BALANCE FINAL CON MAXIMILIAN SCIANDRI Y SERGIO SAMITIER
El director deportivo italiano del Movistar en el Giro de Italia y el mejor corredor clasificado en la general para los telefónicos hace resumen a la gran experiencia adquirida por los jóvenes, uno de los grupos más combativos durante las tres semanas de carrera.
Valoración general de Sciandri
“Cuando viajas a una Gran Vuelta siempre tratas de marcarte una expectativa, y nosotros teníamos claro que el grupo que venía aquí, siendo buenos corredores, son gente que normalmente siempre está trabajando para un líder. La dificultad residía en motivarlos para que fuesen conscientes de la oportunidad que tenían para buscar resultados para sí mismos. Pienso que en el global de la carrera, en el día a día, hemos cumplido el objetivo de entrar en las fugas y ser protagonistas en puntos clave de la carrera. Sí, es cierto que nos ha faltado el resultado, la victoria, que habría sido la guinda, pero creo que el equipo en su conjunto ha corrido muy bien en este Giro. Si ves la lista de ganadores de etapa, se han repetido una serie de nombres de grandísima calidad; los ejemplos más claros han sido Ganna, Tao… Gente del más alto nivel. Nosotros, que no veníamos con un equipo de gente acostumbrada a pelear por resultados continuamente, sino que desarrollan su mejor trabajo con otro enfoque, hemos dado el máximo con lo que teníamos”.
SERGIO SAMITIER
“Pienso que lo hemos hecho bien, pero nos ha faltado un resultado al equipo, yo creo. Hemos estado en todas las fugas y lo hemos peleado tanto que diría que lo que nos ha faltado es solo ese resultado, para considerar que todo ha ido más o menos bien. El equipo que estábamos aquí, de jóvenes, porque somos todos jóvenes… pues con lo que te cuesta un Vincenzo Nibali o similar, nos pagas a todos nosotros y te da para tres coches y una furgoneta. Con gente tan joven, haber estado en todas las fugas, estar peleando en carrera… creo que es un balance positivo. Creo que todos hemos dado un paso adelante en este Giro: de maduración, de experiencia… de todo. La rabia es que nos ha faltado, como ayer con Einer, conseguir un ‘peluche’. Pero no queda duda de que lo hemos peleado hasta el final.
He apretado el culo más que en la Vuelta 2019. El año pasado, como era la primera Gran Vuelta que disputaba, la tomé con mucha calma. Los primeros días fui muy tranquilo, pillando muchas ‘grupetas’. Este año en el Giro he apretado el culo todos los días, como quien dice; unos días en la fuga, otro día en el pelotón, pero todos los días a tope. El cuerpo responde diferente: más maduro, petardeas menos. Y ha sido una carrera muy diferente, con todo el tema del covid. Una experiencia más, y bonita. Ya solo me queda el Tour y me retiro (ríe)”.
UNO A UNO EL RESTO DEL EQUIPO
CARRETERO: “Seguramente ha sido el que más fugas ha acumulado. Cuando arrancamos en Sicilia le dije: ‘Mira el libro de ruta y apúntate tus días. Aquí, aquí, aquí y aquí’. Y en ese sentido, los días que quería ir en fuga ha cumplido entrando. No ha llegado ese momento de gloria, pero ha estado donde tenía que estar”.
CATALDO: “Ha sido nuestros ojos, los ojos de los directores deportivos. Nos ha ayudado a conducir al grupo en carrera, ha sabido transmitir consejos importantes. Conoce bien el Giro. Yo le pedí de inicio que se divirtiera, después de un Tour tan duro, y ha sabido estar luchando ahí”.
PEDRERO: “Con Antonio salimos a intentar hacer la general, sin presión, sin llamar la atención sobre ello. Nuestro objetivo era intentar correr tranquilos, ‘bajo el radar’, las primeras dos semanas, y pasar esos días más complicados para él, en lo cual ha cumplido muy bien. Pero quizás en la última semana ha pagado esa presión que él mismo se ponía sobre sus hombros, esa voluntad de querer liderar al equipo. Me gustaría que este gran bagaje que ha adquirido en el Giro le ayude mucho en el futuro y pueda aspirar a resultados en los próximos años“.
RUBIO: “Siendo neoprofesional como es, teníamos muchas ganas de ver como se desenvolvía, porque al final, un Giro son 21 días y de gran exigencia. Ayer hizo una etapa increíble; tras 20 jornadas de carrera, en un recorrido con 3500 metros de desnivel, en un día veloz, un día en que la fuga se hizo en el llano, donde él lógicamente tiene que sufrir más… fue capaz de llegar al circuito de Sestriere y obtener un muy buen resultado. Es un chico con grandes cualidades, que le tienen que llevar muy lejos en el futuro”.
SEPÚLVEDA: “Ha hecho todo lo que ha podido. El día de Roccaraso lo hizo muy bien en la fuga, pero con el frío y la lluvia, en una jornada donde vestirte o cubrirte bien era tan clave, le faltó ese puntito clave para poder aspirar al triunfo”.
TORRES: “Un grandísimo gregario de lujo. Un ciclista muy difícil de encontrar actualmente, de los que son muy importantes para un equipo. En un equipo como Movistar Team, quizás más chapado a la antigua y que, en ese sentido, cree en los gregarios, Albert funcionará bien. Se ha comportado de manera excepcional. Ha aprendido muchísimo y ojalá ese nivel físico lo pueda mostrar también en la pista, si como parece hará las grandes citas en los próximos meses. Ha mejorado día tras día. No ha habido que decirle nada; se ha ido adaptando a la carrera y ha tomado una enorme experiencia”.
VILLELLA: “Lo ha hecho bien. Ha estado en varias fugas y me habría gustado que se llevase a casa un buen resultado. Podría haber estado en un top-5, un top-3 de etapa; no le ha llegado, pero ha sido visible en carrera”.
