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El Ciclismo Adaptado siempre será un valor añadido en España como para, en este caso, la región de Madrid. Fuente inagotable de cantera gracias al trabajo de la responsable de esta parcela en la FMC, Begoña Luis Pérez, tiene en Gonzalo García Abella a uno de sus mejores exponentes.
Con apenas 23 años, este muchacho de Torrelodones (milita en el equipo Fucicam) acumula un palmarés envidiable, tanto en España como a nivel internacional. Entre 2015 y 2019, ambos inclusive, ha dominado los Nacionales de ruta, en las disciplinas de fondo y de crono. En 2018 se bautizó en los puestos de honor del panorama UCI, liderando el ránking mundial en su categoría MT1 (Triciclos), ganando dos pruebas de la Copa del Mundo (Emmen y Baie Comeau) y colgándose el bronce en los Mundiales de Italia, tanto en crono como en línea.
El año pasado dio un salto más en su progresión, imponiéndose en la general final de la Copa del Mundo (venció en la puntuable de Oostende, y no se bajó del cajón en las otras dos) y se quedó a las puertas de las medallas en los Mundiales de Emmen (Holanda).
Como veis, la discapacidad que tiene en forma de parálisis cerebral de nacimiento no le impide ser actualmente uno de los mejores ciclistas adaptados españoles de la historia.
Comenzamos haciendo balance de 2019. Repites títulos nacionales de ruta en fondo y crono en Villadiego, ganas la Copa de España una vez más y te quedas a un paso de las medallas en los Campeonatos del Mundo de Emmen, Holanda. Notable cosecha. ¿Qué valoración haces de tu temporada?
La temporada 2019 la valoro muy positivamente, porque se han conseguido los objetivos que estaban marcados aunque no me haya llevado ningún metal en el Campeonato de Mundo. Sabemos que estamos en el buen camino para poder volver a subirnos al podio.
Tema Mundiales. Está claro que es otro nivel, pero tú ya sabes lo que es subir al podio en ellos. ¿Es el vestirse de arco iris lo que sería para ti lo máximo o una obsesión? ¿Consideras que estará a tu alcance en los próximos años o lo ves complicado? ¿En qué crees que debes mejorar?
Vestirme de arco iris nunca sería una obsesión y si llega a serlo sería siempre desde el lado más positivo y motivador. No es una obsesión, pero sí es un sueño el poder conseguirlo y para ello estamos trabajando duro y sin rendirnos. Ahora mismo está muy difícil, porque la competencia está a un nivel muy alto, pero creo que soy joven y todavía tengo margen de mejora. Tanto mi entrenador Alfredo Sánchez como yo estamos dándolo todo para conseguir ese sueño.
He podido comprobar que cada año el nivel está más arriba, que hacer un podio en un Mundial es mucho más difícil, y si no mejoras pequeñas cosas o pequeños detalles, (porque pienso que las medallas se ganan en esos pequeños detalles) es muy difícil avanzar. Así que es cuestión de ir haciendo pequeños ajustes y poco a poco mejorando cada entrenamiento, porque si progresas en ellos se reflejarán en los resultados.
¿Se puede decir que tu victoria en la general de la Copa del Mundo fue tu momento más feliz el año pasado? ¿O quizá haber logrado tu 5º Campeonato de España?
Ganar la Copa del Mundo fue muy ilusionante. Para obtener un resultado así se tienen que dar al menos dos circunstancias imprescindibles: Tienes que tener la oportunidad de disputar todas las carreras de la Copa del Mundo con la dificultad de llevar a cabo largos viajes y estancias prolongadas, además de ofrecer un rendimiento deportivo muy importante en cada una de ellas. Quiero aprovechar para agradecer desde aquí a la RFEC, y en especial al seleccionador de Ciclismo Adaptado, Félix García Casas, y a todo su staff por la confianza y el apoyo que me han mostrado durante toda la temporada, y por darme la oportunidad de alzarme con este título tan bonito que sin ellos habría sido imposible conseguir. El 5º Campeonato de España desde luego que también me ilusionó muchísimo, sobre todo por devolver, de alguna manera, a la FMC el apoyo que también me han mostrado desde que empecé a correr.
