El británico Chris Froome se ha convertido esta temporada en el ciclista mejor pagado de la historia gracias a esa extensión de contrato con el equipo Sky que anunciábamos ayer y que unirá a ambas partes hasta el final de la campaña de 2018. El ganador del Tour de Francia de 2013 y 2015 se embolsará 5,3 millones de euros por temporada durante los próximos tres años, una cifra que no ha dejado indiferente a nadie y que muchos califican como de exagerada.
Para poner en perspectiva la retribución que Sir Dave Brailsford ha considerado justa para su empleado estrella, habría que comprarla, en primer lugar, con la que recibía su ex compañero de equipo y ganador del Tour de Francia de 2012, Sir Bradley Wiggins, que alcanzó un topo de dos millones de euros por temporada.
Otros dos ganadores del Tour como son Vincenzo Nibali y Alberto Contador así como el actual campeón del mundo, Peter Sagan, perciben actualmente alrededor de cuatro millones de euros por temporada, lo que hasta el día de ayer les convertía en los corredores mejor pagados del planeta.
Para Froome, ese salto salarial podría venir a compensar de alguna manera lo que podría considerarse una anomalía respecto de sus rivales ya que, en virtud del contrato firmado con Sky en el año 2014, estaba percibiendo un millón y medio de euros por temporada, algo muy por debajo, visto lo visto, que sus rivales más directos.