- 21 corredores tomaban ventaja al inicio de carrera, y una vez más Movistar Team enviaba buena representación a la fuga. Einer Rubio y Davide Villella se filtraban en un grupo sin muchos escaladores y al que el ritmo de Astana mantuvo, desde bastante lejos de meta, muy controlado alrededor de los siete minutos de margen. Solo en el tramo duro de la primera subida, cuando restaban unos 60 km al final, INEOS Grenadiers tomó las riendas para empezar a endurecer el ritmo atrás.
- En el primer descenso, Ballerini (DQT) tomaba ventaja sobre una persecución de seis donde Einer Rubio se destacaría al ataque. A unos 30 km de la llegada, el boyacense, que veía en peligro sus opciones al estallar la carrera entre los hombres de la general -Geoghegan Hart (INS) y Hindley (SUN) por delante de Kelderman (SUN), como en el Stelvio-, arrancó en solitario en busca del hombre de cabeza, con unos 2′ de margen.
- Rubio se marchaba solo al frente hasta los últimos 10 km, cuando fue alcanzado de nuevo por el propio Ballerini y Serry (DQT), primero; y el grupo de Tao y Hindley, después. El colombiano de Movistar Team cedía definitivamente a seis kilómetros de una llegada y terminaba en un brillante 6º (+1’35”) en una llegada donde Geoghegan Hart se imponía a Hindley y empataba en la general con el aussie a solo 24 horas del final. Sergio Samitier se mantuvo 13º en la general, con Antonio Pedrero, 19º.
DECLARACIONES
Einer Rubio. «Lo hemos intentado todo lo que hemos podido en este último día. Quería ir en fuga y probarlo de lejos una vez en ella, porque sabíamos que era un día donde los hombres de la general lo pondrían muy difícil. He cumplido con ambos objetivos, pero no se ha dado. Habrá seguro muchas oportunidades en el futuro; solo tenemos que prepararnos mejor y aprovechar la confianza que nos han dado estas semanas.
Muy contento con este debut en una Gran Vuelta y en un Giro de Italia. Aprendí muchas cosas y me llevo un bagaje muy importante para el futuro. Como digo, ahora la experiencia y la preparación son las que me van a dar la oportunidad de llegar mejor a las próximas grandes carreras y, ojalá, algún día poder estar peleando por cosas importantes en lugares como este. Es otro nivel: están los mejores del mundo, no es fácil ir a la escapada… no es fácil nada. Hay que tener mucho talento, mucha inteligencia y todo eso lo iremos adquiriendo.
Ahora toca cubrir la crono de mañana, recuperar un poco, disfrutar de este final de temporada, afrontar muy bien la pretemporada y empezar el 2021 con ilusiones renovadas».
- La etapa arrancaba convulsa. Debido a las condiciones meteorológicas, la carrera se detenía tras solo 8 km y después de haber partido con bastante retraso. Los vehículos de equipo, que ya habían arrancado hacia Asti, volvían sobre sus pasos para recoger a un pelotón que no volvió a tomar la salida cuatro horas después, en Abbiategrasso, con 124 kilómetros por cubrir. En total, más de media etapa recortada por el mal tiempo.
- Reanudada la competición, tras un primer tramo de gran lucha, se formaba una fuga de 15 corredores con la presencia de Albert Torres. El menorquín se filtraba en un grupo siempre muy controlado por Bora – hansgrohe, quien no les dejó adquirir más de un minuto y medio de ventaja. Sin embargo, a poco más de 50 km del final, y sin más compañeros de viaje para tirar, el conjunto alemán se paraba y la fuga se convertía en protagonista absoluta del final de etapa.
- A partir de ahí, Torres se adentraba en la siempre difícil resolución de una fuga tan numerosa. Uno de los primeros ataques acababa valiendo: de un corte de seis ciclistas se movía en solitario, a falta de una veintena de kilómetros, Josef Cerny (CCC) para llevarse la etapa. Por detrás, en un segundo escalón, Albert lideraba su sprint para ser 7º y demostrar, una vez más, que su paso al WorldTour en el 2020 es plenamente merecido. No hubo cambios entre los favoritos; Samitier y Pedrero continúan 13º y 16º en la general.
- Era una de las últimas oportunidades para equipos como Movistar Team y la escuadra telefónica no dejó de intentarlo desde salida. Primero fueron Cataldo, Samitier y Rubio en la subida a Campo Carlo Magno; de ese grupo inicial de 20 saltaba Dario y buscaba también marcharse por detrás Carretero; y tras la insistencia de EF por echar abajo esa segunda fuga de diez con Cataldo y Héctor, en el Passo Castrin acababa recibiendo ‘luz verde’ una escapada de 15, con Samitier, Cataldo y Antonio Pedrero.
- Los tres azules veían cómo su intento de fuga era muy retenido por el trabajo de Sunweb en el pelotón. Al pie del Stelvio (-63 km), la escapada mantenía algo más de tres minutos, de los cuatro que tuvo de máxima. La diferencia solo haría por decrecer, más desde el momento en que la carrera saltaba por los aires: Almeida (DQT) cedía comba a mitad de subida en el grupo de favoritos y veía cómo Hindley (SUN) y Geoghegan Hart (IGD) arrancaban por delante de Kelderman (SUN). Pedrero, ayudado por Cataldo y Samitier, era neutralizado por los favoritos a nueve kilómetros del alto.
- En meta acabaría siendo Samitier el primero de los Movistar Team, después de que los dos puertos finales abriesen unas diferencias enormes: minuto y medio entre el ganador Hindley y Tao con Kelderman, nuevo líder; casi cinco minutos sobre la ‘Maglia Rosa’ saliente Almeida; y 16’22” con respecto a Sergio, 19º clasificado. En la general, comprimida ahora a tres ciclistas en 15″, Samitier se sitúa ahora 13º, con Pedrero, 16º.
