Comunicado oficial de Vicente Alumbreros, vicepresidente económico de la RFEC
«Para que el ser humano comprenda cualquier situación o valor tiene, necesariamente, que comparar con un patrón que sirva de modelo o con referencias equivalentes o históricas.
Al inicio de 2013 y después de conocer la situación patrimonial de la RFEC al cierre del ejercicio 2012, la recuperación económica se convertía en el principal objetivo, muy por encima de cualquier otro problema del ciclismo y de la RFEC, que los tienen. Si no hacíamos viable económicamente la RFEC, todo lo demás carecería de importancia.
El primer reto consistió en afrontar el diseño del presupuesto con mayor dificultad de planificación de los últimos diez años. Difícil por las incertidumbres sobre la previsión de ingresos. Difícil por la necesidad urgente de aplicar una limitación de gastos drástica. Y difícil porque los presupuestos de años anteriores no valían, habían resultado escandalosamente deficitarios.
Ya en las primeras valoraciones, el endeudamiento record de más de 3,6 millones de euros se presentaba como el principal asunto a resolver. Algunas voces advertían de la obligación legal de declarar el concurso de acreedores como medida de responsabilidad de la actual dirección. Me alegro de haber recibido el apoyo de Junta Directiva y Comisión Delegada por confiar en que se podía superar la situación con nuestros propios medios en vez de abandonar a su suerte a la RFEC dejándola en manos de administradores concursales.
Superada la sombra del concurso de acreedores, el plan de viabilidad tenía que dar respuesta tanto a requerimientos del CSD como a necesidades internas de conocer hacia dónde vamos. El primer año del plan, 2013, no podíamos aventurar un resultado que supusiera una expectativa irreal. Los siguientes años necesitaremos generar superávit suficiente para que en un tiempo razonable el endeudamiento alcance los niveles adecuados para atender los pagos a terceros en un plazo corto o inmediato.
La situación patrimonial y el resultado económico al cierre de 2013 nos permite afirmar que a pesar de las dificultades, el primer paso se ha dado en la buena dirección. Daré dos datos clave: Uno, presupuestariamente se ha registrado un resultado positivo de unos 30.000 euros. Poco, pero más de lo previsto para este año. Dos, desde el punto de vista patrimonial, el endeudamiento se ha reducido más de 651.000 euros, situándola en un solo año en torno a los 3 millones de euros. Buenos datos.
Lejos de lanzar un mensaje triunfalista, pues solo es un primer paso que deberá consolidarse en el presente ejercicio y siguientes, sí es un mensaje esperanzador que permite confiar en las posibilidades de recuperación de la RFEC. Si bien, habrá que esperar al último año de la actual presidencia para romper con la tendencia de las últimas presidencias en cuyos últimos años se dispararon las pérdidas.
Por último, es justo reconocer que todas las personas y entidades que participan de forma directa o indirecta en la RFEC, léase federaciones territoriales, árbitros, deportistas, trabajadores, técnicos y directivos están actuando con plena fidelidad a los objetivos marcados. Gracias a todos».