Nicolás Van Looy / Ciclo21 – Calpe (Alicante)
“Es complicado mantener una familia unida, pero aquí sabemos como hacerlo”. No fue sencillo mantener a flote el barco de Quick Step, el equipo más laureado del año 2018, pero la fuerza del Wolfpack, la Manada de Lobos, volvió a ser determinante para que Patrick Lefevere, el gran patriarca de todo este asunto, encontrara en Deceuninck, un patrocinador lo suficientemente solvente como para mantener al clan todo lo unido que las circunstancias permitieron.
Una vez más, Calpe ha sido el escenario en el que hoy se ha presentado el proyecto de Patrick Lefevere, esta vez bajo el nombre de Deceuninck-Quick Step se ha presentado para una temporada, la de 2019, en la que parece casi imposible que pueda igualar o superar los números de un 2018 histórico que se cerró con 73 triunfos.
Con sólo dos nuevas caras, personificadas en el danés Mikkel Honoré y, sobre todo, el gran mirlo blanco del ciclismo belga –y, quizás, mundial–, Remco Evenepoel; el papel dice que el equipo habría perdido potencial con las marchas de los Terpstra (Direct Energie), Gaviria (UAE), Narváez (Sky), Schachmann (Bora) y De Plus (Jumbo-Vista); pero sólo el tiempo nos dirá si Lefevere, Peeters y el resto de responsables de la escuadra belga son capaces de volver a hacer el milagro.
Las clásicas, con Philippe Gilbert, volverán a ser los grandes objetivos de un equipo que, pese a tener en Enric Mas un líder solvente para las grandes vueltas, sigue poniendo el foco en las pruebas de un día. Junto al español, que atacará el Tour de Francia por primera vez, Bob Jungels será el gran referente del bloque vueltómano con el Giro de Italia como gran objetivo. La lógica, considerando todas las variables, indica que Mas doblará con la Vuelta, pero eso está todavái por ver.
En lo que a las grandes clásicas se refiere, todo vendrá marcado por la reducción de 28 a 25 días; pero el objetivo de hacer de llevar a Gilbert a conseguir sus 5 Monumentos será una de las principales dianas para el nuevo proyecto belga. En total, completarán 259 días de competición, lo que son 17 días menos que en 2018.
Y, por supuesto, está la gran incógnita del año. Nada se espera de él en este 2019, pero dadas sus cifras en los últimos años, todos los ojos estarán puestos sobre un Remco Evenepoel del que nadie adivina el límite y que, sin duda, será una de las grandes promesas a seguir.
“Es complicado mantener una familia unida, pero aquí sabemos como hacerlo”, decía Lefevere en Calpe. Y, aunque parezca imposible, como lo ha parecido siempre, hoy es el día de empezar a comprobar si tantos divos son capaces de compartir objetivos, ambiciones y metas sin que unos se interpongan en el camino del otro. De demostrar que, como en todas las familias, pese a los malos rollos y las rencillas que puedan surgir, se puede poner el bien común por encima de todo lo demás.