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David De la Cruz estará al servicio de Chris Froome / © Sky
David de la Cruz ya se encuentra en Israel preparado para afrontar su primera grande con el Team Sky. El de Sabadell llega al Giro con muchas ganas y con un objetivo claro: dar su mejor versión para ayudar a Froome a ganar la prueba. El corredor español considera que «llevamos un equipo muy fuerte con el objetivo de ganar con Chris. Tenemos corredores preparados para cubrir todas las especialidades». En cuanto a cuál debe ser su rol en la Corsa Rosa, De la Cruz explica que «a nivel personal me tocará estar con el líder en los momentos más claves en la montaña, media montaña y sobre todo más de cara a la última semana. Soy un corredor que suele ir a más en las carreras y la parte final del Giro va a ser muy importante».
El catalán llega bien físicamente a la prueba italiana. Se ha encontrado bien entrenando estas semanas y está con ganas de volver a ser protagonista como lo fue a principio de año en carreras como Andalucía o París-Niza. Pero esta vez, para aportar a nivel colectivo, aunque reconoce que «será una gran vuelta diferente para mí. No voy con la idea de hacer una buena general, sino de hacer el mejor trabajo posible para Chris y de aprender un corredor como él, cómo afronta las carreras de tres semanas… Espero que sea una experiencia enriquecedora para mí, especialmente de cara a la Vuelta, que ya la afrontaré con otras ambiciones. Así que vengo con la idea de dar mi mejor versión y de estar a disposición del equipo. Creo que todos los que venimos aquí tenemos la idea de ganar la carrera con Chris».
De la Cruz cree que el recorrido es duro, típico del Giro y que la clave va a estar en la última semana de la prueba, donde se acumula más dureza. «Hay etapas para todos: para sprinters puros, otras para escaladores y también de media montaña. El Giro tiene el hecho de que es la primera grande del año y por las fechas siempre te puedes encontrar con un clima adverso. Además las etapas son muy largas y eso hace que, junto a los traslados, la fatiga se acumule en la última semana que siempre suele ser decisiva. Es una carrera distinta al Tour o a la Vuelta, más de fondo por así decirlo. Estoy seguro que vamos a afrontar tres semanas muy bonitas de ciclismo. Creo que la clave estará en la última semana. Al principio se tratará de ir salvando las primeras etapas pero lo decisivo estará al final, donde se suele concentrar mucha dureza».
