Tras un obligada pausa de competición, crónico pan de cada día en las escuadras continentales, el Euskadi vuelve a la carga en Portugal. Será en la Volta ao Alentejo, una prueba clasificada como UCI 2.2 que se disputará entre los días 26 y 30 de marzo en la que las opciones de un ilusionado Carlos Barbero podrán multiplicarse. Él no lo oculta: conoce la carrera y le gusta, aunque de nuevo sea otro viaje de carretera y manta.
El fino corredor de la escuadra vasca (22 años y natural de Burgos) llega con buen feeling: “he disputado ya carreras de alto nivel desde Mallorca, pero a pesar de no haber conseguido ningún resultado reseñable me veo con una buena condición física y espero seguir progresando”, destaca.
Almería fue su último test, pero los entrenamientos posteriores le han seguido dando buenas vibraciones: “de forma creo que llego bien, aunque desde Almería no compito y eso es un poco una incógnita, pero en los continentales es nuestro pan de cada día”, señala con la vista sumida en un cierto aire de resignación. Pero, de nuevo, su sonrisa es la que toma la batuta para añadir que: “he realizado la preparación sin ningún contratiempo en Burgos y tres días en Euskadi en la concentración del equipo”, finaliza.
Por ello, el bravo corredor del Euskadi se siente preparado para afrontar una prueba que, al oír su nombre, le provoca una inconsciente sudorificación en las manos, síntoma inequívoco de ansia por tomar la salida: “allí ya hice cuarto en una etapa y noveno en la general, así que no escondo que es un prueba que me gusta mucho porque se adecua mucho a mis características, por eso intentaré mejorar los resultados del año pasado. De hecho, siempre me pongo esa meta: mejorar lo del año anterior”, zanja con bravura.
Desde la escuadra vasca tampoco esconden su interés por realizar un buen papel en Alentejo, por lo que Carlos sin duda, se ofrecerá para que, si se lo solicitan, cuenten con él: “de momento no hemos hablado del tema, pero es evidente que en este tipo de pruebas, en las ‘.2’, el equipo tiene que dar la cara e intentar cosechar buenos resultados. Por eso, ojalá que me manden coger el peso en algunos momentos, eso sería buena señal y habrá que intentar aprovechar la oportunidad”, explica.
Fuente: Rafa Simón. Prensa Carlos Barbero