La gran oportunidad de Movistar Team en la 35ª Vuelta a Burgos deberá esperar, al menos, hasta mañana sábado. El equipo dirigido en tierras castellanas por José Luis Arrieta luchó con denuedo en la tercera etapa de la carrera, la jornada más larga con 175 kilómetros muy incómodos entre Villadiego y el alto de Ojo Guareña (3ª), que los corredores hubieron de cubrir en dos ocasiones junto a otras cuatro cotas puntuables. La escuadra telefónica tomó la responsabilidad en el primer paso por meta, reduciendo hasta la neutralización la ventaja de Brajkovic (AST) y Txurruka (CJR), los dos supervivientes de una fuga original de cuatro hombres en la que luchó por entrar Visconti.
Movistar Team optó por una estrategia de ataque y colocó a tres de sus piezas -Jesús Herrada, Sylwester Szmyd y Rubén Plaza- en un corte de once unidades neutralizado a seis kilómetros de meta y del que el alicantino seguiría probando hasta llegar a la subida. En la aproximación, un pequeño corte de cuatro unidades por un golpe de viento concedía buenas opciones a Nairo Quintana, pero la caza posterior y la suavidad del ascenso impidieron que el colombiano pudiese pelear el triunfo. El líder del equipo azul se coloca ahora a 17″ del líder Roux (FDJ), la desventaja que deberá enjugar el domingo en las Lagunas de Neila siempre que pase sin problemas la 4ª etapa, favorable al sprint, mañana sábado en Santo Domingo de Silos.