Alberto Contador tiene ante sí un reto formidable. Restar casi 3 minutos al líder Nairo Quintana en las 11 etapas que restan hasta Madrid. No es una tarea imposible para un corredor de su perfil, pero sí harto complicada teniendo por delante -además del colombiano-a corredores como Valverde, Froome y Chaves. «Las opciones de victoria son muy pocas» fue su titular en la rueda de prensa que ofreció en Gijón.
«Estoy bien, intentaré dar el máximo y hacer cosas buenas. Estoy a 3 minutos de Nairo, que está muy fuerte y tiene un equipo potente. Si continúo en la Vuelta no es por seguir en carrera, es para hacer cosas. A nivel mental estoy lejos en la general y las opciones de victoria son muy pocas. Si acabo con un abandono el Tour y Vuelta no hubiese sido buena forma de despedirme. Tengo una Vuelta bonita por delante y estoy ilusionado con 2017, quiero planificar y hacer las cosas bien. Disfruto del publico, No hubiera sido buena decisión irse este año», dijo el madrileño.
Reconoce su error en la etapa de Covadonga. «Las sensaciones ahora son muchas y diferentes. Analizando ahora la subida a los Lagos creo que debí ser más cauto. Soy a veces demasiado impulsivo y ayer me moví cuando hubiese sido más inteligente seguir a rueda».
Y por ello no quiere aventurar posibilidades tácticas. «Voy a ver el libro tranquilamente y ver qué podemos plantear, ver cómo se manejan los equipos, quien lleva la responsabilidad. Hay que analizar muchas cosas, pero ante todo quiero ir día a día. Hay que aprovechar las oportunidades y ver cómo van las piernas. El recorrido que tenemos por delante incluye muchas etapas «unipuerto» y es difícil moverse ahí. Disfrutaré de la carrera y veré qué puedo hacer».
Respecto a la polémica de los potenciómetros insistió en que «restan espectáculo a las carreras, hacen que todo este más controlado, esa es la realidad. A estas alturas no voy a cambiar mi forma de correr». También opinó de nuevo sobre la zona de seguridad de los 3 kilómetros finales donde se cayó. «A los líderes nos gusta pegarnos con los esprinters ni a ellos con nosotros. Se genera tensión, que es espectacular, pero tiene riesgo, ya que un favorito se puede ir a casa. Siempre ponen las caídas en los vídeos promocionales. Eso había que analizarlo, si el espectáculo son las caídas. La mayoría del pelotón piensa igual, Todos los días nos jugamos la vida en los sprints. Había que plantearse tomar medidas. No quiero llevar la bandera de cambiar la norma, pero habría que reflexionar».