Por mucho que Matt Richardson sea uno de los pocos velocistas que le ha plantado cara en el cuerpo a cuerpo al ‘intocable’ Harrie Lavreysen; por mucho que Matthew Glaetzer haya sido el último vencedor de la velocidad antes de los cinco años del dominio ‘oranje’ y esté viviendo una segunda juventud a sus 31 años; por mucho que el kilometrista Thomas Cornish vaya a más completando un gran equipo, ninguna de estas individualidades será determinante para Australia de cara a ganar la velocidad por equipos en París 2024, algo en lo que sí puede ser más decisivo Leigh Hoffman, el arrancador del trío ‘aussie’.
Y es que ‘Hoffy’, como se le conoce popularmente y se autodenomina en las redes sociales, hizo una arrancada bestial en el Mundial de 2022, en el mismo escenario de los Juegos este mes de agosto, convirtiéndose en el tercer hombre en la historia en bajar de los 17 segundos (16.949 concretamente) y con ello lanzando a su país hacia el oro, con lo que se rompía una racha de cuatro victorias neerlandesas, y se rompía una racha de diez años sin pisar el podio. Eso sí, en el último Mundial, en Glasgow, los europeos volvieron por sus fueros y no dieron opción a los oceánicos, entre otros motivos porque Leigh Andrew Hoffman no ha repetido esos números.
Gracias a AusCycling hemos podido conocer algunos detalles más de Hoffman, un velocista de 23 años, nacido en Whyalla, Australia del Sur, que se inició en el ciclismo porque quería imitar a su padre, piloto de motocross, y este le pidió que cogiera soltura con la bicicleta. Y teniendo un velódromo a escasos 2 kilómetros de su casa, estaba claro dónde iba a coger ese manejo, que no le llevó al campo, sino que prefirió quedarse sobre la pista.
Y aunque sabe que esa arrancada es la que puede llevarle a la gloria -Australia solamente tiene un bronce olímpico en esta disciplina, en su primera edición de 2000-, lo que le motiva es especialmente la velocidad, esa lucha de uno contra uno. Y claro, su rapidez es un ‘plus’ a la hora de coger posiciones en las clasificatorias. En todo caso, tiene por delante un notable futuro, para el que se muestra ambicioso, ya que espera haber logrado al final de su carrera “más de tres medallas de oro olímpicas y más de diez títulos de campeonatos mundiales”.