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Froome, en el podio como ganador de la etapa / ASO
Chris Froome, líder del Tour de Francia y ganador de la contrarreloj, se mostró incrédulo con su resultado. “Estoy francamente sorprendido por el resultado de hoy. Prácticamente me había mentalizado de que perdería algo de tiempo en vista de las próximas etapas. No quería desfondarme porque mañana toca escalar Alpe-d’Huez no ya una sino dos veces. No estaba tan preocupado como en la primera crono. Sin embargo, al esperar los tiempos de paso, me he picado al saber que no estaba lejos de Contador. Sabía que al cambiar de bicicleta podría ganar importantes segundos en el último tramo».
No obstante, piensa con los pies en el suelo y sabe lo que le espera. «Ahora bien, la carrera no termina aquí, queda camino por recorrer hasta llegar a París. Aunque cuento con un colchón bastante cómodo de cuatro minutos, sigo sintiéndome presionado cada día, un sentimiento que se verá reforzado los próximos tres días, que serán los más duros del Tour».
Quiso dejar claro que no tiene problemas con el madrileño del Saxo. «No existe un conflicto personal entre Alberto y yo. De hecho nos llevamos bastante bien sobre la bicicleta; creo que existe una competición sana entre ambos. Lo único que dije ayer es que había arriesgado demasiado en la bajada, poniéndome en peligro. Un error así puede poner punto final al Tour. No corro para conquistar victorias de etapa. Mi atención está puesta en hacer lo necesario para conservar el maillot amarillo. Esa es mi principal prioridad. Todo lo demás es un plus».
