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Alineación para el Giro de Italia 2015 © Tnkoff
Alberto Contador y el Tinkoff-Saxo ya han decidido qué ocho corredores acompañarán al madrileño en el inicio de su gran desafío que no es otro que ganar el Giro de Italia y el Tour de Francia, gesta que nadie consigue desde que el fallecido Marco Pantani lo firmara en 1998. Y para la primera parte de su reto cuenta con el checo Roman Kreuziger, el australiano Michael Rogers, los italianos Ivan Basso, Manuele Boaro y Matteo Tosatto, el portugués Sergio Paulinho, el danés Christopher Juul-Jensen y el ruso Ivan Rovny.
Dos aspectos marcan la selección del conjunto ya dirigido por Steven De Jongh -tras el despido de Riis– que no son otros que la ausencia del otro español del conjunto y compañero de entrenamientos de Contador, Jesús Hernández, y la presencia de Kreuziger, un corredor que espera el veredicto del TAS -su audiencia es el próximo 10 de junio– y que podría ser suspendido de dos a cuatro años si prospera el recurso de la UCI a la absolución del Comité Olímpico Checo. Kreuziger -que ha venido compitiendo regularmente todo 2015- se quedó fuera el año pasado a última hora en el Tour de Francia.
«El principal objetivo es hacer la mejor general posible con Alberto. Para las etapas llanas, tenemos grandes motores con Boaro, Tosatto y Chris Juul, mientras que Paulinho, Rovny y también Boaro serán esenciales en la media montaña. Nuestro capitán en la carretera será Rogers, que junto a Kreuziger y Basso representan un trío muy fuerte en la montaña. Estoy convencido de que tenemos un potente equipo alrededor de Alberto. Todos sabemos que una gran vuelta es larga y pueden pasar muchas cosas a lo largo de tres semanas. Sin embargo, si Alberto se mantiene seguro y fresco, puede jugar un papel principal en la general. Alberto y los chicos han tenido un productivo campamento en altitud en el Teide y tras las ‘clásicas de las Ardenas’ pude ver que Roman está en una gran forma. Confío en que están plenamente preparados para el sábado», señaló el director deportivo Steven de Jongh.
Roman Kreuziger comenta que su principal objetivo es apoyar el capitán del equipo. «Pasé los últimos días recuperándose de las clásicas de las Ardenas con un poco de entrenamiento ligero y siento que estoy actualmente en buena forma. Con unos pocos días que quedan hasta el comienzo, ya estoy completamente centrado en el Giro. Quiero estar tan listo como sea posible y yo haré todo lo que sea para apoyar a nuestro líder Alberto Contador en su búsqueda de la victoria. He corrido el Giro en dos ocasiones, en 2011 y 2012 , y es una carrera que me gusta mucho por el país y su gente. Aunque es menos estresante que el Tour de Francia, no es nada fácil. Las subidas son más cortas pero son empinadas e intensas. Siento que tengo la forma correcta para ayudar a Alberto en estos ascensos y espero con interés el inicio el sábado».
Michael Rogers, capitán de ruta y ganador de dos etapas el año pasado tras su absolución por un positivo con clembuterol, afirma que «en conjunto como equipo hemos hecho todo lo posible -tanto dentro como fuera de la bicicleta- para preparar el Giro. Siento que tenemos un equipo bien equilibrado y esperamos con interés a los numerosos retos que se avecinan en las próximas tres semanas».
Por su parte, Ivan Basso, con ocho participaciones y dos victorias generales en 2006 y 2010 -antes de confesar ser cliente de Eufemiano Fuentes tras la Operación Puerto por lo que fue sancionado un año-, así como seis victorias de etapa, será otro apoyo para Contador. «Mi determinación, unidad y voluntad son idénticas a cuando me estaba preparando para el Giro de Italia como líder del equipo, donde mi objetivo era ganar. La única diferencia es que ahora, toda mi energía irá a servir al equipo y nuestro líder, Alberto. Me siento en gran forma. Hemos puesto una enorme cantidad de trabajo, tratamos de cuidar de todos los detalles y estamos convencidos de que vamos a llegar a la línea de salida con el objetivo que habíamos planeado. Alberto está en gran forma igual que todo el equipo. Creo que la calidad del trabajo en el campo de entrenamiento fue excelente. Nuestro líder es el mejor corredor del mundo y ésto da confianza para el resto de la plantilla. El Giro es siempre difícil y nunca habrá un momento fácil. Los primeros días serán difíciles incluyendo la contrarreloj por equipos».
