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Fabio Aru en una imagen de archivo
El italiano Fabio Aru, ganador de la Vuelta a España en 2015 y podio en el Giro en 2014 (3º) y 2015 (2º), sigue tratando de reencontrarse con la victoria tras una sequía que el próximo día 5 de julio se habrá prolongado durante tres años. Aru, que días más tarde llegaría a vestirse con el maillot amarillo, levantó los brazos en la quinta etapa del Tour de Francia de 2017 y, desde entonces, no ha vuelto a poder celebrar victoria alguna.
Aquejado de diversas molestias, su rendimiento nunca ha vuelto a ser el de hace ya un lustro y ahora, con la perspectiva que da el tiempo, el corredor de UAE-Emirates reconoce que el pasado año volvió demasiado pronto después de someterse a una cirugía en la cadera. “En retrospectiva, diría que el regreso fue prematuro”, asegura en declaraciones a Tuttobici. Se trata, en cualquier caso, de un importante giro en su discurso ya que a principios de esta misma temporada achacaba su falta de rendimiento tras su regreso a la competición a un virus.
En cuanto a su bajón de resultados, Aru reconoce que “he tenido algunos años malos. No fue hasta después de la operación que la paz regresó, a pesar de que una serie de errores empeoraron la situación nuevamente. Aprendí que después de tal lesión necesitas paciencia y tiempo”.
El corredor asegura que tanto él como “otras muchas personas conmigo” quisieron volver a retomar la competición para pelear por los triunfos. Sin embargo, aunque la decisión no fuese la acertada, Aru no busca culpables. “Yo tengo toda la culpa. Podría haber sido más fácil si me hubiera tomado más tiempo, pero no lo hice”.
En cuanto a su futuro, en un año en el que acaba contrato, Aru se muestra tranquilo. “Es prematuro hablar de una extensión de contrato ahora. Pero la relación con el equipo es buena. Por el momento, no estoy pensando en una renovación, aunque en circunstancias normales hubiera sido el momento ahora. Pero los tiempos han cambiado y estaremos sentados alrededor de la mesa en octubre”.
