Ya tuvo (al menos, documentado) un contacto con el ciclismo cuando John Degenkolb se puso en sus manos tras el atropello múltiple que sufrió entrenando junto a sus compañeros del equipo Giant en las proximidades de Calpe en enero de 2016. El cirujano Pedro Cavadas ha tratado ahora de ayudar a otra víctima de un atropello, también muy mediático, como fue el sufrido en Oliva por cinco ciclistas en mayo de 2017. Tres de ellos murieron a consecuencia de aquel suceso y uno de ellos, Scott Gordon, sigue, casi dos años después, arrastrando muchos problemas de movilidad que ahora trata de dejar atrás tras ponerse en manos del reputado galeno valenciano.
Según publica en su edición de hoy el rotativo alicantino Información, Gordon todavía necesitaba muletas para caminar a consecuencia de que el fémur de su pierna izquierda no soldaba. Para tratar de solucionar este problema, Gordon se había sometido ya a cinco intervenciones quirúrgicas, aunque ninguna de ellas tuvo el resultado esperado.
Para la sexta operación, que espera que sea la definitiva, Scott Gordon se puso en manos del doctor Cavadas, que le intervino la pasada semana en la Unidad de Microcirugía y Cirugía Reconstructiva del Hospital de Manises (Valencia).
En declaraciones recogidas por el mismo medio, Gordon, que regresa hoy a casa para seguir con su proceso de recuperación, asegura que Cavadas “es un excelente médico y una magnífica persona”.
La intervención llevada a cabo por Cavadas y su equipo ha tratado de reconstruir el fémur del paciente ya que existía el peligro de que perdiera de forma definitiva la movilidad de esa extremidad. Se espera que Gordon dé más detalles sobre la operación y su pronóstico una vez se haya vuelto a instalar en su casa de Jávea.