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Ana Usabiaga, con el seleccionador nacional Raúl Mena. (RFEC)
Buen regalo recibió el pasado sábado, en su 29º cumpleaños, Ana Usabiaga de su hermana Irene, al quedar ésta en un notabilísimo octavo puesto en la Copa del Mundo de Cambridge. Desgraciadamente la propia Ana no pudo festejarlo un día más tarde en el Campeonato de España de ómnium, por esa caída a falta del último sprint de la puntuación, que le impidió defender su suerte ante Eukene Larrarte, aunque la victoria de su paisana no es un mal resultado, “porque ganando ella y yo segunda sumamos los máximos puntos posibles por país”.
Teníamos pendiente esta conversación con Ana desde hace mucho tiempo, aunque el complicado estado de la clasificación olímpica para Tokio 2020, su gran objetivo, la hace más necesaria que nunca y sobre todo una cuestión que nos preocupa a muchos.
– Sinceramente, ¿cómo está la clasificación para Tokio?
– Muy, muy difícil. Soy realista. Lo voy a intentar al máximo, pero me veo fuera. Por poco pero fuera.
– ¿Hay alguna forma de que llegue es milagro, como hablaba recientemente con el seleccionador, Raúl Mena?
– Que Irene siga haciendo octavos –sonríe-. Depende de hacer un buen Mundial este año y de hacer un muy buen Europeo el año que viene, la que sea de las dos, según lo decida Raúl (Mena). No hay otra posibilidad que sumar en aquellas competiciones que dan las puntuaciones más altas. En el Europeo de Glasgow tengo un mal puesto y no es sólo eso, sino que las rivales lo tienen mejor. No me queda otra que mejorar ese puesto y rezar para que las rivales no saquen tan buen puesto.
– Muchas de esas rivales están jugando en ‘otras ligas’. en otros Campeonatos. Cuando suprimieron las cuotas continentales pensamos que era una buena noticia, pero se está viendo que lo contrarrestan sumando muchos puntos en sus continentales…
– Y no sólo es eso. La UCI no ha dejado claras las reglas. A principio de año dieron 24 selecciones clasificadas para Copa del Mundo, que eran las únicas que podían participar. Pero luego lo abren a todo el mundo. Y después de haber estado todo el año fuera de casa, cogiendo puntos para estar clasificada para las Copas del Mundo y luego ves gente que no ha gastado un duro en todo el año y tiene las mismas tres Copas del Mundo que tengo yo… la verdad es que se te queda una cara de tonta… Pero es lo que hay.
– Dejando de lado este injusto sistema. ¿Te has visto mejor en el ómnium este año?
– Mi sensación es que ando más que nunca, pero también ha subido el nivel general. Quizá el espectador no lo termine de ver, pero mis datos son mejores que nunca, mejores vatios medios, mejores picos máximos… Me veo más rápida, con más agilidad.
– Desde fuera, además, se te ve mejor, más metida en carrera, sobre todo en pruebas como scratch y eliminación…
– Puede ser, la experiencia que vas cogiendo te ayuda. Si, mis sensaciones son mejores, pero el nivel es tan, tan alto que no se nota. Pero sí, en este sentido estoy contenta. Y si doy mi cien por cien, es lo que vales.
– Alguna vez hemos hablado que en la puntuación parece como si fueras más conformista, pero ya me comentaste la razón…
– Se dice muy fácil cuando estás sentado, pero luego ves que la media de la puntuación es de 48 para arriba, que puntúan siempre las mismas y que a partir de la doce en la general de la carrera ninguna coge puntos. Y todo eso es por algo. Obviamente a mí también me gustaría puntuar, pero si no puntúo es por algo, porque se va bastante más rápido de lo que parece.
– Pasando al segundo objetivo, la clasificación para el Mundial. ¿Lo ves más claro?
– También está complicado, pero gracias al puesto de Irene lo puedo ver con un poco más de optimismo. Hay que ir poco a poco, a ver qué pasa en Hong Kong.
– Cuando estas líneas vean la luz Ana Usabiaga estará volando precisamente hacia este peculiar territorio chino, para participar en la última prueba de la Copa del Mundo con los colores del Eustrak, y solamente en scratch. ¿Es necesario este viaje tan largo?
– El scratch también está complicado para clasificar para el Mundial. Menos mal que el noveno puesto de Irene es un colchón para verlo con más optimismo. El problema es que estamos todas, todas ahí, en menos de cien puntos en el ranking y ello te supone que un buen resultado como el de Irene te permite escaparte un poco, pero si haces la dieciocho se te han ido las rivales. Hay que ir con todo a Hong Kong e intentar clasificar el Mundial, que es el objetivo.
