Martin Palermo / CiclismoInternacional / Ciclo21
Criticado y alabado por igual, lo que no se discute es la imponente trayectoria de Eusebio Unzué en el ciclismo. El experimentado mánager de Movistar vivió todo y, por eso, cuándo decide hablar hay que prestar atención.
Quizás por estar relajado en pleno período festivo, el navarro concedió una nota en la que no se guardó nada. Comenzando por lo que espera a su formación en 2020. «Queremos que los jóvenes corran en torno a nuestros veteranos, sobre todo a la sombra de Valverde. El objetivo no es otro que ir creciendo poco a poco», dijo.
«Las clásicas de pavé van a cobrar cada vez más importancia en Movistar», indicó Unzué, haciendo un guiño a quienes lo han criticado durante años por no dar importancia a los adoquines.
Como no podía ser de otro modo, también analizó el paso y salida de Nairo Quintana. «Nairo ha sido un hombre clave, nos ha permitido durante cinco años soñar con una victoria en el Tour. Estuvo en 2013 y 2015 muy cerca de conseguirlo, pero ha tenido la mala suerte de toparse en esta década con Chris Froome», opinó.
«Cuando ves lo que ha supuesto para un país como el suyo…sentirnos partícipes del renacer del ciclismo latinoamericano es muy gratificante. Nos ha dado una solidez buenísima. Allá donde ibas con él sabías que era un hombre con capacidad de obtener resultados. Transmitía tranquilidad, sobre todo cuando la carrera picaba para arriba porque era un gran escalador», continuó.
«Hace unos años marcaba la diferencia en la montaña. La lucha contra el crono le apartó de cosas mayores, pero siempre las estuvo acariciando. No está con nosotros porque creemos que su momento para pelear por las grandes generales pasó, no por otra cosa», aseveró.
De cara a 2020, hizo un rápido análisis de los recorridos de las tres grandes. «Un año más, el Giro y la Vuelta son un poco imprevisibles, tienen de todo y son muy divertidas. Son dos carreras incontrolables y eso garantiza emoción y espectáculo. Sin embargo, en el Tour casi todo es bastante previsible. Está muy encorsetado, pero esta vez he de reconocer que lo veo diferente, como sin guión. Pueden ocurrir cosas interesantes. Va a ver un momento de la carrera que esa crono situada en el penúltimo día con final en la Planche des Belles Filles va a marcar la actitud de algunos equipos. Habrá gente que valore esa crono mucho más que nosotros», expresó.
«Ineos y Jumbo, principalmente, porque son 36 kilómetros de crono donde se pueden recuperar hasta dos y tres minutos fácilmente. Thomas, Froome, Dumoulin y Roglic, en teoría, tiene ahí un día donde saben que pueden coger una diferencia importante sobre los rivales. Son corredores que pasan muy bien la montaña, pero que en la crono van a marcar la pauta. Siempre les quedará esa opción. Nosotros apostaremos por la ofensiva. Les tenemos que poner a prueba en la montaña si queremos disfrutar de alguna posibilidad», avanzó.
Respecto a la llegada de Enric Mas y la partida de Mikel Landa, Unzué contó por qué decidió por el más joven. «Ya en la contrarreloj de Torrelavega en la Vuelta a España del 2018 me quedó claro. Me dije que Enric no se me podía escapar. A Mikel lo hemos tenido durante dos cursos y tiene una gran capacidad para iusionar a las masas, que aún sigue intacta. Es probable que algún día le termine de salir algo que con nosotros no ha podido ser, pero insisto en que Enric era la prioridad porque vi detalles de ciclista más completo».
Tras opinar sobre el tridente fallido de Movistar, y con el de Jumbo-Visma en auge, Unzué confesó su enojo durante el Tour 2019. «El único momento en el que me enfadé mucho fue la penúltima etapa en Val Thorens. Teníamos la oportunidad de acercar a Valverde a la altura de Nibali. Estoy seguro que hubiera ganado esa etapa con la colaboración de Mikel y Nairo, pero desgraciadamente no resultó. A Valverde le faltó decisión en los kilómetros finales, debería haberles dicho: «Oye, tirad que voy bien y puedo ganar». No lo hizo y creo que en ese momento era imprescindible haberlo hecho. Por respeto, por lo que sea, no lo pidió.Desde el coche les puedes indicar, pero a veces no ves lo que está pasando por delante, no te giras al monitor o la señal que te llega por radio no es la idónea. En esos momentos, donde te estás jugando una victoria con tu campeón del mundo, son ellos los que tienen que saber actuar por sí mismos. Son mayorcitos. Sabiendo como terminaba la etapa lo normal era que Nairo y Mikel le hubieran acercado en vez de atacar. Hubiera sido la leche ganar con el arcoíris, pero de nada sirve lamentarse ya..», narró.
