Gimondi, Zoetemelk, Martínez Heredia, LeMond, Mottet, Indurain, Fignon, Casero, Etxebarria, Menchov, Mollema, Quintana, Chaves, Barguil, Miguel Ángel López, Bernal, Pogacar, Uijtdebroeks e… Isaac del Toro Romero, el último de la excelente lista. Todos ellos, entre otros como Rubén Fernández o su ahora compañero Soler, tienen en común que fueron profesionales con el Tour del Porvenir en su palmarés. Este mexicano de 20 años (27 noviembre 2003) de Ensenada (Baja California) abandonó este 2023 el anonimato después de ser 10º en Sibiu Tour (2.1), 3º en el Valle de Aosta y ganando la prueba de la Copa de las Naciones sub-23 -además de la montaña, la regularidad y los jóvenes- por delante de los italianos Pellizari y Piganzoli y el estadounidense Riccitello con diferencias considerables. Un talento prodigioso con una madurez y templanza a lo Juan Ayuso que superó una fractura de fémur antes del Porvenir 2022 para volver al máximo y tomar una decisión trascendente tras su éxito y su teléfono chamuscado. Firmar por el UAE hasta fin de 2026 y «aprender a ser el mejor profesional posible». Así habló para los medios de comunicación en la concentración del conjunto de Gianetti y Matxin, que agrega otra pieza a su zurrón de promesas.
Fernando Ferrari. La Nucia (Alicante). Enviado especial Ciclo 21
-¿Cómo empezó su relación con este deporte?
-Empecé con muchos deportes pero el ciclismo empezó a ser parte de mi día a día y poco a poco fue escalando más. Cuando tuve 15 años encontré una oportunidad en un equipo y fue en ese punto cuando me lo empecé a tomar más en serio. No tenía nada asegurado pero a partir de ahí es cuando decidí intentar hacerlo bien. Mis primeros recuerdos del ciclismo en televisión fueron los Tours de Francia de Chris Froome y Nairo Quintana y a partir de ahí comenzó mi amor por el ciclismo. Algún día llegará estar en el Tour.
-¿Qué lugar ocupa el ciclismo en su país?
-En México no hay tanto ciclismo de competición como en Europa pero poco a poco está creciendo yo estoy contento de que sea así.
-¿Cuándo se decidió a dar el salto competitivo?
-Decidí competir ya a nivel internacional cuando me di cuenta de que estaba preparado para hacerlo. Soy una persona que no me gusta hacer las cosas a medias.
-¿Cómo lleva el estar tanto tiempo alejado de su hábitat, viviendo en San Marino, en Europa? ¿Es un sacrificio extra?
-Para mí ser ciclista no es un sacrificio. Es un placer, pero siempre es complicado estar fuera de mi país, de mi familia. Convivo con grandes personas que son como hermanos, pero no es lo mismo. No llegas por la noche y te recargas en tu casa. No existe eso para nosotros, pero soy una persona muy centrada y no he hecho otras cosas que no sea para el ciclismo, comer descansar y preparar todo para el día siguiente. Después de estar aquí ya haces mucho mejor las cosas y manejas los tiempos de una manera más profesional y con más tranquilidad.
-¿Cómo gestionó su fractura de fémur el año pasado?
-Fue muy complicado. Si me hubieran dicho antes de rompérmelo qué hubiera pasado respondería que se hubiera acabado todo, pero ahí me di cuenta de que podría hacerlo, pero al principio fue muy frustrante para mí. En las primeras carreras andaba mucho pero no acababa de sentirme bien. En la última media hora o veinte minutos de cada carrera era como si se me apagara todo el cuerpo. Algunos días llegaba muy frustrado porque sabía que tenía la capacidad de estar ahí pero no me salían las cosas. Tenía caídas pero al final pero poco a poco lo fui solventando bien y fui creciendo gracias al apoyo de mi gente. No fue nada fácil. Fue un trabajo constante del día día.
-¿Qué recuerdos tiene del accidente?
-La caída donde me rompí el fémur fue en Italia entrenando con el equipo. Me caí al resbalar con grava y me di contra la baranda de metal y me partí completamente la pierna. Fue muy doloroso.
-¿Cuál fue su trayectoria de México a Europa?
-El equipo Monex lanzó una convocatoria y yo traté de estar ahí para poder clasificarme y venir a Europa para tratar de estar en el equipo de ruta y poco a poco se fue dando en diversas pruebas y se fueron dando los resultados. Era ya mi cuarto año en México y en Europa las carreras eran de más nivel. Es todo más profesional y es un saberlo llevar. La convivencia mexicana en la casa de San Marino con compañeros de mi edad es muy amena y nos sabemos llevar muy bien a pesar de estar diez u once meses fuera de casa. Es muy bonito llegar a casa y sentirte con tu círculo de amigos. A veces era complicado, pero siempre tuve buena actitud.
-Tras el Sibiu Tour con profesionales llegó su primer podio en Aosta. ¿Cómo se gestó?
-Soy una persona que siempre quiere hacer las cosas bien pero tampoco pensaba que tanto. En Aosta después de una segunda etapa mala por deshidratación perdí mucho tiempo y el objetivo era poder recortarlo. Varios de mis compañeros no pudieron terminar por ese problema de desabastecimiento y fue muy complicado porque me quedé solo pero no quise abandonar. A partir de ahí miré el resto de etapas y como el pelotón podría jugar a mi favor. El objetivo era crear un poco de caos y buscar mis opciones personales. Me fui metiendo en las fugas y poco a poco iba restando segundos al grupo. Acabé muy contento porque mi primer podio no fue en una etapa si no en la general. Ese podio fue como un paso arriba pero para mí seguía estando en el mismo lugar.
