Mundial pista: Jornada de transición en París

La penúltima jornada de los Campeonatos del Mundo de pista de Saint-Quentin-en-Yvelines no ha tenido ningún resultado reseñable para la expedición española, a la espera de que mañana se logre un nuevo metal en esa esperada madison con David Muntaner y Albert Torres, y a que Leire Olaberria pueda mejorar la octava plaza que ocupa en el omnium.

La vasca comenzaba su participación con la décima posición en un scratch marcado por cuatro corredoras que ganaron vuelta y se clasificaban por este orden: la lituana Ausrine Trebaite, la danesa Amalie Dideriksen, la irlandesa Caroline Ryan y la bielorrusa Tatsiana Sharakova, con un gran marcaje de las favoritas.

3:39.903 fue el registro de la española en la persecución, en la que terminaba novena –aunque ello le suponía perder una plaza en la general provisional-. En esta prueba se comenzaban a colocar las ‘grandes’: se imponía la británica Laura Trott (3:32.798) mientras la australiana Anette Edmondson, segunda (3:32.831), pasaba a liderar la general.

Finalmente la española terminaba octava en una eliminación que corrió muy inteligentemente, aunque se confiaría en el sprint que le costó quedarse fuera, en una prueba que se llevaba nuevamente la inglesa Trott.

De esta forma, la general pasaba a estar liderada por Kristen Wild –que también ganaría el scratch entre medias- pero muy apretada: 102 puntos por 98 de Edmondson, 96 de Trott o 92 de la belga Jolien D’Hoore. La española suma 72 puntos, es decir, a no demasiada distancia. Mañana Leire afrontará las tres últimas pruebas en la última jornada de los Campeonatos, la más madrugadora tanto para comenzar como para terminar (11,00 a 13,10 y 14,00 a 17,15). Por la mañana competirá en 500 y vuelta lanzada, por la tarde, en puntuación, con un dato que no debe quedar en anécdota: el horario más reducido de este último día supone un menor descanso entre prueba y prueba.

También la velocidad vivirá mañana la fase decisiva con cuartos de final (Denis Dmitriev-Sam Webster, Gregory Baugé-François Pervis, Hersony Canelon-Quentin Lafargue y Jeffrey Hoogland-Matthew Glaetzer), semifinales y final, en un torneo en el que Pepe Moreno se quedaba sin pasar el corte con una gran marca personal (10.218), pero lejos de esa elevadísima frontera del 9.9 que determinaba la continuidad.

Juan Peralta registraba por su parte 9.845, que le suponía la decimosexta plaza y medirse en primera ronda con un rival a priori asequible como el francés Michael D’Almeida, pero que contaba con la ventaja de correr en casa… y que pudo imponerse en un cerrado final, saldado por la foto-finish, con lo que el navarro terminará la velocidad en el puesto 17. “Pienso que he hecho un buen tiempo en los 200 y que tácticamente he corrido bien frente al francés, pero no he podido hacer más. Por ello me voy tranquilo, y porque seguimos sumando puntos para Río”, explicaba el navarro.

Pasando a la persecución, Sebastián Mora terminaba por debajo de lo esperado, en el puesto decimocuarto con un registro de 4:27.898 (tres segundos por encima del marcado el año pasado cuando fue noveno). Pese a ser una de las pruebas más afectadas y devaluadas por el cambio del programa olímpico, tanto el australiano Jack Bobridge como el suizo Stefan Kueng ofrecían un gran espectáculo con victoria en la final para el segundo, después de haber ido por debajo en toda la prueba, por apenas dos décimas (4:18.915 a 4:19.184). El podio lo completaría el francés Julien Morice, ganador del ruso Alexander Serov.

Valiente Sheyla

Ya por la tarde, el debut mundialista de Sheyla Gutiérrez en el scratch, donde demostró no tener complejos, lanzando un fortísimo ataque, a falta de 32 vueltas, que estuvo a punto de sorprender al pelotón, aunque moría diez vueltas más tarde. La riojana lo pagó sin poder terminar, agotada, pero mostró una valentía en una carrera en la que tenía todo que ganar y nada que perder. Destacar igualmente el poderío de la ganadora, la neerlandesa Kirsten Wild que esprintó a falta de tres vueltas y aguantó la posición, superando a la australiana Amy Cure y a la francesa Pascale Jeuland. ¡Y eso que la ganadora estaba embarcada hoy en la disputa del omnium!