«Les pregunté que si eran conscientes de la oportunidad que habíamos perdido. Había rostros de seriedad, lógicamente. Ese día en el Tour corrimos peor que un equipo de juveniles, como aquel que dice. No ya como juveniles, que ellos todavía… sino peor. No estuvimos a la altura. Sinceramente, le hecho más la culpa a Alejandro que a los otros dos. Nos quedamos con mal sabor de boca. Hubiera sido precioso ver a Alejandro cruzar la meta con el maillot de campeón del mundo, pero así sucedieron las cosas», añadió.
«Cada uno va a defender sus intereses. En un equipo, cuando uno se ve con opciones de hacer cosas importantes y sus otros compañeros no parecen estar finos, lo normal es que haya discrepancias y cada uno barra para su casa. La realidad es que en este último Tour hubo un grupo de cuatro o cinco corredores mejores y ya está. En el Tourmalet ya vimos que Nairo no estaba para disputar la carrera, vimos su debilidad.Es cierto que no dijo nada, pero si no lo hizo fue precisamente porque ya no estaba pensando en correr por la general. Fue entonces cuando apostamos por Mikel, que estaba muy seguro de sí mismo, y luego ya vés, en Prat d’Albis fuimos para adelante con mucha valentía. Metimos a Nairo en la fuga y esperamos el movimiento de Mikel, que demarró por detrás con mucha fuerza en busca de algo grande», rememoró.
«Cuando llegó a la altura de Nairo no obtuvo ayuda alguna por parte de Nairo, es cierto. No fue un detalle de compañeros. La actitud tiene que estar siempre por encima de todo y, desde luego, Nairo aquel día no la tuvo. Tenía que haber echado una mano, por mínima que fuera, para darle un respiro a Mikel. Es obvio y en las cámaras se vio. Lo que sí te digo es que estas cosas no fueron determinantes para que ninguno de ellos esté ya en el equipo. Rivalidades en Movistar ha habido muchas. Tuvimos la de Induráin y ‘Perico’ en su momento, también la de ‘El Chava’ y Olano… a nosotros todo esto nos pasa porque no siempre tenemos un líder claro. Insisto, prefiero que no lo haya. Me gusta jugármela a varias cartas en vez de a una..», aseveró.
«Este es un deporte de improvisación, donde pueden ocurrir muchas cosas. Entiendo que la gente nos compare con Ineos y otros equipos, pero yo no corro para la gente, que es muy apasionada y a veces es normal que se dejen llevar por eso. Además, Ineos engaña. Parece que son dos o tres gallos, pero en realidad siempre hay uno muy destacado. Se ha visto con Bernal y antes con Froome», analizó.
«Este Tour ha sido muy raro, marcado por una etapa donde faltaban unos cuantos kilómetros antes de suspenderse y podían haber pasado aún muchas cosas. Bernal se puso de amarillo y hasta ahí podemos leer. A Ineos la carrera se la hizo Deceuninck y cuando les tocó asumir la responsabilidad tuvieron hasta la colaboración de Pinot, que era la alternativa más clara y desgraciadamente se tuvo que retirar por lesión», aventuró.
Sobre la marcha de Richard Carapaz, Unzué fue clarísimo. «Me dolió el comportamiento de Acquadro, que jugó con nosotros pese a tenerlo hecho con Ineos desde hacía bastante tiempo. El propio Ineos nos lo dijo. Puedo entender que Carapaz se vaya, eso no se lo voy a discutir, pero lo que no puedo tolerar es que me engañen jugando con fechas. Eso no es de recibo. Desconozco por qué nos tuvieron a la espera, generándonos falsas ilusiones. Es ridículo. No puedo admitir esa actitud y esa es la razón por la que rompimos profesionalmente».
«Andrey Amador es corredor de Movistar a día de hoy. Tenemos un precontrato firmado por él y por su agente que está en disposición de la UCI para que resuelva. Para mí, la firma es algo muy serio. Tanto Amador como Acquadro están en una situación comprometida ante la UCI porque tienen dos contratos firmados: uno con nosotros y otro con los británicos», cerró.
Fuente El Confidencial