-Y después llegó el Tour del Porvenir y su gran día…
-Estaba decidido a ganarlo y poder llevarme el maillot amarillo o el blanco. Fui con mucha preparación y planificación de cómo había que hacer las cosas. La contrarreloj era muy complicada y a pesar de tener caídas en las primeras etapas, luego pude ir solventando y arreglando los problemas. El primer día que pude irme solo aunque sin sacar segundos al pelotón acabé contento, pero a pesar de ser segundo no recorté tiempo. En la etapa clave de montaña en La Loze traté de estar lo más fresco posible para pensar mis movimientos. A partir de ahí empecé a apretar y a poner al pelotón en situaciones lo más complicadas posibles. Yo ya estaba solo pero si iba a tope obligaba a los demás a ir a tope también. El objetivo era mantener a todos bajo presión hasta que terminara la carrera. Y para mí fue una catarsis muy grande. Si me preguntas siempre quieres ganar pero no pensaba ganar así. Fue mucho mejor de lo planeado. La última etapa fue muy dura y no sabía si me iba a venir el «switch». Yo no conocía a Riccitello, pero sabía que era un corredor muy fuerte y uno de los favoritos. Tuve que estudiarle mucho durante todas las etapas. Es muy bueno y tiene mucha clase. El objetivo era ganarle donde no era tan bueno y también dónde lo era. Fue un juego mutuo de presión entre los dos y me salió bien a mí.
-Las ofertas del pelotón profesional imagino que fueron una cascada interminable
-Después del Tour del Porvenir mi teléfono explotó. Había muchas personas que ni sabía que tenía en mi whatsapp y fue muy caótico porque no sabía cómo hacer las cosas bien en ese momento. Estaba mal de la cabeza y no sabía ni entrenar, pero tenía que tomar una decisión y fue cuando empecé hablar con los equipos. No obstante yo quería estar con mis amigos y con mi familia para hablar con ellos sobre mi decisión. Era muy complicada porque vengo de otro país, de otra cultura, otro continente y lo último que quiero es sentirme mal o agobiado en algún momento del año. Tengo 20 años y soy una persona que tengo todavía mucho que aprender y no me gustaría tener presión. Me decidí por el UAE por su manera de hacer las cosas. Y creo que es lo que necesito. Estoy muy contento de estar aquí y es mucho más de lo que esperaba. Es increíble comer con ellos en la misma mesa. ¿Cuántos equipos me llamaron? Voy a decir que soy muy afortunado [risas]. No tengo representantes. Me he apoyado en la familia y los amigos. Sé que hay gente que los tiene pero yo estoy feliz así.
-¿Ya tiene plan de carreras para su debut y el resto del año?
-No me vas a creer pero no recuerdo mucho del calendario que tengo. Me cambiaron las carreras del inicio pero tampoco va a ser un gran calendario. El equipo y yo hemos acordado que lo principal es aprender y lo más pronto posible. En algún punto de la temporada me gustaría hacer algo, pero la priroidad es aprender el oficio de profesional y con calidad.
-¿Cuáles son sus sueños?
-Me gustaría ser un buen corredor, versátil, que pueda lograr cualquier cosa que me proponga. pero sí me gustaría que dentro de diez años pudiera seguir disfrutando como lo hago ahora y ser igual de exigente conmigo mismo.
Que fortuna tener un representante de México en un equipo del Word tour, ojalá aprenda mucho en el UAE y en dos o tres años lo veamos corriendo en las grandes vueltas y por qué no….triunfando en el Tour de Francia, todo a su debido tiempo. Que sea el ejemplo de muchos corredores amateurs para no dejar de luchar por sus sueños y tengamos más mexicanos corriendo en Europa….enhorabuena y felicidades a Isaac y al equipo UAE.
Creo que la mejor decisión del Toro fue esta de entrar en éste equipo. Pues por lo que pasó Raúl Alcalá fue durísimo tanto en el 7eleven como en el equipo con greg lemond. Sentimos mucho placer y orgullo que represente a México éste gran atleta. Como digo yo fenómenos deportistas suelen salir cada 10 años más o menos y el es uno de esos Muchas Felicidades y le deseo todo el éxito del mundo!!!
Aparte de sus extraordinarias cualidades como corredor de fondo y como atleta que, cualidades que quedaron manifiestamente demostradas en las carreteras francesas, me parece que es un chico con la cabeza muuuy bien amueblada en general y dotado de un gran sentido de la estrategia en carrera. Es astuto pero a la vez muy valiente. Lo tiene todo.
Lo de que viene de «otro país» y «otra cultura» no lo acabo de entender demasiado bien. No es europeo?, bueno..pues vale, hasta ahí llegamos. Pero este chico es de Ensenada, Baja California, Méjico, y habla el mismo idioma que varios de sus compañeros de equipo y del jefe del equipo. Además supongo que habla inglés perfectamente siendo de donde es. Ni que viniera de Swazilandia, o de unas islas del Pacífico por ahí perdidas ..y no me refiero a Guadalupe y sus islotes donde ir a ver tiburones blancos, que también son Méjico, doy fé de ello.
Bueno, ahora a rodar. Para debutar le han elegido un lugar bastante si no exótico podríamos decir lejano. Me da que ya se dejará ver, Espero que el pobre Riccitello no esté por allí, aún debe tener pesadillas con el Demonio.. de Tasmania?, no, de Tasmania no, de Ensenada.