Ciclo21 Portal de ciclismo
Tom Meeusen no podrá estar en Tabor al ser investigado por supuestas prácticas dopantes
Existe, al menos, una generación entera que creció concienciándose del daño que el ser humano le está haciendo al medio ambiente a través del mensaje del miedo. Nos hablaban de un agujero en la capa de ozono sobre los dos polos de nuestro planeta y de las cataclísmicas consecuencias que podía tener para la vida en la Tierra no actuar sobre ellos. De esa forma, muchos crecimos dándonos cuenta de que algo habría que cambiar.
Ahora, años después, parece que los agujeros se están haciendo más pequeños. La aplicación de las medidas contempladas en el Protocolo de Montreal funcionan y algunos expertos calculan que antes de que finalice este siglo los dos huecos quedarán cerrados. Pero el ozono no sólo es importante para preservar la vida en la tierra, sino que tiene una gran cantidad de aplicaciones médicas. Algunas, incluso, podrían mejorar el rendimiento deportivo de los atletas y, por lo tanto, ser consideradas como prácticas dopantes. Hablamos, pues, de otro agujero del ozono. Un agujero deportivo en este caso.
Y, en medio de ese agujero encontramos estos días a la selección belga de ciclocross. El pasado fin de semana se hizo pública la lista de convocados para el Mundial de Tabor y sorprendía la ausencia de Tom Meeusen, Bart Wellens y Laurens Sweeck (campeón nacional sub-23). El motivo para su ausencia es que sus nombres aparecen en una investigación contra el doctor Mertens, más conocido como ‘Doctor Ozono’. El artículo 9.2.2002 de la UCI que estipula que ningún corredor que esté siendo investigado o esté relacionado con una investigación de dopaje puede ser seleccionado por su combinado nacional para participar en carreras organizadas por el máximo organismo mundial. Esto, claro, implica también su ausencia de la prueba de la Copa del Mundo de Hoogerheide del próximo día 25 de enero.
Pero, empecemos por el principio. Todo este affaire se encuadra en la investigación judicial que se sigue desde hace ya varios años contra el doctor Chris Mertens. Se cree que el galeno habría estado realizando transfusiones sanguíneas enriquecidas con ozono a distintos deportistas. El juzgado de Lovaina decidió la pasada semana sentar a Mertens ante el Tribunal. El problema es que la terapia sanguínea con ozono está en una zona imprecisa de la ley, pero para el juzgado hay una conclusión clara: la manipulación [de la sangre] con ozono está prohibida.
Wellens, otro de los afectados
Explicado el origen, vayamos a la implicación deportiva. El juzgado ha probado que en los papeles del Dr. Mertens aparecen, al menos, los nombres de 19 deportistas, en su mayoría ciclistas y ciclocrossistas de cierto nivel. Todos ellos se enfrentan ahora a una sanción deportiva ya que desde Lovaina han enviado documentación relativa a cada uno de ellos a las distintas federaciones bajo las que tienen licencia. Aunque los nombres de esa casi veintena de deportistas sigue bajo secreto de sumario, se ha podido saber que Meeusen, Wellens y Sweeck están afectados por su no selección para Tabor y las consecuentes explicaciones del seleccionador y la federación.
Cabe destacar que los corredores no están sancionados oficialmente por el momento, pero sus informes ya están sobre la mesa de las autoridades antidopaje de Flandes. El siguiente paso en este sentido es esperar a que esas mismas autoridades hagan llegar sus conclusiones a la Federación Belga para que su Comisión Disciplinaria tome las decisiones pertinentes. En el caso de Sweeck, al no contar con una licencia elite, será la Comisión Disciplinaria Flamenca la que deba de pronunciarse.
Meeusen ya estuvo fuera en 2013
Para entender todo este desaguisado hay que echar la vista atrás. Tenemos que viajar hasta 2013, cuando Meeusen fue excluido de la Selección para el Mundial de Louisville (EEUU). En aquella ocasión, su nombre aparecía en una investigación abierta contra un médico de Rotselaar y, como ahora, relacionado con terapias con ozono. Ese caso, que fue iniciado en 2012, arrojó por primera vez dudas sobre el nombre del corredor. Por ese motivo, la federación belga tuvo que prescindir de él para la cita mundialista americana. Posteriormente, durante el verano de 2013, la UCI decidió levantar cautelarmente la medida hasta que la investigación sobre Meeusen concluyera. Ahora, con el traslado de toda la documentación a las autoridades antidopaje de Flandes, esa medida cautelar ha sido levantada.