- De salida, la apuesta combativa de Movistar Team parecía alcanzar nuevas y sorprendentes cotas. Ya antes del inicio de Forcella Valbona se marchaban Davide Villella y Dario Cataldo en un quinteto con escaso margen. En las primeras rampas, se acabaría consolidando un grupo de 19 corredores, con los dos italianos de la escuadra telefónica junto a Eduardo Sepúlveda y Héctor Carretero. Medio plantel azul y una quinta parte de un grupo al que el Deceuninck – Quick Step de Joao Almeida dejó algo más de cuatro minutos en el alto.
- Tras superar el Bondone, en cuya cima (-86 km) la fuga ostentaba más de siete minutos sobre el grupo de favoritos, Dario Cataldo iniciaba los ataques con un movimiento en el final del descenso. Su movimiento propició un amago de selección, si bien menor de la esperada: Héctor Carretero reentraba en el llano previo al Passo Durone, junto a Ghebreigzabhier, O’Connor (NTT), Dennis (IGD), Zakarin (CCC) y Vanhoucke (LTS); un segundo terceto, con De Gendt (LTS), Pernsteiner (TBM) y Davide Villella, se reincorporaba en la ascensión; y otros cinco corredores, con Rodríguez (AST), Bouchard (ALM), Hansen (COF), Frankiny (GFC) y De la Parte (CCC), entraban antes de la subida final.
- Los tres Movistar Team acusaban, por desgracia, su esfuerzo en la primera parte de la subida a Madonna di Campiglio, quedando fuera de una selección final en la que acabaría imponiéndose O’Connor (NTT). Villella acababa progresando hasta la 7ª posición, a algo más del ganador. Por detrás, Antonio Pedrero acusaba sus esfuerzos en esta tercera semana y perdía pronto contacto con un grupo de favoritos donde Almeida mantuvo la Maglia Rosa. El catalán pasa a ser 16º en la general, con Samitier, ahora 15º.
- Superando las rampas de la Madonnina del Domm (2ª), primer puerto de la jornada, se marchaba tras unos 25 kilómetros una ‘maxi-fuga’ de hasta 28 ciclistas, con doble presencia para Movistar Team de la mano de Sergio Samitier -el mejor situado de la escapada en la general, a unos 20′ de Almeida (DQT)- y Einer Rubio. Pese a que en un primer momento Deceuninck tiró con bastante empeño, al paso por el segundo puerto del día, Monte Spig (3ª), la ventaja superaba los 6′.
- La ventaja no dejaba de crecer para el grupo de Rubio y Samitier al iniciar las subidas a Ragogna, en las que Tratnik (TBM) tomaba ventaja sobre un pequeño grupo perseguidor en el que trataban de entrar los dos azules, si bien en vano. Einer Rubio se sacrificaba en última instancia para Sergio Samitier, 13º a casi 3′.
- Pese a la oposición final de Ben O’Connor (NTT), que le daba alcance en la última subida a Ragogna, Tratnik se imponía en meta por delante del australiano y de Enrico Battaglin (TBM). La ventaja de Samitier en meta sobre el pelotón de favoritos, casi 10 minutos, le dejaba en el 16º lugar en la general que ocupaba en la víspera, aunque ahora a unos 10′ de Almeida. La Maglia Rosa incrementó su escasa ventaja actual con un ataque en el repecho final; Antonio Pedrero, que sigue 13º en la carrera, terminó a 11″ del portugués.
Sergio Samitier: «Ya nos explicaba Chente que hoy iba a llegar la fuga y así ha sido. Tenía claro que quería estar… pero quería estar yo y 140 más que corríamos hoy. Salvo los seis primeros, todo el mundo quería ir, y eso lo hace todo muy difícil. Ha sido un grupo numeroso y nos hemos podido meter con Einer. Sabíamos que con 7-8 minutos a la entrada del circuito llegábamos, y hemos entrado con 10. Lo malo de los circuitos finales es que incrementan la tensión, y hace que entres en ‘modo final de etapa’ desde 80 u 85 kilómetros antes de la llegada. En los llanos iban arrancando gente de varios equipos y nos hemos repartido el trabajo Einer y yo, saliendo a las ‘leches’ uno y otro, cerrando grupos… Justo el ataque de Tratnik no hemos estado, pero es que hay tener ojo para estas cosas, ser vivo. Se nos ha escapado, igual que a Bora o a otros equipos. Cuando se nos ha ido, hemos intentado apretar a tope en una de las subidas a Ragogna con Einer, y nos hemos quedado muy cerca, pero nos miraban mucho, ya que éramos dos Movistar en un grupo de 7-8. Ahí le he dicho a Chente: «Uno de los dos se tiene que sacrificar por el otro si queremos llegar». Einer se ha puesto como una moto, sin decirle nada. Se ha pegado 25 km increíbles, de esos que dices: «Madre mía, Einer, te tengo que pagar una cena, porque lo que has hecho es increíble». Es el compañerismo. Me daba igual yo que él, pero se ha puesto sin decirle nada y se lo agradezco. Al final Chente me ha dicho que siguiera a mi ritmo, a tope, y hasta donde llegase. Sabor agridulce, porque era una fuga que quizás, por piernas, en el puerto, podíamos haberla disputado, y que se nos haya escapado en el llano es una pena. Pero el que la sigue la consigue…».
