David López asume que su carrera profesional ha llegado a su fin. Aún disfruta y tiene ganas de bicicleta, pero sabe que, salvo sorpresa, no se pondrá más un dorsal. Asume su nueva situación con la tranquilidad que da una carrera de 16 años de profesional en la que se ha distinguido por entregarse a sus líderes.
Su palmarés brilla con tres victorias -etapa en Vuelta a España, Vuelta a Alemania y Eneco Tour- y ha acumulado 16 grandes vueltas; con Alejandro Valverde ganó la Vuelta a España 2009 y con Chris Froome el Tour de Francia 2013 y la Vuelta 2017. Una vida profesional plena en los equipos Baqué-Labarca 2, Euskaltel-Euskadi, Caisse d’Epargne/Movistar Team y Team Sky.
¿Pensaba que tendría una carrera tan larga y próspera?
Nunca pensé si iba ser tanto tiempo profesional o no. La verdad es que estoy muy satisfecho con mi trayectoria. No tengo nada que objetar ni tampoco miro para atrás para ver si podía haber hecho mejor esto o lo otro. Tengo muy buenos recuerdos y estoy mentalizado de que me empieza una nueva etapa en mi vida.
¿Qué hay de aquel chico que empezó en Baqué y del hombre que ha terminado en Sky?
No he cambiado. Soy la misma persona. He sido de cambiar poco, soy un hombre de costumbres, pero pienso que he acertado plenamente con los cambios de equipo que he tenido. Sobre todo, he encontrado mi sitio. Mi papel ha sido el de trabajar para otros líderes y, mira, he tenido la suerte de poder también de tener oportunidades y disfrutar de algunas victorias, pocas, pero de calidad, sobre todo la de la Vuelta a España. Las tres fueron muy bonitas y me hicieron bastante ilusión.
Ha destacado por ser un ciclista trabajador.
Me gusta que me recuerden como un gregario. Me gusta ese reconocimiento. Me he despedido en el Tour de Guangxi, en lo más alto del WorldTour, y haciendo lo que he hecho siempre, trabajar para un compañero que además en este caso ha ganado. Así que ha sido una despedida de la que realmente he disfrutado.
En su recuerdo quedará haber acompañado a Froome en sus triunfos del Tour de Francia 2013 y la Vuelta a España 2017.
Sí, y antes también estuve en el equipo que acompañó a Valverde en la Vuelta a España que ganó en 2009. Son cosas que no se olvidan porque trabajas para que un compañero gane y te sientes parte de ello. Poder estar al lado de Froome o Valverde ha sido un privilegio.
El Team Sky se ha renovado para 2019.
El equipo ha apostado por un cambio de filosofía y ha rejuvenecido la plantilla. Además, el posible aumento de las plantillas se espera para 2020 y no ahora. Estas circunstancias se han juntado y al final hay menos huecos. Les estoy muy agradecido. De hecho, pedí quedarme con la Pinarello de mi última Vuelta a España y me la han regalado.
Desde 2003 hasta 2018, ¿cuánto ha cambiado el ciclismo?
El ciclismo ha cambiado, mucho. Ahora hay más tensión en cada carrera, en cada etapa, en cada día de competición. Los equipos tienen más presión por los resultados, las casas comerciales también… Antes se corría con más tranquilidad la verdad. Ahora todos tienen un líder y creen que pueden ganar al sprint o una vuelta. Cada segundo cuenta y las diferencias son mínimas, por eso se pelea tanto también. Cualquier pérdida de tiempo es luego muy difícil de recuperar. Y es un deporte que quizá ha perdido un poco su esencia porque se ha convertido más en un negocio, un negocio del que yo he sido parte.
Se señala al Team Sky por su presupuesto.
Yo creo que hay al menos media docena de equipos que están a la altura del Sky en cuanto a presupuesto y sueldos. Otra cosa es que en el Sky se invierte mucho en el corredor, que no le falta de nada; cuidan cada detalle para que luego se refleje en la carretera. Quizá en su día pudo parecer un proyecto diferente, pero hoy pienso que muchos han seguido esta línea y que no hay tanta diferencia.
¿Y hacia dónde enfocará ahora su vida?
El ciclismo me gusta. De hecho, he seguido disfrutando hasta mi último momento como profesional, y lo sigo haciendo. Me gusta salir en bici. He empezado a mirar algunas cosas ligadas al ciclismo, no necesariamente al profesionalismo que supone muchos días fuera de casa, sino quizá me llama más la atención el cicloturismo. Estoy en una situación nueva y vamos a ver las puertas que se pueden ir abriendo.