Redacción / Ciclo21
Alberto Contador tiene clarísimo su futuro. No seguirá. Da igual lo que pase, da lo mismo lo que le digan ni el resultado que obtenga en esta Vuelta a España. Ya lo dijo y lo mantiene: «Independientemente del resultado de la Vuelta no habrá cambio. Estoy seguro de mi decisión», ha manifestado en la rueda de prensa previa al comienzo de la Vuelta a España mañana en Nimes (Francia). El de Pinto estará pendiente, en esta edición, tan solo de él mismo: «Es una incógnita cómo voy a rendir».
El dorsal número 1 de esta edición de la ronda española ha especificado que su adiós estaba decidido «al 70 por ciento antes del Tour», aunque con su director, Luca Guercilena, surgió la opción de alargarlo hasta el Giro de 2018. «La respuesta sabía que me la daría el Tour y no porque ganase a o perdiese. Llegaba en óptimas condiciones, pero lo vi claro ya en la novena etapa y tomé la decisión definitiva», ha reconocido el de Pinto, aun estando convencido de que su llegada al Tour fue buena, «en el peso óptimo y con números en los entrenamientos de los mejores, como en 2014, pero llegaron las caídas que no estaban en el plan».
Para la Vuelta, su objetivo es «dar el máximo, como siempre»: «Voy a ser profesional hasta el último día, va a ser especial y voy a disfrutarla al máximo. Creo que es el sitio idóneo para despedirme».
Froome y Nibali, sus favoritos
Contador cree que hay dos corredores que son más favoritos que otros: Chris Froome (Sky) y Vincenzo Nibali (Bahrain Merida). «El mejor preparado es Nibali y el favorito es Froome porque es muy fuerte en la contrarreloj y por su equipo, en el que sus gregarios serían líderes en otro equipo», ha afirmado.
Eso sí, el madrileño no descarta otros corredores siempre con la incógnita de cómo llegarán a la carrera después de haber estado luchando al máximo nivel en el Tour. Para Contador, algunos de esos nombres son Fabio Aru (Astana), Romain Bardet (AG2R) y Adam Yates (Orica Scott). Pero el corredor del Trek-Segafredo es consciente de que llega en idénticas condiciones que estos tres. Es decir, con cansancio: «Nunca había acabado el Tour y había hecho la Vuelta, siempre había venido tras un percance como en 2014 y 2016. Es una incógnita cómo voy a rendir».
Contador,por otra parte, ha negado rotundamente que su proyecto de equipo continental haya influido en su decisión de abandonar el ciclismo de elite, aunque también ha manifestado su ilusión por poder dedicarle a partir de ahora más tiempo porque considera que se va a convertir «en un proyecto referente que dará la oportunidad a muchos jóvenes».
CHRIS FROOME:
«Es una carrera en la que realmente disfruto compitiendo cada año. Es un desafío. Traemos el equipo más fuerte que hemos puesto nunca en la línea de salida. Es importante después de haber tenido un equipo tan fuerte en el Tour de Francia. Es un conjunto bien equilibrado y fuerte. Hay una sensación de sentimiento en el equipo mayor que en otras ocasiones. Obviamente es complicado volver a alcanzar un mes después el mismo nivel de forma tras el Tour de Francia, pero realmente disfruto ese desafío».
ESTEBAN CHAVES:
«Es cierto, tenemos un equipo muy fuerte y vamos a ir como siempre día a día en una Vuelta que tiene un recorrido bastante duro y que no es fácil. He trabajado para mantener la condición física que tenía. Al final del Tour llegué bastante tocado, aunque cada carrera es diferente y la Vuelta también lo es. El recorrido es muy duro, con llegadas muy explosivas. La Vuelta siempre nos sorprende con finales inéditos».
FABIO ARU:
«Ha sido una temporada particular, con infortunios, no pude ir al Giro e hice el Tour. Llego bien a la Vuelta, no tengo dudas, pero tampoco sé cómo estaré. Es la primera vez que hago dos grandes vueltas en la misma temporada. Tengo mucho que ganar y poco que perder. Me he entrenado bien sin hacer demasiado trabajo, pero no he hecho ninguna prueba, así que no conozco mi nivel exacto de aptitud. Creo que puedo hacerlo mejor que en el pasado. Froome demostró que se puede hacer el doble el año pasado al terminar segundo en la Vuelta después de ganar el Tour. Es el corredor a batir y luego todos estamos al mismo nivel: Nibali, Majka, Chaves, los hermanos Yates, Bardet y Barguil. Como yo, casi todos han hecho el Tour y su estado puede ser una incógnita. También tenemos que estar listos para el viento en la etapa del domingo y en Andorra será un choque importante antes de afrontar el primer final en alto el quinto día».
VINCENZO NIBALI:
«Me siento muy bien y espero ir demostrándolo día a día. Hice un buen entrenamiento en los Dolomitas, donde encontré las sensaciones que buscaba, y luego en la Vuelta a Polonia también me encontré bien, en una carrera que se adaptaba a corredores agresivos. [Sobre su expulsión de la Vuelta en 2015] cosas como esas pasan mucho, por supuesto que no fue agradable. Lamentablemente hizo que la gente pensara que Nibali se agarra a los coches para ganar carreras, sin pensar que me había caído y había perdido más de un minuto. Para mí es todo pasado y no creo que tenga que demostrar nada nadie».
ROMAIN BARDET:
«Mi objetivo principal es descubrir la Vuelta, es mi primera experiencia en esta carrera y mi estreno en dos grandes en una misma temporada. Entro en lo desconocido, pero estoy contento por afrontar este reto. No he corrido nada desde el Tour, estuve descansando y desde hace 10 días me he entrenado para llegar a la Vuelta lo mejor posible. Me encuentro en forma y quiero luchar para ganar etapas. Hay 12 ó 15 jornadas que se adaptan a mis características».