La ciclista belga Jolien Verschueren (Pauwels Sauzen-Vastgoedservice), doble vencedora en el Koppenbergcross, se sometió el pasado martes a una operación neurológica para extirparle un tumor que, tras las pruebas analíticas pertinentes, se ha confirmado como maligno y que, por lo tanto, “precisará de un tratamiento adicional que hará que Jolien no compita en todo este año”, tal y como ha anunciado su equipo en un comunicado.
La operación a la que se ha sometido este martes tiene su origen en una inflamación en el cerebro que se le detectó a Verschueren hace tres años por casualidad al ser sometida a un TAC tras una caída en un entrenamiento. En aquel momento, los médicos no consideraron necesario ningún tratamiento y únicamente recomendaron un seguimiento de esa lesión. Sin embargo, recientemente se ha detectado, en una de esas visitas de control, que la inflamación había empeorado y se decidió operar de manera inmediata para eliminar el tumor que, como ya hemos indicado, es maligno tal y como han desvelado los análisis.
Jens Demanet, médico del equipo de la corredora belga, explica que “por supuesto, ante esta situación Jolien necesita un tratamiento adicional que comenzará a la mayor brevedad posible. Eso hará que la recuperación total se prolongue algo más en el tiempo de lo inicialmente previsto, por lo que Jolien no competirá este año”.
La propia corredora se ha encargado de lanzar un mensaje optimista y aseguró que “seguiré siendo competitiva. Con el apoyo de mi familia, fans, médicos y mi equipo voy a luchar con todas mis fuerzas. Mi fe también me va a ayudar. Soy consciente de que mi carrera deportiva está en suspenso, pero mi salud va por delante”.