Aguascalientes: un momento histórico para la pista que tardará en repetirse

La alegría de Pervis © UCI

Tengo que reconocer que, aunque personalmente he disfrutado como un enano, me molesta que la recientemente finalizada Copa del Mundo de Aguascalientes no haya tenido apenas trascendencia en un fin de semana de ocio en el que debería haber brillado con luz propia. Desgraciadamente la pista –igual que el BTT, el BMX o el ciclocross- sigue siendo una disciplina olvidada, incluso marginal, para buen número de aficionados a este deporte para los que ciclismo es sinónimo de ciclismo en carretera, y que estuvieron más pendientes del sorteo del Mundial de fútbol, por ejemplo, que de lo sucedido en México.

Los que sí estuvimos pendientes de Aguascalientes, aunque fuese desde la distancia, hemos tenido la suerte de vivir un momento histórico para esta disciplina que tardará años en volver a repetirse. Y es que del velódromo hidrocálido salimos con seis nuevas plusmarcas mundiales, más las que se batieron de forma provisional. Es cierto que la altitud de esta localidad mexicana -1.800 metros- ha contribuido decisivamente para esta avalancha de récords, lo que ha servido a algunos para minusvalorar estos registros. Pero esto también es parte del espectáculo de la pista. Y todos los pistards que se dieron cita lo sabían, por lo que salieron con hambre de récords.

De los seis, me quedo con los dos logrados por François Pervis, porque se habría preparado meticulosamente, mejor dicho “como un perro y un miserable”, para batir estas dos plusmarcas. “A fuerza de perseverancia se llega”, tuiteaba el galo, que lograba una merecida recompensa a doce años de sacrificios. De esas dos plusmarcas, no sé si darle más valor a los 9-347 de los 200 metros –dos décimas menos que el anterior registro-, o a esos 56-303 del kilómetro, que terminaban –y por dos segundos y medio, nada más y nada menos- con la mítica marca lograda por su compatriota Arnaud Tournant en su agónica tentativa en La Paz, en 2001, cuando se convirtió en el primer hombre en bajar del minuto en esa distancia. El caso es que Pervis se ha ganado para siempre un rincón de mi corazón pistero.

Pero también quiero rendir homenaje a la germana Kristina Vogel, una ciclista muchas veces eclipsada por los méritos o el carisma de la ‘aussie’ Anna Meares y de la británica Vicky Pendleton, pero que se iba de tierras mexicanas con dos récords del mundo en velocidad: 10-384 en solitario y 32-153 por equipos.

Para la delegación española, Aguascalientes no fue nada mal. Aparte de clasificaciones mundialistas aseguradas y ese oro de Muntaner y Torres, cinco ‘mejores marcas’ que no sabemos si se convertirán algún día en récords o no, ya que el requisito de tener que pagar por el control obligatorio –si no te toca por puesto o por sorteo- retrae lógica pero injustamente muchas candidaturas.

Quitando de la tabla la absurda y obsoleta marca de 500 metros lanzados –que no tiene ningún sentido al no haber prueba específica y ser una distancia ‘al paso’-, es así como quedaría la tabla de mejores marcas nacionales, que puede ser muy distinta a la de los records homologados y certificados:

HOMBRES ÉLITE

MUJERES ELITE

Por cierto, no hay ninguna marca femenina sobre 4.000 metros desde que se cambió la composición y distancia de la persecución por equipos femenina, ni tampoco del record de la hora al modo tradicional, mientras que la marca masculina data de 1971. ¿Alguien se anima, aunque no haya que ir a Aguascalientes?

Uluru, el blog de Luis Román-Mendoza