Este año la QH contará con un ciclista de lujo: Ivan Basso, con dos Giros de Italia en su palmarés (2006 y 2010) y dos podios en el Tour de Francia (2004 y 2005). El 17 de junio vestirá el dorsal número uno y acompañará a los participantes durante los 200 km. Hablamos con él para saber cuánto sabe de la Quebrantahuesos.
-¿Qué ha oído hablar de la Quebrantahuesos?
-Es una de las grandes pruebas populares que se hacen. Es un sueño para toda esa gente a la que le gusta andar en bici y uno de los objetivos de muchos aficionados porque es un reto que traspasa lo deportivo y que va más allá: llega al espacio del orgullo y de la ambición personal. Conquistar estas grandes cimas es el sueño de todos aquellos que las veían por la tele.
-La Quebrantahuesos cruza puertos míticos del Tour de Francia, como el Marie Blanque, ¿qué recuerdos le traen?
-Cuando corres carreras como el Tour o el Giro, estás muy concentrado e involucrado en la prueba y no disfrutas de todo lo que ofrecen estos puertos. La QH, en cambio, es diferente, y me va a permitir recordar esas tardes subiendo con los aficionados al lado animando. La diferencia es que ese día estarán a mi lado en su bicicleta. Eso me emociona mucho y me hace muchísima ilusión. El contacto con los aficionados es muy bueno. Yo tengo mucha suerte porque tengo muchos ‘tiffosis’ y estoy muy contento de poder compartir con ellos este momento que incluye una parte, social, humana y deportiva. Es una forma de compartir vida sana con personas de diferentes edades.
-¿Cómo afronta este reto?
-Para un deportista que ha hecho carreras muchos años, esta prueba ofrece una experiencia que no he vivido. No seremos solo 200 corredores, sino que habrá muchos más, los que siempre estaban en la cuneta ahora estarán pedaleando a tu lado. Seguramente me encontraré con gente que me admiraba, pero también con los que no les caía bien. La diferencia es que ahora me podrán conocer personalmente y yo a ellos. Esto es muy bueno para el deporte porque acerca las dos partes y creo que es muy positivo.
-¿Se ha propuesto algún objetivo para el 17 de junio?
-Después de tantos años compitiendo, ahora la bicicleta ya es puro placer, felicidad y salud. El único objetivo es compartir con todo el mundo la prueba y prefiero estar pendiente de los compañeros que no del cronómetro o las pulsaciones de mi corazón. Ahora toca disfrutar.
-Hace dos años anunció su retirada, ¿cuánto tiempo pasa sobre la bicicleta actualmente?
-Ahora mismo voy en bicicleta tres o cuatros veces por semana, pero también juego a tenis y hago otros deportes. La actividad física se ha convertido en un medio para estar sano y disfrutar. Ya no competiré más y la verdad es que también está bien vivir así.
-¿Qué le parece el auge del ciclismo popular y que haya pruebas como la Quebrantahuesos?
-Es muy bueno que haya pruebas como la Quebrantahuesos. Al final es poder compartir una misma carretera con tus ídolos y para nosotros es un motivo de orgullo. Para mí es un sueño, porque es hacer grande este deporte y compartir experiencias de un modo que nunca he hecho ni al que estoy acostumbrado.
-Un consejo para los que debutan en su primera Gran Fondo de 200 kilómetros
-Una prueba así no se prepara el día antes de la prueba, se prepara muchos meses antes. Es necesario entrenar mucho, llevar un buen estilo de vida, comer equilibradamente. A parte, es muy importante que el día de la prueba se haya dormido bien, se llegue con fuerzas después de una buena comida y también es importante beber mucho. Por último, y esto es lo más difícil, es de vital importancia saber llegar a la parte final de la prueba con energía para quemar. Es complicado preservar la energía pero muy necesario porque estas pruebas no perdonan a nadie. Si al principio se va con un desarrollo que no sea muy duro y se va comiendo y bebiendo no debería haber ningún problema. Pero todo esto pasa por conocerse a uno mismo y saber regularse.