En España nadie te tose hasta ahora. ¿Sería bueno que tuvieras rivales que pudieran ´estirarte el cuello´ y así subir tu nivel de cara a tus objetivos internacionales? ¿Se vislumbra a algún ciclista adaptado español que te lo pueda poner difícil en el futuro?
Sí, sería bueno porque habría más competencia, rivalidad y cuanta más gente haya en el Ciclismo Adaptado más progresión para todos, aunque personalmente me tomo los Campeonatos de España como si fueran carreras internacionales, con el máximo compromiso por mi parte. La verdad es que nunca se sabe quién te puede poner en aprietos porque en las carreras siempre puede ocurrir cualquier cosa, por eso hay que estar preparado para dar lo mejor de ti en cada momento.
En el Ciclismo Adaptado no existe variedad de categorías como en el ciclismo normalizado (infantil, cadete, juvenil, sub23, etc), por lo que cuando un ciclista con discapacidad empieza a competir lo hace directamente en la categoría elite, y por esta razón no se ve venir a posibles rivales hasta que los tienes junto a ti en la línea de salida. Es emocionante, pero obliga mucho a estar preparado física y mentalmente, porque sabes que en cualquier momento te puedes encontrar con un rival que te ponga las cosas difíciles.
En este 2020 no te hemos visto competir en la primera cita de la Copa de España que tuvo lugar en Badajoz el primer fin de semana de Marzo. ¿Cómo tenías prevista tu planificación antes del confinamiento? ¿Cuáles iban a ser tus objetivos principales?
Centrado principalmente en las carreras internacionales como la Copa de Europa en Cáceres (finales de Marzo), Copa del Mundo en Castiglione de La Pescaia, Italia (finales de Mayo), y la más importante, el Campeonato del Mundo en Ostende, Bélgica (primer fin de semana de Junio), que sería donde se decidiría quién puede ir a los Juegos Paralímpicos de Tokio. Justo antes del confinamiento habíamos empezado con los entrenamientos más exigentes y se iniciaba lo bonito, a coger la forma para estas carreras, y la lástima es que no se ha podido llevar a cabo. Ahora estamos como en un stand-by para ver si cancelan o mueven las competiciones que estaban programadas y ver como reajustamos los entrenamientos.
A Badajoz no pude ir porque debido a mi discapacidad necesito asistencia, y ese fin de semana mis padres, que en estos casos hacen de mecánicos, fisios, chóferes, etc, no podían acompañarme por motivos de trabajo. Ya lo sentimos todos.
Por cierto, el tema del encierro domiciliario. ¿Cómo lo estás llevando? ¿Cómo estás tratando de mantenerte en forma?
El confinamiento lo llevo como puedo. Lo que más estoy echando de menos son los días de gimnasio, que los he tenido que modificar y hacerlo en una multi-power en casa, y hay bastante diferencia. También noto la ausencia de mis sesiones de fisioterapia y de pilates, que si son importantes para cualquier deportista, para mí por mi discapacidad, mucho más. El resto, como entre diario, siempre entreno indoor, no ha habido mucho cambio. Sí lo noto mucho en las sesiones largas de bici, ya que al no poder salir a carretera se hacen más aburridas, pero es lo que hay y todos debemos ser conscientes de la importancia de quedarse en casa.
Tú compites en categoría MT1, es decir, ciclistas con parálisis cerebral. ¿Cómo llegaste al ciclismo adaptado? ¿Quién te metió el gusanillo? ¿Te acuerdas del día que corriste tu primera carrera? ¿y de tu primer título de campeón de España?