“Como iba la carrera tan lenta he pensado que podía intentarlo –contaba Sheyla-. Sabía que era difícil pero que podía lograrlo si no reaccionaban rápido. Me ha faltado poco, pero no ha podido ser. Ahora mismo me da rabia, porque de esta forma perdía mis opciones para el final. Pero tenía que jugármela. Lo mejor es que cada vez me siento mejor en la pista, que disfruto mucho y que cada vez voy cogiendo más experiencia, que es lo que me hace falta”.

En cuanto a Unai Elorriaga, sin opciones ya, se limitó a cubrir el expediente del kilómetro (19º, 1:06.134) y la vuelta lanzada (20º, 13.546), con el fin de quedarse por lo menos con un sabor menos amargo en la puntuación. Y allí se le vio mejor, pero no le sirvió para mejorar ninguna posición final, terminando vigésimo.

Ello se debió en parte por el marcaje de los que se jugaban el triunfo absoluto. Fernando Gaviria y Elia Viviani llegaban separados por seis puntos, y el italiano se puso a sólo uno aprovechando una caída de su rival coincidiendo con el segundo sprint. Pero el colombiano reaccionó inmediatamente y ganó vuelta, con lo que su liderato ya no se vería en apuros en el resto de la prueba. Incluso Viviani al final se veía relegado al bronce, al ganar vuelta el australiano Glenn O’Shea, que terminaba con 190, por 205 del ganador y 181 del transalpino.

Finalmente reseñar el triunfo de Kristina Vogel en la velocidad femenina, en la que hizo valer su experiencia ante la neerlandesa Elis Ligtlee, con lo que la germana revalidaba el título de Cali. El bronce, para la china Tianshi Zhong.

“Ganar, ganar y ganar”

Muntaner y Torres, a defender el arcoíris

Aparte de esa segunda jornada del scratch femenino y las tres últimas rondas de la velocidad masculina, el último día del Mundial tendrá como prueba estrella la madison en la que David Muntaner y Albert Torres defienden ese arcoíris logrado brillantemente en Cali. La cita será sobre las 15:45.

“Como decía Luis Aragonés, ganar, ganar y ganar. Son los campeones del mundo y tienen que salir a por todas aunque hay muchos rivales peligrosos. Es cierto que Francia y Bélgica no tienen a alguno de sus mejores hombres, pero siempre son peligrosos. Austria puede ser la sorpresa, y hay otras muchas selecciones como Italia, Australia…”, comentaba el seleccionador antes de iniciar el Campeonato.

De esta forma, los belgas, ausentes Danny De Ketele, opondrán a Jasper De Buyst y Otto Vergaerde, mientras que los anfitriones presentan a Brian Coquard y Morgan Kneisky, un dúo muy sólido. La pareja austriaca –campeones de Europa el pasado mes de octubre- será la formada por Andreas Graf y Andreas Muller, mientras que Italia opondrá a Elia Viviani y Marco Coledan, y Australia a Jack Bobridge y Glenn O’Shea, un dúo poco habitual pero con dos corredores muy sólidos y experimentados. Eso sí, habrá que ver si algunos de estos dúos acusan la presencia hasta hoy en el omnium, caso de De Buyst, Viviani y O’Shea, por ejemplo.

La participación española se completa con el keirin femenino, con Tania Calvo pensando en sumar puntos para los Juegos Olímpicos de Río. Para la alavesa, llegar a semifinales sería un excelente resultado. Con excepción de la rusa Anastasia Voinova, las protagonistas serán las mismas que en la velocidad: la alemana Kristina Vogel, la neerlandesa Elis Ligtlee, las australianas Stephanie Morton y Anna Meares, o las chinas Shuang Guo, Junhong Lin y Tianshi Zhong. Ojo a las orientales que han sido las ganadoras de las tres mangas de la Copa del Mundo este año.

Fuente: RFEC