo que hasta ahora con Madrid, me daré por satisfecha. Espero que podamos trabajar sin problemas y encontrar apoyos. Marta Villajosana y yo nos conocemos desde hace muchos años y eso nos ayudará. Y por supuesto, quiero terminar agradeciendo a López Cerrón su apoyo y trato desde el primer momento.

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