Siempre he hecho mucho deporte de todo tipo, también montaba en bici aunque con muchísimas dificultades, ya que no podía ni empezar ni terminar solo y alguien me tenía que ayudar. Un día viendo el ciclismo en pista de las Paralimpiadas de Londres, comentaron que los ciclistas entrenaban en el velódromo de Galapagar y eso está al lado de mi casa. Fuimos a preguntar y dimos con Marcelo Escudero que en ese momento llevaba la Comisión de Deporte Adaptado en la FMC. Estuve montando en el velódromo un tiempo hasta que él me comentó que debido a mi discapacidad lo mejor sería competir en un triciclo. Al principio dije que no (por ignorancia ya que nunca había visto uno), pero luego nos animamos a probar uno y fuimos a Bilbao donde residía Aitor Oroza, que en ese momento era el campeón del mundo (lo ha sido 3 veces) y es un referente en esta especialidad. La fundación Saiatu me dejó un triciclo y nada más probarlo me enamoró. Era increíble la sensación de libertad y de seguridad que me transmitía, fue un flechazo total. Si me gustaba montar en bici pese al peligro que suponía para mí, lo del triciclo era simplemente perfecto. Estuve entrenando y compitiendo con este triciclo una temporada completa (gracias a Saiatu) hasta que pude hacerme uno.
Mi primera carrera fue una Copa de España en Los Alcáceres (Murcia) en 2014, y corría junto a otros triciclistas y lo recuerdo con muchísima alegría, orgullo e ilusión, pero también con muchos nervios. Recuerdo que había entrenado muchísimo, o eso creía yo, y mi único objetivo era terminar la carrera como fuera. Fue muy emocionante poder cruzar la línea de meta y compartir podio con un maillot arcoíris. Y mi primer título de campeón de España fue en Ciudad Real en el 2015 y fue muy emocionante, ya que pude derrotar a Aitor Oroza en su carrera de despedida, ya que era mi referente y sigue siendo un gran amigo.
Con respecto al trabajo que se hace en la FMC, con la máxima responsable del Ciclismo Adaptado, Begoña Luis Pérez. ¿Cómo valoras el trabajo que hace ella y la FMC en pro de vuestro ciclismo?
El trabajo que se está haciendo desde la FMC y, en particular, de su máxima responsable de Ciclismo Adaptado, Begoña Luis Pérez, es increíble, motivador y súper eficaz. No para de buscar a cualquier persona con una discapacidad para que pruebe el ciclismo en cualquiera de sus modalidades, ya sea bici, tándem, handbike o triciclo, y se involucra al 100% en todo lo referente a esta modalidad. Es una súper profesional. Ahora mismo somos un montón de ciclistas en esta modalidad en Madrid, tanto en pista como en carretera, y lo mejor es que nos llevamos todos de maravilla. Solo tengo palabras de agradecimiento para Begoña por su labor, por su implicación y por su compromiso con mi deporte.
¿Cuál crees que es o son las claves del nivel tan alto que hay del Ciclismo Adaptado en España? ¿Con qué ciclistas adaptados te identificas? ¿Qué ciclistas son para ti un modelo y por qué?
Me gusta que me hagas esta pregunta, porque a veces creo que no se valora en su justa medida el nivel que hay en España de Ciclismo Adaptado y estoy de acuerdo en que es muy muy alto. Me es difícil saber dónde está la clave, pero puede que esté en el carácter del deportista, en la calidad de los técnicos, en el trabajo de federaciones y organizadores, en la implicación de ciertas entidades privadas y algunas públicas… Creo que no hay una única razón, pero sí que creo que si todo esto se coordinase un poco más aún, se podría elevar más el nivel del Ciclismo Adaptado español.
Como no podía ser de otra manera, me identifico con Aitor Oroza y también ahora con Sergio Garrote ¿Por qué? Por sus ganas de ganar, por su lucha constante, por su carácter competitivo pero lo que más, por su personalidad y forma de ser, es una gran persona.
Entre los ciclistas normalizados me encantaba la forma de correr de Alberto Contador siempre al ataque, y por supuesto nuestro gran campeón del mundo Alejandro Valverde.
¿Qué le dirías a alguien que tiene alguna discapacidad para que se animara a practicar el Ciclismo Adaptado? ¿Qué beneficios y ventajas obtendría frente a esa discapacidad?
Les diría que el ciclismo o el deporte en general tiene muchísimos beneficios para su salud y que además es una escapatoria. Es la mejor terapia física y psíquica. El ciclismo, en concreto, te permite además disfrutar de tu entorno de una forma tan directa que es difícil de igualar. Esa sensación de libertad, de independencia, de autonomía… No es fácil encontrarlo en otro deporte. Además, sales de tu casa y ya lo estás practicando.
Fotos © Teresa Abella y Comisión Ciclismo Adaptado FMC
