El penúltimo día de esta su segunda Vuelta a España Juan Ayuso cumplirá los 21 años de edad. Es la jornada de la Sierra de Guadarrama, una clásica al estilo de Lieja preparada por si hay que que dar algún vuelco final como el de Delgado a Millar o el de Aru a Dumoulin. Si fuera así y se vistiera de rojo -y por ende blanco de mejor joven «que es especial para mí este año»- Ayuso se convertiría en el vencedor más joven de la gran ronda española superando a otro valenciano, Angelino Soler, que lo logró en 1961 con también 21 años pero con más días de vida. Pero para llegar a ese éxtasis la empresa es gigantesca. Es cuarto en la general a 2:37 de Sepp Kuss y en medio dos estrellas como Roglic y Vingegaard del mismo equipo Jumbo. Todo un reto mayúsculo que Ayuso -ambición innata- no rechaza a pesar del enorme muro.
«El podio ya lo hice el año pasado y este año me veo más cerca de los primeros, más solido en carrera y que estoy dando un paso adelante. Por eso si tengo arriesgar mi cuarto puesto intentándolo lo voy a hacer, aunque luego acabe quinto o sexto. Eso no sería el fin del mundo, prefiero que pase a no intentarlo y luego pensar en qué hubiera pasado. Acabar cuarto como voy ahora no sería un fracaso tampoco» dijo en la conferencia de prensa telemática del equipo UAE a la que asistió este medio.
Después del año pasado, donde toleró bien las tres semanas para acabar en el erróneo podio de La Cibeles tras Evenepoel y Mas -Roglic abandonó días antes- Ayuso opina que su cuerpo va a más y ya piensa en la dupla asturiana. «Me vale ir a mejor ante lo que queda. Ya más en serio creo que voy ir a mejor, pero me pueden fallar las piernas. Pero tengo que estar convencido de que voy a ir a mejor y pensar en positivo y con confianza. Lo voy a intentar en Asturias que es donde se va a jugar la carrera y hacer las diferencias y darlo todo en la etapa de Guadarrama si hace falta, un día donde se hacen».
Preguntado por el marcaje casi baloncestístico de Roglic a su rueda, Ayuso bromea. «Me paro a mear y lo tengo detrás mío». Pero en serio cree que en Jumbo no va a haber guerras internas para ser el primer equipo de la historia en ganar las tres grandes vueltas el mismo año. «Me extrañaría mucho que Roglic y Jonas Vingegaard se comportaran mal con Kuss y por ello perdieran la carrera y más lo que ha hecho Kuss con ellos tanto en el Giro como en el Tour y en años precedentes. Dudo mucho que pase eso».
Y más porque el estadounidense de Durango, casado con una española y vecino suyo en Andorra, es, según él, el más fuerte además de la ventaja acumulada tras la etapa de Javalambre que a la postre puede marcar esta 78ª edición. No se atreve a decir tampoco quièn puede fallar pra darle acceso al podio. «No sé quién es más vulnerable de los tres, pero sí que veo que Kuss es el más fuerte de verdad. Se va a decidir en los días que vienen. No me atrevo a decir quién está mal porque puede que el que diga gane la carrera. Vamos a intentar forzar una situación en la que al menos uno tenga que sufrir y perder tiempo».
El UAE también tiene tres elementos entre los diez primeros con Marc Soler sexto y João Almeida, décimo. «No creo que ninguno de los tres tenga que sacrificarse por el otro. Puedes poner ritmo o entre comillas sacrificarse con un ataque de lejos y poner bajo presión al Jumbo y les pille vacíos. Dudo mucho que en esta Vuelta se dé esta situación en la que pueda decir a Almeida o a Soler que pongan un ritmo fijo porque es lo que beneficia a Jumbo y le estaríamos haciendo un favor».
Un Ayuso –TOP Ciclo 21 al mejor ciclista español joven de 2022– que tiene otra ocasión en su imberbe carrera para seguir ascendiendo galones en un grupp que. cada vez le respeta más. «Viene un poco indirectamente. El año pasado era muy joven, debutante y pensaban si era bueno o no. Con los resultados voy notando ese mayor respeto respecto al año pasado»