Pocas semanas antes de los Juegos Olímpicos de Tokio, quisimos presentar en TrackPiste a Anita-Yvonne Stenberg. No sólo por su curiosa historia de esta noruega de Drammen que le llevó a afincarse en Mallorca, sino por ser una de las participantes del ómnium, donde no estaba entre las grandes favoritas pero donde podía ser una de las ’outsiders’ como así sucedió, con una excelente quinta posición.
Han pasado tres años en los que se ha consolidado como una de las mejores fondistas del mundo, con una medalla de oro en cada uno de los Europeos disputados desde entonces: en el scratch de Munich 2022, en la puntuación de Grenchen 2023 y, por fin, en el ómnium de Apeldoorn 2024. Y además, se siente totalmente integrada en Mallorca –“Es un honor para mí ser parte de Sencelles. Me siento como en casa y amo la ciudad. Para mí es el sueño poder vivir aquí y ser parte de la comunidad- hasta tal punto de que ha llegado a ser premiada en la Gala de l’Esport de su localidad adoptiva, hace ahora un año.
Pero centrémonos en ese ómnium de París 2024, ese gran objetivo al que aspira. “Sueño con el podio y creo que es posible en un buen día. Y para eso trabajaré todos los días a partir de ahora”. Una prueba en la que le señalamos a Archibald y Valente como principales favoritas, aunque añade a otras dos más… y un amplio ramillete. “Sí, se encuentran entre los mejores corredores, junto con Wollaston y Kajihara. Pero, sinceramente, creo que hay muchas corredoras que podrían estar entre las tres primeras. El nivel es alto, pero como siempre, y creo que será una lucha muy reñida por el podio”.
Sobre las pruebas del ómnium, considera que “el scratch siempre es complicado, pero me siento segura, lo mismo que en el tempo. Y luego creo que tengo una buena táctica que me funciona en la eliminación. Para mí, es importante estar arriba en estas pruebas, para poder defenderme en la puntuación. Algunas corredoras necesitan ganar vuelta en la puntuación para subir posiciones, como Dideriksen. Todo depende del tipo de corredora que seas”.
Y si los Juegos son la gran motivación, no nos podemos olvidar del Mundial, dos meses después en Ballerup. “Viví 8 años en Dinamarca, así que ha sido mi hogar, pero también una de mis principales rivales, ya sabes, la pelea escandinava. Pero, además, como está tan cerca de Noruega, creo que muchos noruegos vendrán a animar”.
Y es que su triunfo en el Europeo conllevó un notable aumento del interés por el ciclismo en pista en Noruega, donde, por otro lado, se está trabajando bastante para la promoción de esta disciplina, con los nuevos velódromos de Sola y Asken. En este último estuvo hace unas semanas en esa labor de contribuir al fomento de la pista. Cuando hablamos de que si sueña con no ser la única noruega en los próximos Juegos, nos contesta con un “¡eso espero! Pero todavía queda un largo camino por recorrer y el nivel es muy alto. Hay que hacer mucho trabajo”.