Cuando Juan Martinez Oliver aceptó las condiciones para ser seleccionador, sabía perfectamente que esta segunda fase iba a ser muy diferente de la primera, cuando contó con un amplio equipo desde el STRYC en Mallorca, con gran número de especialistas en todas las facetas. Algo que no se entendía muy bien dados los requerimientos de la pista, mientras que en carretera hay hasta cuatro seleccionadores y dos en BTT.
En esta ocasión, iba a ser el único técnico federativo de pista. Por ello, sabedor de todo el trabajo que hay que desarrollar en esta disciplina, quiso rodearse de un equipo de colaboradores externos de cara a poder desarrollar sus objetivos. Habló con todo el mundo de la pista -me consta- y algunos le dijeron que no, porque ya estaban escamados de experiencias anteriores; otros fueron vetados, por no se qué oscuras razones, pero sí hubo varios que se incorporaron a este nuevo proyecto, con la premisa de que es más fácil intentar hacer algo desde dentro que desde fuera… aunque el desencanto pudiera llegar en cualquier momento. De hecho, ninguna de estas personas -cuyos nombres no es necesario mencionar porque están en la mente de todos- ha tenido la continuidad necesaria, y siempre han sido vistos como elementos externos, como los ‘auxiliares’ que han acompañado ‘por días’ en las distintas actividades de la selección.
El único equipo fijo es el de rendimiento, aunque tampoco es personal federativo, sino que también ‘trabajan por días’. Algo que se considera como prioritario para la pista en estos momentos, aunque la verdad es que hay aspectos que deberían resolverse mucho antes, además de que en el apartado de preparación nuestros corredores tienen especialistas -pagados por ellos mismos- de altísimo nivel.
En este sentido, me gustaría romper una lanza por Manu Mateo, porque me costa que es un excelente profesional de la preparación física, pero él mismo reconoce su inexperiencia sobre la pista, como manifestó recientemente en el programa 57 de ‘El Avituallamiento’. El alicantino podría desempeñar trabajos de mayor utilidad en otros apartados federativos… mientras que en la pista hay personas con mucha más experiencia, algo que se necesita en estos momentos si realmente se quiere arrancar. En cuanto al otro Manolo, no puedo hablar ni mal ni bien de él porque no lo conozco, aunque sí hacer caso de algunas referencias fidedignas.
La baja médica de Juan Martínez Oliver ha puesto de manifiesto estas carencias, de no haber una estructura federativa. Los colaboradores externos no han recibido la confianza necesaria para coger el mando, sino que se ha recurrido a dos técnicos de la casa: en Glasgow estuvo el seleccionador de paraciclismo, Félix García Casas, y en Milton, la de féminas, Gema Pascual. Y a partir de este momento, y hasta la reincorporación del almeriense, será el madrileño quien tenga la responsabilidad del grupo, aunque todavía ni se ha oficializado -a nadie le sorprenderá la enésima falta de comunicación-, ni se ha podido poner a trabajar ya que estaba inmerso en el Campeonato de Europa. Evidentemente una solución de compromiso a la que jamás habría tenido que llegarse en caso de existir un organigrama para la pista.
Por cierto, Gema Pascual sí va a tener responsabilidad en la pista, pero no directa sino como coordinadora de féminas para todas las disciplinas. Un nombramiento del que tampoco se ha dicho nada -en la habitual política comunicativa de Ferraz-, pero que puede ser muy útil si realmente se quiere compatibilizar carretera y pista, en este caso para las féminas. Fue un esquema que funcionó muchos años en Italia y que en España es absolutamente necesario, aunque sea con menos medios que los que tuvo Dino Savoldi.
Pero haría falta mucho más. Aparte de ese técnico de rendimiento con experiencia en pista, se me ocurre a bote a pronto uno centrado en la velocidad, en todas las categorías, ya que el panorama es absolutamente desolador. Y es que habrá que buscar sprinters incluso debajo de las piedras. También sería necesario, un seleccionador de juveniles, que podría ser el mismo que el de carretera: es lo que está haciendo ahora Dino Savoldi en Italia, aunque también hay un ejemplo similar en Bélgica, con Nicky Cocquyt.
Puestos a pedir, que no quede, sería necesario otra persona que se centrase en aspectos de calendario: y es que cada vez es más necesario saber donde se va a correr para conseguir los dichosos puntos y llevarlos al día para no llevarnos sustos (como el que puede suceder este año). Oliver -y los ‘externos’- llevan tiempo avisando que hay que correr pruebas CL1 y CL2 y tan solo ahora a principios de junio se han percatado que hay que hacerlo de forma perentoria: por ello, la selección correrá este próximo fin de semana la Bahnen-Tourne en Singen (Alemania), ya con García Casas al frente… aunque ello le suponga no poder estar en el Campeonato de España de la disciplina de la que es el máximo responsable.
Y es que por muy buena voluntad, y sin dudar de la capacidad de los implicados, cuando una estructura no es válida, los parches nunca son soluciones. Y si es válida, no son necesarios.