Einer Rubio: «He visto la oportunidad de marchar en la fuga y las piernas iban bien, aunque finalmente no se ha podido. La carrera se juega en esos instantes rápidos y en estas fugas, saber resolver es importante. Unas veces se gana y otras no. He intentado trabajar para Sergio en la parte final para intentar que llegase y me llevo las buenas sensaciones y, sobre todo, la confianza, que para estos días de montaña que vienen, con un terreno mejor para mí, quizás nos sirva. Es una pena que Fernando (Gaviria) haya tenido que abandonar por una circunstancia así, y es cierto que ahora quedo yo un poco como el corredor colombiano con opciones para pelear ese triunfo. Será ya bonito si puedo tener la oportunidad; es una responsabilidad estar ahí, pero también una alegría tener esta oportunidad».
- Como ya ha sucedido en varias ocasiones en este Giro, presencia múltiple en fuga desde la salida y una papeleta que solucionar. Se marchaban 11 corredores en el arranque, con Davide Villella entre ellos, y una contra con Sergio Samitier trataba de conectar con ellos en un alto no puntubale previo a Sella Chianzutan. Acompañado de Guerreiro (EF1), líder de la Montaña, el de Barbastro no pudo conectar con la cabeza hasta dejar atrás a su acompañante, contra el que tiraron fuerte varios de los fugados. Al entrar ‘Sami’, la diferencia era de algo más de 6′ sobre un pelotón tirado por Sunweb y NTT.
- No sería hasta la tercera de las cuatro subidas, Forcella di Pala Balzana, a unos 45 km del final, cuando la fuga, mantenida siempre en tensión por el empuje de Sunweb (los favoritos viajaban a 3′ en aquel momento), saltaba en pedazos. Dennis (IGD) y De Gendt (LTS) se marchaban, en este orden, por delante de un segundo grupo donde Samitier trataba de mantener vivas sus opciones junto a Visconti (THR). Justo por detrás, Villella, que tuvo que gastar copiosas energías por una avería en un tramo anterior, perseguía en un tercer escalón.
- Tanto Samitier como Villella fueron cazados, en las primeras rampas de Piancavallo, por un grupo de favoritos donde Sunweb siguió dominando y causó numerosos desfallecimientos entre los favoritos. Antonio Pedrero, que cedió contacto a unos 10 km de la cima -en compañía de Pozzovivo (NTT)-, supo regularse bien y acabar cerca de Nibali (TFS), Fuglsang (AST) o Bilbao (TBM), a 1’54” del ganador Tao Geoghegan Hart (IGD), que supo imponerse a los sunweb Kelderman y Hindley. Almeida (DQT), a 37″, mantuvo el rosa.
- Filippo Ganna (IGD) volvió a repetir exhibición, hoy en un trazado más largo y sinuoso, para imponerse sobre su compañero Rohan Dennis y el estadounidense McNulty (UAD) y llevarse su tercera victoria de etapa en la carrera. Una demostración a 48 km/h de media para superar, incluso, a los favoritos de la general, entre los que el líder Joao Almeida (DQT) fue el más fuerte y afianzó su Maglia Rosa.
- Entre los Movistar Team, Dario Cataldo fue, con su 46’05”, a algo más de tres minutos de Ganna, el más destacado en un plantel que tiene sus miras centradas en los triunfos de etapa en las seis jornadas en línea que restan. Antonio Pedrero, escalador puro, sufrió en un recorrido menos apto para sus características y terminó algo por encima de los 48′. El egarense, que junto a Sergio Samitier se mantiene en el top-20 de la general, contará ahora con más margen para movimientos, ubicado a unos 7′ de Almeida.
PRÓXIMOS OBJETIVOS
Este domingo, el Giro entra definitivamente en la alta montaña, con la esperanza de que todo lo previsto se pueda cubrir y la meteorología no lo impida. La 15ª etapa comprenderá 185 km entre la Base Aérea de Rivolto, hogar de la patrulla acrobática del ejército italiano, y la cima de Piancavallo (1ª; 14,5 km al 7,8%), superando previamente Sella Chianzutan (2ª), Forcella di Monte Rest (2ª) y Forcella di Pala Barzana (2ª).
- Tras unos 25 km de etapa se formaba la fuga del día, con Bouchard (ALM), Pellaud, Ravanelli (ANS), Contreras (AST), Tonelli (BCF), Vanhoucke (LTS) y Rota (THR). Sin embargo, y pese a que ninguno suponía amenaza alguna para la general, Bora-Hansgrohe e Israel Start-Up Nation mostraban un sorprendente celo y tiraban pronto del pelotón, dejando en menos de dos minutos la ventaja de los escapados.
- A la postre, lo que parecía ser una oportunidad de sprint acabó siendo casi un duelo mano a mano entre los favoritos. La dureza de las cotas de Roccolo (4 km al 8%) y Calaone (2 km al 10%) deparó numerosos ataques y dejó el grupo de punta -una vez cazada la fuga, con Tonelli y Bouchard como últimos supervivientes, en el segundo de los altos- en apenas 20 ciclistas. Por parte de Movistar Team, tras una buena labor de aproximación de Sepúlveda, Cataldo y Torres, Sergio Samitier mostró muy buenas piernas y comandó la última de esas subidas, acompañando a un Antonio Pedrero siempre presente en cabeza. Por detrás rodaban en un segundo escalón Davide Villella y un Einer Rubio que cedió solo al final.
- Ulissi (UAD) se imponía al sprint por delante del líder Almeida (DQT) y Konrad (BOH), mientras Samitier obtenía una meritoria 6ª posición tras arrancar desde muy atrás su rush final. Pedrero, decimoséptimo en meta, continúa siendo 13º en la general, a 38″ del top-ten, con Sergio, decimosexto en la clasificación de este Giro.
