La propuesta que planteaba este Campeonato de Europa de Plouay con su recorrido parecía obligar a que el nuevo campeón continental fuera un velocista. Y así ha sido. A pesar de haber vivido multitud de ofensivas en la última hora de carrera, ninguna ha logrado prosperar debido al trabajo de las selecciones italianas y francesas, principales interesadas en una llegada masiva, que han encontrado premio a su apuesta con el oro y la plata respectivamente.
Giacomo Nizzolo se ha impuesto en un apretadísimo sprint a Arnaud Démare y a Pascal Ackermann; mientras que Iván García Cortina ha finalizado en octava plaza tras el trabajo en los metros finales de Gonzalo Serrano para mejorar su colocación. «La verdad que he ido fatal todo el día, incluso me corte un par de veces en la subida, iba al límite toda la carrera. Al final, sufriendo he resistido y aunque no ha sido mi mejor jornada hemos conseguido un top ten que no está mal. Quiero agradecer el esfuerzo que ha hecho Gonzalo Serrano para colocarme en el último kilómetro, que ha sido importante», ha explicado el asturiano mientras trataba de recuperar por el esfuerzo realizado.
La primera parte de la prueba ha estado marcada por una fuga de 4 ciclistas integrada por Dima, Bernas, Rajovic y Miltiadis, que ha sobrevivido hasta casi la entrada en el último tercio de la competición. En el momento justo en el que el pelotón se disponía a darles caza, se ha formado una nueva fuga con el polaco Bernas, Guerreiro, David Van der Poel y Diego Rubio, que al igual que Sergio Samitier se ha mostrado muy atento para dar presencia a España en los cortes.
La aventura de Diego Rubio y sus tres acompañantes ha durado hasta que restaban 30 kilómetros para la conclusión; momento que ha aprovechado Mathieu Van der Poel para asestar un durísimo hachazo que le ha permitido tomar unos metros de ventaja, junto a un distinguido grupo de corredores, durante un par de kilómetros. Van der Poel ha repetido intentona apenas 10 km después, aunque para su desgracia, esta tampoco ha tenido éxito. Tras la neutralización del neerlandés lo ha vuelto a intentar Samitier, que ya realizó un primer ataque a falta de algo más de 40 km para el final, junto a su compañero de equipo en el Movistar, Johan Jacobs.
Cuando la carrera se asomaba a los 10 últimos kilómetros, Samitier ha sido absorbido y ha tomado la cabeza Hagerlaand, que ha mantenido un bonito pulso con el pelotón que ha terminado cazándole cuando apenas restaban 2 km. Italia ha tomado el mando del pelotón para realizar una gran aproximación a la meta, en la que Giacomo Nizzolo no ha fallado y ha logrado imponerse por menos de media rueda a Arnaud Demare y a Pascal Ackermann con Mathieu Van der Poel, que se ha quedado encerrado, cuarto. Iván García Cortina, que no había tenido las mejores sensaciones a lo largo de la jornada como él mismo reconocía, ha conseguido darle la vuelta a la situación con raza y coraje para finalizar en octava posición. En el grupo cabecero, también han finalizado Alex Aranburu, que ha sido 18º, y Gonzalo Serrano, 24º. Apenas diez segundos después han entrado Samitier y Aberasturi, que ha quedado encerrado en el tramo final y sin opciones de disputar el sprint.
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