Con el Tour de Francia apuntando al mes de septiembre y la Vuelta y el Giro abocados a compartir fechas en noviembre, el ciclismo entra en un terreno ya no sólo desconocido, sino mucho más incierto incluso que el que teníamos a principios de semana.
Todos los actores de este deporte apuntan a la Grande Boucle como la única tabla de salvación posible, pero nadie puede o debe pensar que la ronda gala será, cuando y como se pueda correr, la solución a todos los problemas que acechan al pelotón.
José Luis De Santos, presidente de la Asociación de Ciclistas Profesionales (ACP), la delegación española de la CPA, el sindicato que representa a los corredores del pelotón profesional. De Santos, sabedor de que el futuro de muchos equipos y, por lo tanto, los puestos de trabajo de muchos de sus asociados dependen de su presencia en una de las tres grandes vueltas ha anunciado, durante su intervención en un programa especial de El coche escoba, que la CPA está trabajando en aumentar el número de equipos presentes en Giro, Tour y Vuelta.
De Santos explicaba que “estamos trabajando en que las grandes vueltas que se celebren no tengan esa limitación de equipos, sino que aumenten hasta el límite de los 200 corredores. Imaginad que el Tour o la Vuelta puedan invitar a dos equipos más. Serían dos equipos que tendrían continuidad para 2021, algo que sería muy importante para nuestro ciclismo”.
En ese mismo sentido, aclaraba que no se trata de una propuesta únicamente defendida por la ACP o la CPA, sino que “la UCI está estudiando el tema y creo que está por la labor. Los organizadores también, aunque todavía no hemos hablado con ellos porque ahora están a otras cosas. Pero creo que tanto la UCI, los organizadores como la Asociación de Grupos Deportivos estarían a favor de meter dos equipos más en cada una de esas carreras. Sería por el bien común, no por otra cosa”.
De Santos añadía que ese aumento de dos equipos por cada gran ronda “es una de las cosas en las que estamos trabajando desde la CPA para que perdamos la menor cantidad de puestos de trabajo posible”.
En cuanto a las consecuencias que el confinamiento está teniendo en día a día de los corredores españoles, De Santos se mostraba comprensivo con las restrictivas medidas que está tomando España. “Al principio nos preocupó más porque el 14 de marzo salió el Real Decreto decretando el estado de alarma y en él se decía que se podía salir a trabajar. Nosotros, como trabajadores del ciclismo, entendíamos que podíamos salir a entrenar de forma individual, pero nos lo denegaron. Luego, viendo la situación del país, aceptamos que esto es cosa de todos y que teníamos que estar en casa”.
Pese a que el Gobierno ha permitido el regreso al trabajo de algunos sectores, los corredores tendrán que seguir sobre los rodillos ya que, como explica De Santos, “hoy he hablado con José Luis López Cerrón y nos ha dado la mala noticia de que el CSD ha dicho que prohibía cualquier tipo de entrenamiento que no fuera en casa, por lo que seguimos sin poder salir a la carretera. No tenemos tanta prisa porque no sabemos cuándo va a comenzar de nuevo la competición”.
El presidente de la ACP reconoce que “es una situación muy complicada porque esto está avanzando día a día. Hemos puesto de coordinador al presidente de la RFEC, José Luis López Cerrón, para que avanzar [en las negociaciones] con el CSD para que podamos volver a salir a la carretera”.
Ya mirando hacia el futuro, el representante del sindicato de los corredores reconoce que “nos preocupan muchísimo los contratos de nuestros corredores y qué va a pasar en 2021. Ahí vamos a seguir trabajando junto a la CPA, la UCI y la Asociación de Grupos Deportivos para que se pierda la menor cantidad de puestos de trabajo posibles”.
De Santos considera en ese mismo sentido que “en España, de momento, estamos bien, pero hay otros equipos que sí están haciendo recortes para poder subsistir. Vamos a intentar que esta situación repercuta lo mínimo posible en los salarios de los ciclistas y que esos puestos de trabajo no se pierdan para 2021. Todo dependerá de que se puedan celebrar las tres grandes vueltas”.
El presidente de la CPA asegura que en estos momentos “la relación con la patronal, que es la Asociación de Grupos Deportivos, es buena, siempre hemos tenido alguna rencilla, pero en estos malos tiempos estamos muy unidos y esperamos que siga así”.
Pese a que “la situación es dramática” especialmente en los equipos de fuera de nuestras fronteras, De Santos aplaude la salud, al menos por el momento, que presenta el ciclismo español en lo relativo a la defensa de los puestos de trabajo de los asociados de la ACP. “Pongo el ejemplo del equipo CCC, que ha anunciado al 80% de sus auxiliares que no les va a pagar hasta que no se vuelva a competir. En España es verdad que el convenio laboral que tenemos es bastante importante. Por ahora, sólo Burgos-BH ha presentado un ERTE por el que los corredores podrán cobrar la totalidad de sus sueldos ya que el Estado pagará el 70% y el equipo el 30% restante. De momento, los equipos españoles estamos teniendo mucha suerte, pero estamos teniendo bastantes problemas con equipos extranjeros”.
De Santos también explicaba que “la UCI está muy encima ya que quiere evitar la picaresca de que algunos equipos puedan aprovechar esta circunstancia para hacer rebajas de salarios. En ese sentido, la UCI está muy encima con sus auditores para evitar todo esto. Al igual que son muy serios a la hora de inscribir un equipo, también o están siendo ahora”.