Sergio Samitier: «A pesar de que había viento de cara y de que en muchos tramos íbamos de uno en uno, en el pelotón se ha hecho más cómodo de lo que pensaba. Con el conocimiento que tiene (Max Sciandri) ‘El Bambino’, como dice Chente, y su meticulosidad al revisar los puntos complicados de las etapas, sabíamos que esos 4 km del primer puerto eran muy estrechos y con esas rampas, nosotros sí teníamos claro que no iba a ser una etapa al sprint. Era un ‘pepino’, un puerto más típico del País Vasco. Se ha subido a tope, se han quedado los sprinters y han llegado los hombres de la general adelante. En el último repecho me puse un poco ‘tonto’, llevaba buenas piernas y he pasado hacia adelante, pero luego he esperado a Antonio en las rampas finales para apoyarle, aguantar los dos en el grupo y en el sprint he hecho lo que he podido. Fíjate un detalle: es la etapa con menos desnivel de todas las que hemos hecho en el Giro. No ha llegado ni a 1000m. Pero da la impresión de que la gente está muy cansada, y en un día como hoy, que podías pensar que sería de descanso, ha acabado siendo dura. Y ayer, también dura… y así, muchos días. En la última semana habrá seguramente muchos ‘petardazos’, y confío en que no sea ninguno de los nuestros quien lo sufra (ríe)».
- La fuga se formó antes de lo que el propio pelotón esperaba. Unos 20 km después de la salida se marchaba un grupo de trece, con mayoría de rodadores -amén de ciclistas completos como Narváez (IGD), Padun (TBM) o Clarke (EF1)- y Albert Torres entre los hombres de punta. A ellos acabaría llegando, tras una larga persecución, un Héctor Carretero que completaba la doble representación de Movistar en cabeza. Su ventaja máxima: casi 13 minutos sobre el pelotón controlado por el Deceuninck – Quick Step de Joao Almeida.
- NTT era el equipo más interesado en la persecución y redujo notablemente las diferencias hasta unos 5′ de distancia ‘mínima’ (no se redujo más). Su empuje supuso un desgaste que, sumado a la aparición de las tormentas y numerosos ataques, volvieron aún más exigente la etapa. Las continuas idas y venidas pasaban factura a Torres y Carretero, que acabaron cediendo de una selección de siete ciclistas. Entre ellos se impuso finalmente Narváez, vencedor en solitario sobre Padun (2º) y Clarke (3º).
- Por detrás, Antonio Pedrero aguantaba tras las cotas el ritmo de un pelotón reducido a tan solo 15 integrantes, que sin embargo no registró, salvo un breve acelerón de Pozzovivo (NTT), ningún movimiento significativo ni tampoco cazó a la fuga -se presentaron en meta más de 8′ después del vencedor-. El egarense es ahora 13º en la general, a 38″ del top-ten, con Samitier, que acompañaba hasta la cota a Pedrero junto a un gran Torres, manteniéndose 16º.
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- Movistar, ayer presente por partida doble en la escapada con Villella y Cataldo, tuvo en Dario el hombre encargado de poner su cara al viento por el resto de los compañeros en la aproximación a Rimini. Albert Torres, siempre entregado a las labores de equipo, remató el trabajo de mantener a Antonio Pedrero bien posicionado en una llegada técnica y peligrosa.
- Más de una docena de corredores no iniciaban esta segunda semana a causa de los resultados de las pruebas RT-PCR realizadas durante la jornada de descanso. Mitchelton-Scott y Jumbo-Visma abandonaban la prueba en bloque, mientras Matthews (SUN), positivo al igual que Steven Kruijswijk (TJV), debía permanecer en cuarentena. Entre los Movistar, ninguna desagradable sorpresa: todos negativos, ciclistas y staff.
- El arranque fue otra locura en la búsqueda de la fuga. 90 kilómetros hicieron falta para que se consolidase un intento que Movistar Team buscó con ahínco, enviando por delante a sus dos ciclistas italianos, Cataldo y Davide Villella, mientras Héctor Carretero y varios de sus compañeros contenían el empuje por detrás. La insistencia de Groupama-FDJ en no dejar marchar la escapada, con la presencia de Sagan (BOH), rival por la Maglia Ciclamino de Arnaud Démare, estuvo a punto de neutralizar la escapada. Sin embargo, a 85 km del final, el conjunto francés cedía en su empeño y dejaba marchar al dúo telefónico, acompañado también de Restrepo (ANS), Ganna, Swift (IGD) y Simon Clarke (EF1).
- UAE Team Emirates se hacía cargo de contener el avance de la escapada, que alcanzó una ventaja máxima de 4’45”, antes de iniciar las duras cotas finales. En ellas, Cataldo elevó en varias ocasiones el ritmo buscando facilitar las opciones de Villella, quien sin embargo se encontró con dos duros rivales: el pelotón, con el ritmo de NTT y Deceuninck y el ataque de Bilbao (TBM); y la mayor fortaleza en la escapada de Sagan y Swift, quienes lo dejaron atrás en la penúltima cota (-17 km) al tiempo que Bilbao lo sobrepasaba.
- Por detrás, cazados Dario y Davide, seguían batallando Antonio Pedrero y Sergio Samitier. El egarense consiguió concluir en un pequeño segundo escalón de favoritos, a 27″ del líder Almeida (DQT), que fue 3º tras el brillante Sagan (1º) y McNulty (UAD, 2), que atacó en el tramo final. ‘Sami’ terminó por su parte en el tercer grupo, a 1’15”, acompañado de un Fuglsang (AST) perjudicado por un incidente en el último descenso. Antonio es 15º en la general, a poco más de 1′ del top-ten, con Sergio, 17º.
Dario Cataldo: “Hemos buscado la fuga desde el inicio, ya que éramos conscientes de que un día como este se podía prestar a que una fuga llegase, y por mi parte y junto con Davide lo he intentado, he puesto coraje, corazón, pero no ha sido suficiente. Cuando afrontas recorridos como este y tienes delante corredores como Sagan, explosivos, que en rampas cortas y duras como esta saben sacar provecho a su esfuerzo, es realmente complicado. Intentas anticiparte a sus movimientos y saltar antes, porque si no, es muy difícil. Por lo demás ha sido una etapa preciosa, por su desarrollo, por los paisajes, carretera en perfecto estado… un gran espectáculo”.
