Chris Horner no repetirá triunfo en la Vuelta

Horner, eln el podio de Madrid en 2013

Nicolás Van Looy / Ciclo 21

A falta de poco más de 24 horas para que se dé el pistoletazo de salida de la 69ª edición de la Vuelta a España, el equipo Lampre-Merida se ha visto obligado a anunciar la gran sorpresa de la jornada: Chris Horner, su jefe de filas y vigente campeón de la ronda española, no será finalmente de la partida.

Todo deriva de una bronquitis que el corredor viene arrastrando desde el pasado Tour de Francia y que no ha sido capaz de superar desde entonces. A pesar de su buen rendimiento en el Tour de Utah (2.1), -segundo tras Danielson con puertos a 3.000 metros de altitud- el corredor ha sido tratado de manera constante con cortisona para remitir dicha dolencia, pero finalmente no ha podido sanar a tiempo y ha tenido que optar por no tomar la salida.

Pero el caso no es tan simple como pudiera parecer ya que no es la bronquitis en si la que obliga a Horner a quedarse en casa, sino que, como ha explicado en un comunicado hecho público esta misma mañana Lampre-Merida, son sus bajos niveles de cortisol a causa del tratamiento. Esto, aunque no incumple ninguna norma de la UCI, violaría las normas del Movimiento por un Ciclismo Creíble (MPCC), del que el equipo es parte. El doctor Carlo Guardascione explica que “tras finalizar el Tour de Francia y el Tour de Utah, donde el corredor todavía padecía la bronquitis, Chris Horner fue examinado por dos especialistas. Ambos coincidieron en que el único tratamiento posible para resolver el problema era el de la administración de cortisona por vía oral. Completamos todos los pasos necesarios para obtener un permiso por parte de la UCI para el uso terapéutico de este medicamente, permiso que nos fue concedido el día 15 de agosto”.

El galeno del conjunto continúa asegurando que “este tratamiento puede causar una bajada en los niveles de colistrol. Tras unos análisis de sangre llevados a cabo por la UCI, se evidenció que los valores de colistrol estaban por debajo del mínimo requerido por el MPCC, así que la decisión del equipo ha sido la de no permitir al corredor correr la Vuelta aún teniendo todas las autorizaciones de la UCI para hacerlo”.

El propio corredor, que permanecerá en tierras andaluzas para entrenar hoy junto al resto de sus compañeros, ha manifestado que “por supuesto que estoy triste. Quería defender mi título de vencedor de la Vuelta a España 2013. Era mi gran objetivo esta temporada. El equipo me contrató con el objetivo de ser competitivo en esta carrera, pero acepto la decisión y las normas del MPCC”. El estadounidense, al igual que el Dr. Guardascione, quiso aclarar que “esta bronquitis me ha causado muchos problemas. La he estado sufriendo durante varias semanas y este tratamiento me hubiese permitido curarme. La UCI me dio el visto bueno para el tratamiento y, conforme a sus reglas, podría correr, pero mi equipo es miembro del MPCC y entiendo que todos debemos de aceptar esta situación sin excusas”.

Recordamos que el año pasado el holandés del Belkin, Theo Bos, no salió en la salida de la batea gallega por el mismo motivo por el que Horner es baja.

Valerio Conti, corredor de 21 años sin ninguna experiencia previa en carreras de tres semanas, ha sido el elegido por el Lampre-Merida para sustituir a su jefe de filas. El italiano llega a Jerez de la Frontera tras una temporada en la que lo más destacado de su palmarés es el sexto puesto del Campeonato de Italia de contrarreloj y el séptimo puesto en la clasificación del mejor joven del Tour de Utah.

Este caso vuelve a empañar la imagen del equipo Lampre-Merida que ya sufrió un problema derivado de un tratamiento médico de uno de sus corredores durante el pasado Giro de Italia. En aquella ocasión fue Diego Ullisi quien dio positivo por salbutamol en la undécima etapa de la carrera, días después de haber conseguido dos victorias parciales. En aquel momento el corredor y el equipo –que le suspendió de manera inmediata– responsabilizaron de ese positivo a un tratamiento con Ventolín y paracetamol para tratarse de una serie de broncoespasmos.

Todo ello se une, además, al muy polémico caso Mantova que sigue su curso y que es uno de los grandes escándalos del ciclismo italiano de los últimos años y por el que el juez imputó a nada más y nada menos que 27 miembros del conjunto Lampre-Merida.