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Cristian Rodríguez, durante la Vuelta a Burgos © Oskar Matxin
No todo es Tour. Bien lo saben los ciclistas más modestos. Es el caso de Cristian Rodríguez Martín (3 de marzo de 1995 – El Ejido, Almería), escalador del Caja Rural-Seguros RGA que esta temporada ha dado un importante salto de calidad. “Cuando me veo ahí delante con los cuatro o cinco que pueden disputar el Tour, pienso: ¿por qué no ganarles en algún momento?”, se pregunta en una conversación con Ciclo 21.
Noveno en el reciente Tour de Hungría, el andaluz ya dio muestras de su progresión con dos buenos resultados en dos citas ante rivales de categoría superior: la Vuelta a Burgos (13º) y el Desafío del Mont Ventoux (14º). “A mí el confinamiento me sentó bastante bien. Nunca dejé de entrenar y, cuando pude salir a la carretera, aproveché todo el tiempo posible. Este año me toca renovar y tengo que hacerlo bien”, admite Cristian, que a los 25 años vive su quinta temporada como profesional, tercera en Caja Rural.
En Burgos volvió a ponerse un dorsal después de casi seis meses: “Las sensaciones fueron bonitas, tenía ganas de competir y plasmar todo el entrenamiento realizado. El primer día fue un poco raro porque hacía mucho tiempo que no sentía esa adrenalina, pero luego me empecé a encontrar bien y lo pude aprovechar”, detalla Rodríguez, testigo de la exhibición de Remco Evenepoel en el Picón Blanco: “Creo que no tiene límites, he visto todo lo que ha hecho y me quedo asombrado”.
De Burgos al Ventoux
Una semana después de aguantar con los mejores en la montaña de Burgos, el almeriense probó su gran momento de forma en el icónico Ventoux: “Ya lo había subido el año pasado y es un puerto muy, muy duro. Cuando coges altura se hace súper exigente. Por encima de los 1700 metros aún quedan tres o cuatro kilómetros, no te da tiempo ni a pensar”, recuerda el escalador que resistió en el grupo de favoritos hasta el ataque de Aleksandr Vlasov, a la postre ganador.
Tercera temporada de verde © Caja Rural-Seguros RGA
“El primer paso se hizo durísimo y en el segundo fue suficiente con la marcheta. Los Astana pusieron un ritmo bastante rápido, pero aguanté hasta que arrancó Vlasov, a cuatro o cinco kilómetros de la cima. Me encontré bastante bien, con fuerza, y espero seguir en esta línea para lograr un resultado bonito”, deseaba el escalador andaluz, que disputó muy cerca de casa el Campeonato de España en línea.
Vacío en los Nacionales
“Las sensaciones en el Campeonato fueron buenas hasta la última vuelta, que me sentí vacío. Todavía no entiendo el porqué. Yo di el 100%, me alimenté y me hidraté bien, pero siempre se aprende”, lamenta Cristian, que viajó a Hungría con la intención de “estar con la gente de cabeza en el final en alto”. Noveno a escasos 27 segundos, terminó también noveno en la general para completar un mes muy regular.
“La subida final arrancó muy fuerte. Yo opté por marcar mi propio ritmo, aguantando en el grupo de los mejores. Iba entrando de nuevo a cabeza cuando el ganador ha arrancado y ha roto la unidad. Me quedo satisfecho porque creo que lo di todo. El noveno puesto en la general me da confianza, poco a poco me voy encontrando con los mejores y me hace pensar que pronto llegará esa recompensa”, analiza en unas declaraciones para los medios oficiales de su equipo.
Paso a profesionales en Italia
Cristian Rodríguez encontró la oportunidad de pasar a profesionales en el extranjero cuando tenía solo 20 años, concretamente en Italia de la mano del equipo Wilier (en 2016 con el apellido Southeast y en el 2017, Triestina-Selle Italia). “Fue una experiencia que no cambiaría por nada, se corre súper diferente. Estuve allí dos temporadas, corrí bastantes carreras de nivel (dos veces el Giro y otras dos Lombardía), aprendí un idioma…”, detalla el almeriense, que guarda buenos recuerdos.
En 2018 regresó a España con una oferta del Caja Rural-Seguros RGA, una estructura que ya le conocía de su etapa amateur y que apuesta por la cantera y el talento de casa: “Cada año pasan dos o tres corredores a profesionales y eso es de agradecer. Si hubiese algún equipo más así, con esta filosofía, como puede ser ahora Kern Pharma, estaría bien para todos”, apunta el andaluz.
La Vuelta y el coronavirus
Después de tres temporadas, en 2020 acaba contrato: “Siempre hay incertidumbre por renovar, pero no me preocupa. Sé que estoy andando bien y estoy tranquilo. No sé si podría dar un paso más o no, pero en Caja me han cuidado desde pequeño, me siento cómodo y no me importaría seguir aquí en el futuro”, desea.
En una temporada con un atípico calendario por mor de la pandemia, los meses de octubre y noviembre acogerán la Vuelta a España, gran objetivo de Caja Rural-Seguros RGA y también de Cristian Rodríguez: “Correr una grande siempre es una ilusión y es uno de los grandes objetivos para el equipo y todos los corredores, pero todavía pienso en el día a día. Si no hay fiestas en los pueblos, ¿se va a correr una Vuelta? Se ve todo un poco raro, espero que se haga”, arguye.
El ciclista andaluz reconoce que “las cosas se están poniendo un poco difíciles, sobre todo en España”, con los niveles de propagación de la COVID-19 en las últimas semanas. “No me preocupo mucho, estoy centrado en hacerlo bien, día a día, sin pensar en el mañana”. El mañana que espera la definitiva explosión del escalador andaluz.