- Peleas como la vivida este domingo por la escapada buena del día a menudo solo ocurren en jornadas exigentes de grandes vueltas, como la de hoy. 80 km y más de hora y media de carrera llevó consolidar una escapada por la que lucharon Villella, Samitier, Cataldo -que sufrió una caída sin consecuencias en el arranque- y el finalmente presente Eduardo Sepúlveda. Frankiny (GFC), Visconti (THR), Guerreiro (EF1), Castroviejo (IGD), O’Connor (NTT) y Warbasse (ALM) acompañaban al chubutense en un grupo que coronaba el Passo Lanciano (-108 km) con más de siete minutos de ventaja.
- Sepúlveda perdió, sin embargo, contacto en la penúltima ascensión puntuable, Bosco di Sant’Antonio, sobre un grupo de cinco al que había llegado terreno atrás, tras larga persecución, el danés Bjerg (UAD). Por detrás, Trek-Segafredo tomaba el relevo de Deceuninck-Quick Step al frente del gran grupo y seleccionaba un pelotón donde Pedrero y Samitier se mantenían con los otros favoritos, acompañados de Davide Villella.
- Guerreiro acababa llevándose el éxito desde la escapada, por delante de Castroviejo (2º) y Bjerg (3º), mientras que Sepúlveda, neutralizado por el grupo de favoritos, dio buenos relevos para ayudar a un Antonio Pedrero que acusó los esfuerzos y terminó a 50″ del primer escalón de favoritos, con Fuglsang (AST) y Kelderman (SUN). Almeida (DQT) conserva la Maglia Rosa, con Pedrero, 16º a 2’27”, y Samitier, cerrando el top-20, a 4’06” tras dejarse hoy algo más de dos minutos con el pelotón.
Declaraciones
Eduardo Sepúlveda: “¡Hoy sí que fue duro llegar a la fuga! En la reunión de equipo habíamos planteado que Albert (Torres) y algunos compañeros controlasen esos 60 kilómetros planos previos a los primeros repechos, y el resto, a partir del kilómetro 60, teníamos la responsabilidad de estar delante. De hecho, antes de mi fuga se había hecho un corte con Villella y Samitier, pero el pelotón no les dejaba irse, y al final en el primer puerto -NdR: Guardiagrele, no puntuable- nos pudimos ir cuatro, tomamos tiempo con el pelotón y luego llegó más gente desde atrás. En mi caso personal, lo que más me ha costado es el frío. Con el agua tenía la sensación de que se inflaron las piernas y no podía exprimirme bien; no llegué a meta como fatigado del todo, y es que con el frío sí que cuesta un poco más. Por lo demás, y aprovechando que estaba ahí y que Antonio está haciendo la general y que no tenía nada más ya que hacer, intenté ponerme ahí en esos últimos kilómetros con todo lo que pude, a su servicio. Termino el día con muchas ganas de volverlo a probar. El hecho de no poder disputar del todo hoy me da una mayor motivación para seguir buscándolo. Queda mucha montaña y ojalá que podamos volver a estar delante”.
PRÓXIMOS OBJETIVOS
La caravana vivirá mañana lunes, fiesta nacional de España, su primera jornada de descanso en las afueras de Pescara, antes de reanudar el Giro 2020 con la décima etapa, el martes, entre Lanciano -localidad natal de Dario Cataldo- y Tortoreto, de incómodo recorrido, ‘tipo Tirreno-Adriático’, lleno de repechos.
- Costó casi una treintena de kilómetros consolidar la fuga, pero acabó siendo ganadora. Holmes (LTS), Dowsett, Brändle (ISN), Ravanelli (ANS), Rosskopf (CCC) y Puccio (IGD) se marchaban por delante de un pelotón donde Deceuninck – Quick Step, el equipo del líder Almeida, cumplió con su labor de control pero no mostró interés en la lucha por la etapa. Así las cosas, el pelotón se plantaba a pie de Sant Angelo (-105 km) con más de 10′ de desventaja… y ningún equipo con velocistas resistentes hacía amago de reducirla, quedando intacta en la cima.
- En el descenso sí se produjo un cambio: Trek-Segafredo, que buscaba proteger a su líder Vincenzo Nibali, incrementó el ritmo en la bajada y puso nervios en un pelotón donde Jakob Fuglsang (AST) se vio obligado a perseguir después de la bajada para reconectar. El forcing del conjunto norteamericano, que redujo a 8′ la diferencia, no tuvo continuidad y los seis fugados se pudieron jugar con tranquilidad el triunfo entre ellos. El premiado: Alex Dowsett, que arrancó sin oposición a menos de una veintena de kilómetros de meta tras haber quedado inicialmente descolgado de la fuga en el primer paso por la cota final.
- Para Movistar, como para muchos otros conjuntos, fue un día pensando en la dura batalla montañosa que espera este domingo. Dario Cataldo, acompañado de los Villella, Torres o Sepúlveda, volvió a ejercer una valiosa labor de capitanía de sus compañeros y protección de un Antonio Pedrero siempre cerca de la cabeza. Algún susto más tuvo Sergio Samitier, que quedó cortado en el incidente de Fuglsang pero que, como su compañero, no tuvo mayor dificultad para cruzar la meta con el grupo y mantener su puesto en la general -15º Antonio, 16º Sergio-.
- Apenas 10 km después de la salida en Matera llegaba el primer ‘punto caliente’ de la etapa. Deceuninck y Jumbo-Visma propiciaban unos abanicos que cortaban el pelotón en cuatro grupos. Movistar Team, que no había entrado en las escasas treintena unidades del primer pelotón, lograba reconectar desde un segundo con Albert Torres y Dario Cataldo realizando una buena labor para Antonio Pedrero. No sería hasta 70 km después de la salida cuando el resto de azules, entre ellos Sergio Samitier, lograban reintegrarse al pelotón principal.
