Cuando se escriben ciertas cosas conviene aplicar eso de la venda antes de la herida, cuando se habla de Alejandro Valverde, hay que hacer uso del aviso preventivo.
Y no es otro que sí, que Alejandro Valverde es ahora mismo el mejor ciclista en activo, hablamos de historia, ranking y números, que se emplaza en la zona noble de los mejores de siempre, como hace unos días comentamos, cuando lo situamos segundo en nuestra lista de diez ciclistas españoles imprescindibles de hoy y de ayer.
En ese listado que no dejó indiferencia, emplazamos a Alejandro Valverde en segunda plaza, por delante de Contador, tras Miguel Indurain, por que incluso a día de hoy no hemos visto nada igual que el navarro.
Y es que, como hablamos con Javier Mínguez en un podcast sobre el ciclismo español hoy y hace 40 años, un podcast que tendremos a punto para el próximo fin de semana, Indurain hubo uno, de hecho uno como Indurain, lo hay cada cierto tiempo, cada ciertas generaciones, diría yo.
No en vano en Bélgica siguen esperando al sucesor de Eddy Merckx, a Evenepoel le cabrea mucho que le comparen con el astro de Bruselas, y en Francia el nuevo Bernard Hinault.
Llevan décadas así, y parece que va para largo.
Pero volviendo sobre Alejandro Valveerde el problema parte del mismo momento que fichó por la estructura que hoy apadrina Movistar y las cosas se hicieron como si Miguel Indurain estuviera al mando…
Artículo completo en El Cuaderno de Joan Seguidor