La foto de David Casillas nos muestra al madrileño vestido de amarillo en la Volta a Castelló, uno de los grandes momentos de la campaña de uno de los puntuales de Aldro Team y que en 2017, en su primera campaña como élite, confía en rematar su evolución.
-¿Fue ese el mejor momento del año?
-Es una imagen en la que se unen muchos sentimientos. Trabajé mucho para el Campeonato de España, con el apoyo de mi familia, de Ainhoa Candil [su novia], pero en Alicante me tocó besar el suelo un par de veces. Castellón fue una carrera clave en esa preparación y aunque al final no pude rematar, fue un gran momento en todos los sentidos para mí.
-Un año en el que también subiste al podio dos veces. ¿Qué recuerdas de esas victorias?
-La de Gernika fue muy importante para mí, porque era la primera que lograba en la categoría, en una prueba muy selectiva y con una gran participación. Y la de Villaviciosa también tiene un significado especial, al ser el segundo doblete del equipo y con un compañero muy especial como Julen (Amarika).
-Con estos resultados, ¿cómo ha sido el balance de la campaña?
-En general bastante bueno. Quizá me faltó un resultado más, tener mejores sensaciones en la Copa de España donde no pudimos, ni yo ni el equipo, rendir al nivel que esperábamos.
-Una temporada sobre la que decías, en enero pasado, que tu objetivo personal era «volver a sentirme ciclista, con la motivación e ilusión que tenía en júnior», ¿lo has conseguido en Aldro Team?
-Ese era el gran objetivo y pienso que lo he conseguido. En Aldro Team me he visto de nuevo con objetivos reales que podía conseguir. Tanto Manolo (Saiz) como Herminio (Díaz Zabala) y David (Etxebarria) me han transmitido esa motivación que necesitaba. Me han dado cariño y respeto. Y sobre todo confianza, que es lo que tengo que agradecerles. He aprendido mucho, pero sobre todo como persona, indudablemente y creo que lo más positivo es que he madurado mucho. Este año he visto la realidad del ciclismo. Hay que trabajar mucho, pero que mucho, para conseguir lo que uno quiere. Es duro, pero al mismo tiempo es muy gratificante.
-Otro de los objetivos que te marcaban entonces era verte en la batalla de las pruebas internacionales. ¿Cómo lo has sentido?
-Cerré el año bastante contento. Por ejemplo, en Ronde de l’Isard estuve metido en escapadas tres días. Y así aprendes. En Alsacia salía de una lesión y sufrí bastante, pero de ello saqué bastantes enseñanzas. Y en Italia, también tuve una buena experiencia con gente que ha estado disputando el Tour Down Under, como Guerreiro. Este año espero mejorar un poco.
-De hecho fue en las pruebas internacionales donde, salvando las distancias que nos separan con los ciclistas foráneos, se vio lo mejor de Aldro Team.
-El trabajo de Manolo se orienta siempre hacia el futuro, el que podemos tener en pruebas selectivas. En España, las carreras son de 100 ó 120 kilómetros y todo el mundo tiene ese fondo. Pero en el extranjero, nos vamos por encima de los 160 kilómetros, y es a partir de cuatro horas de carrera es cuando se pone interesante y se ve el entrenamiento.
Primer año como élite
-De momento has estado entrenando bastante este invierno, en una campaña que estrenarás dentro de apenas una semana en L’Essor Basque. ¿Cómo ha sido el invierno?
-He entrenado muy duro, pero también me he cuidado bastante en la alimentación, que es un tema en el que Manolo siempre incide, ya que es muy importante para el rendimiento y espero que todo se note. Me gustaría hacerlo bien desde el principio de temporada y las carreras francesas son una buena piedra de toque.
-Una campaña que será la primera como élite ¿Te sientes diferente?
-La verdad es que vas viendo como el tiempo va pasando. Te ves algo mayor, pero con la ilusión de poder llegar a ese sueño que todos tenemos de ser profesional. Ojalá el proyecto de Aldro Team se consolide y puedan contar conmigo. Sería lo mejor.
-¿Te has marcado algún objetivo en concreto?
-Aparte de L’Essor Basque, lo primero que tenemos marcado es la Copa de España, en la que nos queremos quitar la espinita del año pasado, que hagamos grandes carreras y si encima llegan los resultados para el equipo, mejor. Fue lo que nos pasó el año pasado, con un montón de ‘top cinco’ y nos costaba rematar. ¿Alguna carrera? Personalmente me viene a la mente Torredonjimeno, que es una prueba que me gusta y que se me ha atravesado bastante. Pero cualquier carrera es buena para ganar, no yo, sino el equipo.
-Finalmente, ¿te ves ya definido como ciclista?
-No soy el mejor escalador, pero en forma, estoy con ellos. Tampoco soy sprinter, pero tengo una buena punta de velocidad para ganar. En este sentido no me puedo quejar y confío en seguir mejorando en todas las facetas para poder estar luchando por las victorias.
Prensa Aldro Team