- Con Pellaud (ANS) y Frapporti (THR) intentando restaurar su presencia en la fuga inicial -cazada en los abanicos-, pero sin margen del pelotón, ocurrió un nuevo incidente: una montonera ocasionada por un estrechamiento bajo la pancarta de 45 km a la llegada. Torres, Cataldo, Villella y Pedrero pasaban aquí sin problemas; Samitier, Sepúlveda, Rubio y Carretero se veían por su parte obligados a volver a perseguir, distanciados a más de un minuto de la cabeza. A 20 km de la llegada, los grupos se unían definitivamente.
- La jornada más rápida en línea del Giro en las últimas décadas (más de 51 km/h de media, menos de dos horas y cincuenta minutos para los 143 km) se resolvía con un nuevo sprint vencedor para Démare (GFC), por delante de Sagan (BOH, 2º) y Matthews (SUN, 3º). Pedrero y Samitier estuvieron respaldados en la fase final por un sólido bloque telefónico (Villella, Sepúlveda y los sempiternos Torres y Cataldo al frente), que ocupó la cabeza hasta la ‘zona de seguridad’ de los últimos 3 km. Antonio y Sergio continúan 15º y 16º en la general, respectivamente.
Declaraciones
Albert Torres: “La verdad es que ha sido un día muy, muy rápido y, sobre todo, estresante para nosotros. Teníamos la responsabilidad de proteger a nuestro líder, en este caso Antonio, y también a Sami, que ha llegado con el pelotón. Sí que es verdad que al principio hemos tenido una buena faena, obligados a correr súper concentrados. En ese sentido hemos tenido una gran ayuda con la experiencia de Dario (Cataldo) en este tipo de etapas. Para mí es importantísimo aprender de gente como él. El equipo ha hecho una labor excelente, repartiéndonos el trabajo en momentos puntuales y salvando una etapa importantísima. Muchas veces se piensa que lo decisivo en un Giro de Italia es la gran montaña que tiene, pero en etapas así, cortas, con mucho viento… suceden imprevistos que afectan al resultado final. Ha habido caídas y, por fortuna, no nos han afectado y estamos sanos y salvos, algo muy importante para afrontar las próximas con garantías. El equipo tiene que estar contento: hemos tenido buena actitud y, una vez agrupados en la parte final, hemos estado todos en la parte delantera, intentando evitar caídas, y sobre todo, atentos para llevar a Antonio y a Sami lo mejor posible”.
- Movistar, pese a contar con un velocista como Albert Torres en sus filas, centró sus miras en este final en guardar a sus dos mejores hombres en la general, Antonio Pedrero y Sergio Samitier. El propio Torres, Dario Cataldo, Eduardo Sepúlveda y Davide Villella se pusieron a disposición de los dos escaladores azules antes de los ascensos decisivos y comandaron el pelotón en los últimos 30 km. Sin embargo, un susto esperaba a Pedrero en la última rampa: un incidente mecánico que le sacó del pelotón de favoritos y que obligó a su reubicación, previo reclamo a los jueces, en las clasificaciones definitivas.
- Arnaud Démare (GFC) se imponía con suficiencia y lograba su segundo triunfo parcial, por delante de Matthews (SUN, 2º) y Felline (AST, 3º). Unos 60 ciclistas -con el incidente ya comentado para Pedrero- lograban terminar en cabeza, con Samitier entre ellos. Antonio y Sergio se mantienen 15º y 16º en la general.
- Por el perfil de la etapa, se sabía que podía ser un día para las fugas, y Movistar Team no dejó de intentarlo. Dario Cataldo, Davide Villella… varios de los telefónicos buscaron filtrarse en un grupo que, tras casi 60 km cubiertos en apenas hora y diez de carrera, acabó conformándose con la presencia de Héctor Carretero. El albaceteño se unía a Restrepo (ANS), Tratnik (TBM), Hagen (LTS), Ganna, Puccio (IGD), Conti (UAD) y Zardini (THR) en una escapada que alcanzó su ventaja máxima en torno a los cinco minutos.
- El ritmo de los Astana, Sunweb o Trek-Segafredo en la aproximación al último puerto y sus rampas iniciales redujeron progresivamente la ventaja de la fuga de Carretero, el más ofensivo entre los escapados. Hasta tres ataques protagonizó el de Madrigueras en un grupo que fue reduciendo poco a poco hasta quedarse con solo dos acompañantes: Zardini y el finalmente vencedor Ganna. Fue tras esa última intentona que llegó hasta ellos una ‘contra’ saltada a inicio del puerto, y en la que Thomas de Gendt (LTS) llevó consigo a un gran Einer Rubio.
- El colombiano fue el último en defender los intereses por la etapa del cuadro telefónico, luchando en persecución de un Ganna que dejó atrás sin remisión a Einer y a De Gendt a 15 km del final. Rubio acabaría siendo neutralizado por un grupo de favoritos de una veintena de integrantes, con la presencia de Antonio Pedrero y un Sergio Samitier que también buscó los ataques en varios ocasiones en la parte final. Los dos azules progresan a las plazas 15ª y 16ª de la general, siempre comandada por Almeida (DQT).
Declaraciones
Einer Rubio: “Hemos intentado pelear la fuga, varios en el equipo, y aunque en mi caso no se ha podido entrar teníamos a Héctor ahí bien situado. En la última subida se han ido formando esos ataques y he visto la oportunidad para marcharme y he podido seguir la arrancada de De Gendt. Hoy sí que he notado más confianza en el lote y bastantes mejores piernas, después de unos días en los que me había costado un poco más y no me terminaba de encontrar del todo bien. Faltó un poco para poder seguir ese ataque final de Ganna, pero como digo, ya vamos encontrando mejores sensaciones y tomando esa confianza en uno mismo. Vamos a seguir intentándolo; voluntad no falta y seguro que lo probaremos en estos días que vienen“.
