Ciclo21 Portal de ciclismo
Van Aert batiendo a Nys
Rodrigo Díaz de Vivar, El Cid Campeador, estaba ya cadáver cuando su mujer, Doña Jimena, convertida ya en Señora de Valencia, le subió a lomos de Babieca y lo lanzó contra los enemigos que sitiaban la ciudad. Aquellos, aterrados al ver al Rey enemigo, al que consideraban muerto, se rindieron y huyeron despavoridos. La historia, más o menos cierta, serviría para motivar al que muchos consideran ya un cadavérico rey del ciclocross mundial: Sven Nys.
La gran diferencia, claro, es que Babieca sí podía cabalgar por propia iniciativa. Nys, si quiere emular al Cid, tendrá que dar pedales, pero cuidado con darle por muerto. La decisión de su compatriota y quizá heredero Wout Van Aert puede, de alguna manera, tornarse en la mejor noticia para el corredor de Baal en su gran objetivo de la presente temporada tras los fiascos en las distintas competiciones de la regularidad: el Mundial de Tabor.
Hace ahora poco menos de doce meses, Nys y Stybar nos regalaron una de las mejores carreras de los últimos tiempos. El veteranísimo belga estuvo muy cerca de conseguir su tercer maillot arcoíris, pero finalmente y tras un combate antológico, tuvo que claudicar ante el checo.
Wout Van Aert partirá en Tabor como uno de los grandes favoritos. Una rueda a vigilar. El hombre sobre el que todos los ojos estarán puestos, pero también un chaval de 20 años que nadie sabe si será capaz de soportar la presión extrema de verse como uno de los máximos aspirantes a una carrera tan complicada como un Mundial. Una prueba en la que se lo jugará todo a una carta, como ya le ocurriera en el pasado Nacional y en el que no supo o no pudo gestionar bien la prueba.
Esto, sin duda, beneficiará a un Nys que tras una temporada para olvidar ha comenzado a dar algunos destellos de esperanza a sus aficionados. Correrá sin presión. Si no gana, será lo normal tras unos meses en los que su decadencia se ha hecho evidente. No será el otrora líder indiscutible del combinado belga, pero nadie en su sano juicio se atreverá a imponerle que trabaje para otro corredor, algo que, por otra parte, es muy complicado de conseguir en el ciclocross. Pero, sobre todo, después de 16 participaciones será uno de los corredores con más experiencia mundialista, algo vital a la hora de afrontar los momentos más complicados y estresantes en una prueba que no permite margen de error alguno.
El Mundial, salvo descomunal sorpresa, no será una pelea entre dos. No será un combate entre Van Aert y Nys. O entre Van Aert y cualquier otro. No será un calco de lo que vimos hace 12 meses porque desde entonces las cosas han cambiado mucho. En este año 2015 habrá más favoritos, pero de eso ya hablaremos en su momento. Mientras el día se acerca, sin embargo, una de las principales incógnitas se ha desvelado. Van Aert estará con los profesionales, algo que obligará a más de uno a replantearse la carrera de otra manera. “Le ves correr y es como si vieras a Niels Albert, que por algo es su entrenador”, nos decía Stybar recientemente. “Me encanta esa manera de plantear las pruebas. Atacar para intentar reventar a todos los demás”, concluía el checo.
De lo que no cabe duda es que uno de los más beneficiados es un Nys que, aunque no consigue dar el paso definitivo que le vuelva a situar con los mejores, no está tan descolgado y que, como ocurrió con El Cid, no se puede descartar que pueda ganar una batalla, la única que todavía podría ganar en este año, incluso después de muerto.
Babieca, por cierto, no volvió a ser montado por nadie hasta su muerte dos años más tarde. Si Nys fracasa, claro, la gran pregunta que rondará será saber si volverá a montar sobre su bici una temporada más.