La Federación se lamenta por la falta de información
Laurens Sweeck, el más joven de los investigados
Pero si todo este asunto tiene, ya de por sí, tintes muy extraños, la reacción de la Federación Belga no ha hecho más que echar más leña al fuego. Jos Smets, Director General de la Federación, asegura que “es lamentable que ni siquiera se haya informado a la Federación sobre la existencia de este dosier” para añadir que “podemos decir que llega en un mal momento, justo antes del Mundial. Además, observo que las cosas se mueven a un ritmo muy lento. La investigación se inició hace dos años y a día de hoy todavía no tenemos el dosier en nuestro poder. Repito, es lamentable que no hayamos sido informados”.
Smets arroja, además, la duda sobre las filtraciones más o menos interesadas. “Sabíamos que había una investigación en marcha y que había algunos nombres relacionados con ella. Tras las investigaciones preliminares del juzgado de Lovaina se dio traslado de los archivos a NADO Flandes, que es la que competente en esta materia. Son ellos los que tienen que decidir si existen acciones que deban de ser castigadas. Pero parece que los periodistas han tenido acceso a esta información más rápido que la propia Federación. Fue un periodista el que nos pasó la información sobre este tema. Realmente, no sabemos más de lo que se ha publicado en prensa. NADO nos tendrá que dar el dosier pronto. Cuando esto se produzca, iniciaremos nuestra investigación y será Jaak Fransen, el abogado de la Federación, quien tenga que llevar el asunto. Sólo él podrá entonces trabajar en el caso”.
Meeusen: “Quería dejarlo todo”
Meeusen ya ha dado explicaciones
Y, a todo esto, hay tres corredores que viven, quizá, sus peores días como deportistas. Sin acusación formal sobre ellos y con una gran cantidad de rumores y muy pocas certezas rondando, han sido apartados del Mundial y de la Copa del Mundo y deben de soportar las miradas, cuanto menos recelosas, de todo el mundillo ciclista. Meeusen, por nombre y estado de forma, podría ser considerado el más mediático de los tres. Incluso el seleccionador, Rudy De Bie, le colocaba como “uno de los máximos favoritos junto a Kevin Pauwels” para Tabor antes de recibir la noticia de que no podría contar con él.
El corredor ha sido categórico en su primera declaración pública. “Estas noticias me están afectado mucho porque no he hecho nada malo”, una afirmación clara pero que, por desgracia, ya hemos oído antes en deportistas que, finalmente, sí habían hecho cosas malas. Meeusen explicaba en la Televisión de Amberes que “ha sido una bofetada muy fuerte. Es muy difícil porque había entrenado muy duro y preparado a conciencia el Mundial. Entonces, recibes una llamada telefónica y te dicen que no estarás en la salida. Es un revés moral muy grande y será todavía más complicado según se vaya acercando el Mundial”.
El corredor de Amberes, que poco a poco asimila su situación, comentaba que “mi primera reacción fue la de dejarlo y mandarlo todo a tomar por saco porque me han quitado el placer de andar en bici. Pero no voy a parar. Voy a luchar por ver mi nombre limpio. Quiero demostrar cuanto antes que he sido honrado. Llevo dos años sin ver a ese médico y en este tiempo he corrido mejor que antes”.
El corredor reconoce que sí se trató con el médico de Rostselaar hace dos años. “Seguí un tratamiento para mi sinusitis y me recetó algunas inyecciones. Quizá eso sea lo único en lo que me haya podido equivocar”. En cuanto a los siguientes pasos que dará para defenderse, el corredor aclara que “el equipo ha contratado a un abogado. En estos momentos no estoy informado sobre la investigación. Hace un año la Federación me dijo que tenía que dar una muestra de mi ADN. Desde entonces no he vuelto a saber nada. Esto es muy frustrante. Estamos a una semana del Mundial. Un Mundial en el que creía en mis opciones. Estuve deprimido después de no haber podido ir al Mundial de 2013 y corrí un año sin tener ganas de hacerlo. Ahora llega esta noticia. Esto es muy difícil para mi”.
