¿Indurain de verdad regalaba etapas?

Rominger e Indurain en Isola 2000 © Cycling History

El Cuaderno de Joan Seguidor / Ciclo 21

Seguimos a rebufo de Miguel Indurain, sus Tours y lo que nos pone Teledeporte: este miércoles tenemos Isola 2000

Aquella etapa fue la constatación que había dos cocos en el Tour, la continuidad del Galibier pero ahora en Isola 2000, una estación más al sur, que curiosamente nunca más visitaría el Tour, pero que quedó con letras de oro por el duelo Indurain vs Rominger.

Si os acordáis de la conclusión de aquella etapa, en la recta final de Isola 2000, Pedro González narraba con pasión la más que posible victoria de Indurain. Rominger tiraba y tiraba, lanzó el sprint, pero no… cuando parecía que le iba a pasar, Miguel mira a su izquierda y detiene la remontada.

Isola 2000 ¿Dejó ganar Indurain a Rominger?

Y es más ¿ha regalado Indurain tantas etapas como se dice?

Ayer, el autor del libro sobre Miguel Indurain de nuestros amigos de Cultura Ciclista, escribía esto…

Hojeando su libro, si nos detenemos en la doble página dedicada a esa jornada leemos las declaraciones de Vicente Iza: «A mí Miguel no me ha mentido nunca. Miguel era muy sincero y si dijo que no pudo, eso fue lo que pasó«.

A ello añade José Miguel Echávarri: «No es una etapa que quieras que gane porque sí, sino que le sirva para redondear su palmarés, ya que nunca había vencido una etapa en línea vestido de amarillo«. Y es cierto, eso se le extrañó a Miguel Indurain, que no tiene una foto levantando los brazos vestido de amarillo.

Viéndolo ahora, recordando la cabalgada con Chiappucci en Val Louron, esa llegada con Rominger en Isola, incluso Hautacam con Luc Leblanc… cuesta mucho creer que Miguel Indurain no ganara etapas en línea en los Tours que dominó de esa manera, y con tal solvencia. Y cuesta creer porque nada fue porque sí en esa época.

Ayer mi hijo, que está viendo a Miguel Indurain hasta en la sopa este confinamiento, me preguntó si el navarro era bueno físicamente y tácticamente, o una cosa o la otra y es que lo fue en los dos puntos, alcanzando un equilibrio que rara vez hemos visto en otro campeón.

Por que hubo grandes corredores que lo confiaron todo a una cosa u otra: lo que el físico no le ha dado a Nibali, lo ha conseguido la estrategia, y en el caso de Froome, quizá al revés, aunque con el añadido del equipo.

Miguel Indurain fue un fenómeno en todos los aspectos, algo que, como otros grandes de otros deportes, estoy seguro que no volveremos a ver, y no, no es que el confinamiento nos haya nublado la visión, es que fue así.

Por eso cuando,  muchas veces surge la pregunta ¿Induráin regalaba etapas? puedo pensar que fue totalmente posible, porque en esos «regalos» iban favores de vuelta, como la famosa jornada de Mende, Tour 1995, cuando Banesto no daba abasto ante el ataque de Jalabert.

Pensar en esas etapas como algo accesorio, el medio a sacrificar por un fin mayor, no lo veo descabellado, es más, entra dentro de lo normal para alguien que pudo y supo perpetuar su dominio tantos años.

Quitarse el stress de ir a por etapa y general al mismo tiempo son esos calentones que te ahorras cuando pones la mirada en largo.

Y Miguel Indurain creo que en Isola 2000 miraba mucho más allá de esa línea de meta.

Imagen: CyclingHistory

Un comentario

  1. También regalo un mundial a Olano se lo regalo.

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