- Movistar tuvo un día más o menos tranquilo: los azules solo tuvieron que lamentar una caída para Eduardo Sepúlveda, sin consecuencias, al verse envuelto en un resbalón de Pieter Weening (TFS) cuando trataba de recoger un bidón de un auxiliar. La escuadra telefónica superó con casi todo su plantel en cabeza la subida a Portella Mandrazzi, con la sola ausencia de un Albert Torres que acabó reincorporándose a una treintena de kilómetros del final.
- El menorquín fue precisamente el encargado de conducir hasta la llegada a Antonio Pedrero y Sergio Samitier, que concluyeron en la primera mitad del gran grupo y mantuvieron sus puestos en el top-20 de la general. Démare (GFC) se imponía por milímetros a Sagan (BOH) en la llegada, mientras que Almeida (DQT) mantenía la Maglia Rosa tras endosar 2″ a Caicedo (EF1), empatado con el luso tras su triunfo de ayer, en el sprint bonificado del día.
- A pesar de que la fuga era numerosa y potente -un grupo de ocho con Visconti (THR), Rumac (ANS), Holmes (LTS), Campenaerts (NTT), Bjerg (UAD), Caicedo, Craddock (EF1) y Romano (BRD)-, Mitchelton-Scott tomó pronto las riendas y no dejó un gran margen a los escapados: cinco minutos y medio de estable y máxima ventaja sobre un pelotón que buscaba jugarse el triunfo de etapa. No obstante, y sin un acompañamiento claro a la hora de tirar, la ventaja tardó mucho en bajar de ahí: seguían siendo 4’45” a menos de 40 km del final.
- El trabajo de cobertura en cabeza de pelotón de Albert Torres y el apoyo hasta la última subida de los Villella, Carretero, Sepúlveda, Rubio o Cataldo llevó a Antonio Pedrero y Sergio Samitier frescos a la última subida, que iniciaron (-20 km) a más de 3′ de una escapada donde acabó llevándose el triunfo Caicedo (EF1). El ritmo de Trek-Segafredo o Bora-Hansgrohe antes y durante la ascensión dejó numerosas víctimas, como Thomas (IGD), afectado por una caída en la neutralizada, o Yates (MTS), pronto descolgado.
- Sergio Samitier se animaba a atacar en los últimos 5 kilómetros de un Etna muy movido, con Kelderman (SUN) aventajando a todos los favoritos y un Nibali (TBM) que movió la carrera a menos de 3 del final. Pedrero, que estuvo a punto de entrar en la selección final de grandes candidatos, terminaba a 32″ del grupo del italiano (+1’23” sobre Caicedo), con Samitier, justo detrás. Los dos Movistar Team cierran un top-20 que encabeza Joao Almeida (DQT), nuevo líder con el mismo tiempo del ganador de hoy.
Declaraciones
Sergio Samitier: “Antes del Etna ya ha sido una etapa muy dura. Se hacía realmente exigente porque se iba muy rápido todo el día, la fuga también llevaba mucho ritmo y era un terreno que tenías que estar muy bien colocado, porque era todo el rato bajada, subida, bajada, subida, bajada, subida. Torres, Cataldo y los otros han llevado a Pedrero muy bien colocado, pero yo no iba tan bien situado, me cuesta un poco (sonríe). Todos esos pueblos empedrados, con riesgo; para abajo se tiraban muy rápido en el pelotón… íbamos todo el día gastando de más, y al llegar al puerto se ha visto que la gente estaba muy tocada del esfuerzo de todo el día.
Personalmente trataba de motivarme, acordándome de, como dice Chente, los “muertos asintomáticos”, que van justos pero no dan síntomas. Vas pensando: “Va, que he entrenado bien, que he hecho todo bien en casa, que los demás también tienen que ir mal”. Tiras para adelante y bueno, al final, teniendo a Pedrero ahí, te hace seguir adelante, por si le hace falta algo, por si necesita agua… Yo qué sé, imagínate que pincha. Intentas estar con él… y al final he aguantado casi hasta el final.
Ha entrado mucho aire en el tramo final y en ese punto, los buenos han tirado para adelante y los no tan buenos nos hemos quedado entre medias (ríe), pero bueno, bien. Tercer día, seguimos bien, vamos a salir de la isla mejor de lo que pensábamos y tendremos que confiar en que los demás vayan un poco a menos y nosotros vayamos un poquito a más”.
Tras subir al podio del Tour de Francia para recoger el premio al mejor equipo de la ronda gala, Movistar viaja esta semana a la 103ª edición del Giro de Italia, que dará comienzo el próximo sábado y que se prolongará hasta el 25 de octubre, con la voluntad de abrir camino a varios de sus jóvenes y buscar opciones de triunfo parcial con ciclistas normalmente enfocados en labores de grupo.
Maximilian Sciandri y Chente García Acosta dirigirán un ocho conformado por Dario Cataldo, Davide Villella, Einer Rubio, Eduardo Sepúlveda, Héctor Carretero, Antonio Pedrero, Sergio Samitier y Albert Torres.
Será el debut en la Corsa Rosa para Samitier, Torres y Rubio. Además, para los dos últimos el Giro de Italia también supondrá su estreno en pruebas de tres semanas,. Estarán acompañados de experimentados ciclistas con presencias previas en la carrera, como los escaladores Villella y Sepúlveda, el todoterreno Cataldo -ganador de la 15ª etapa de la edición 2019; único en ‘doblar’ desde el Tour- y dos de los ciclistas que contribuyeron a la victoria de Movistar en 2019: Pedrero y Carretero.