Gorka Izagirre (1987, Bahrain-Merida) llega al Tour de Francia con la máxima confianza tras los Campeonatos de España, por el resultado, oro en línea y plata en contrarreloj, pero sobre todo por las sensaciones. A partir del sábado será un escolta de lujo de Vincenzo Nibali junto con su hermano Ion.
¿Cómo llega al Tour de Francia?
Estoy con ganas de este Tour. Los últimos días incluso se hacen largos. Llego con moral y con ganas de empezar. Pienso que la temporada ha ido bien pero no tenías victorias que aquí es lo que vale. Al final la pude conseguir en el Campeonato y por eso estoy contento, también por el nivel.
Incluso fue plata en la contrarreloj.
Es una especialidad que siempre me gusta. Estrenamos una nueva bici. Salió todo bien y ahí está el resultado: segundo detrás de Castroviejo y con sensaciones muy buenas.
Parece que ha encontrado lo que buscaba en el Bahrain-Merida después de cumplir un ciclo en el Movistar Team.
El objetivo inicial del cambio era tener un poco más de libertad en las vueltas de una semana y también en las pruebas de un día. Se ha notado; los resultados han mejorado.
¿Diría que es su mejor temporada hasta ahora?
Sí. Desde Australia he dado un nivel muy regular, en Omán y París-Niza –tercero en ambas vueltas-, en la Itzulia también al menos hasta los últimos días… Estoy contento. Y en los Campeonatos haber dado ese nivel antes del Tour es para estar a gusto y por eso tengo ganas.
Mirando al Tour, la referencia y el líder del equipo es Nibali.
Sí, sí. Todos sabemos quién es y de lo que es capaz. En todas las últimas grandes vueltas que ha disputado ha estado en el podio y es un ciclista muy seguro. Tiene su forma de preparar sus objetivos. Por eso quizá no se ha mostrado demasiado hasta ahora, aunque el equipo está tranquilo, sabemos que ha entrenado fuerte y que está muy centrado.
Las nueve primeras etapas se presumen vitales para no perder el Tour.
Sin duda. Esa primera semana hay que pasarla. Hay que superar eso, es el primer objetivo, perder al menos el menor tiempo posible. Luego viene la montaña, y hay mucha, e iremos día a día.
¿Cree que podrá tener alguna ocasión de disputar una etapa?
Pienso que sí. Tres semanas son largas y hay tiempo para todo. Veremos cómo va el Tour para el equipo, pero pienso que tendremos nuestra pequeña oportunidad y, si se da, trataremos de aprovecharla.
Suma 46 días de competición y con el Tour serán otros 21, ¿cuál será su próximo calendario?
Donostiako Klasika y Vuelta a España.
¿Le atrae disputar el Mundial?
Ahora mismo tengo el Tour en la cabeza… y luego la Vuelta. Ya es bastante, creo. Sé que el Mundial es muy duro. Tampoco tengo ninguna noticia al respecto. No he hablado con el seleccionador.