Juan Ayuso Pesquera (Barcelona, 16 de septiembre de 2002, 20 años) ha ganado su primer TOP Ciclo 21 sub-26 al mejor ciclista español joven del año en su segunda campaña como profesional superando a su rival de toda la vida, Carlos Rodríguez, y al ganador de este escalafón en el Giro de Italia, Juanpe López. El valenciano del UAE Emirates -tras ser el más laureado de ciclismo español en 2021 con 4 triunfos como neoprofesional y con 18 años- ha dado un salto en 2022 venciendo en Getxo y, sobre todo, terminando tercero en la Vuelta a España tras Remco Evenepoel y Enric Mas. Una campaña a modo de montaña rusa, con días lúcidos pero también con asperezas generadas por problemas de salud. Un año de aprendizaje para este talento anbicioso, sin prisa pero sin pausa, con la palabra ganar en su jerga habitual, cabeza amueblada, discurso coherente y sueños por cumplir. Hasta 2028 tiene contrato con el grupo de Gianetti y Matxin con la compañía del número uno del mundo Tadej Pogacar. Un colchón mullido para tomar pasos planificados y con mayor seguridad. Y avisa. «El año que viene quiero ganar el TOP sub-26 y el absoluto». Sería el mejor español de 2023. Dicho y escrito queda.
Fernando Ferrari / La Nucia (Alicante) / Enviado especial Ciclo 21
-¿Pensó en algún momento ganar la Vuelta a España?
-Este año hay que ser realista y hay que reconocer que tanto Remco como Enric fueron superiores a mí. Sí que podría haber terminado más cerca no habiendo perdido tiempo en la crono o el día que tuve el pinchazo donde tuve suerte que estaba el coche neutro y ahí también perdí bastante tiempo. Algunos días podría haber llegado mucho mejor pero son cosas que te pasan en tres semanas y por eso sacas resultados en estas carreras es tan difícil hay que ser ambiciosos pero también realistas.
-¿Qué lecciones extrae de su primera gran vuelta?
-He aprendido mucho a nivel mental porque nunca nunca había estado acostumbrado a salir en una etapa y que me dolieran las piernas. Yo pensaba que estaba cansado pero que los demás también lo estaban. Me fui satisfecho porque la última semana me encontré bastante bien y para ser la primera vuelta acabé muy contento y con confianza. El año que viene puedo petar como todos el último día pero soy un corredor de tres semanas. Y no tendré problema en la última. Esa última semana de la Vuelta es donde más rápido se fue. A lo mejor el recorrido no fue tan exigente pero por lo que respecta nosotros sí que se noto. Por otra parte fue donde mejor me encontré. Superé la COVID, me recuperé y acabé bastante bien.
-¿Le pesa que se le ponga constantemente el foco del futuro del ciclismo español junto a Carlos Rodríguez?
-Por un lado entiendo que la gente me ponga la presión porque he hecho podio en la vuelta España con 19 años y no es normal. Para mí es una motivación que se me vea como el referente del ciclismo español. Me emociona. Yo no me veo como ese referente pero iré a ganar cualquier carrera. También estaría bien que en otra carrera en otra parte del mundo ganará Carlos Rodríguez, por ejemplo pero yo me centro en mí y espero que siga sumando victorias en el palmarés.
-¿Además del podio de la Vuelta está satisfecho de su segundo año profesional?
-El balance es positivo, pero aparte de lo que pasó en la Vuelta a España he tenido altos y bajos con la covid, una fiebre después de Catalunya y en Dauphiné tuve que retirarme por problemas estomacales. Me iba recuperando y cuando estaba al cien por cien me pasaba otra cosa. Lo he tenido también que gestionar a nivel mental. Ha habido momentos duros como las Ardenas o carreras que no podía ni terminar. Hay que saber superar esos momentos. Paré, pensé solo en la Vuelta y salió bien.
-¿Y el Tour de Francia para cuándo?
-Lo lógico es seguir la progesión y después del podio de la Vuelta intentaré mejorarlo e ir a ganar. El Tour es la carrera. La que todos aspiramos a ganar. No me viene mal esperarme un año porque tengo 20 años para cuando vaya al Tour ir más rodado y sentirme con la confianza de que puedo conseguir algo. Prefiero volver a la Vuelta para ganar que ir al Tour a probar.
-¿Cómo se gestiona tener un contrato haata 2028, el más largo del pelotón internacional?
-Cuando las cosas empezaron a ir bien nos sentamos con el equipo y hablamos de lo que ambos queríamos y estamos en la misma página. Siempre se me ha dicho que tendré mi espacio y ningún problema nunca. Nos entendimos bien y decidí alargar. Me quita muchísima presión. No me voy a acomodar porque tengo 20 años, soy ambicioso y más allá del dinero quiero dejar un legado. La motivación que tengo ahora es la misma que tenía cuando era juvenil. De esta forma no tengo que estar pensando que el año que viene he de renegociar.
-Solo ha ganado una carrera en 2022. ¿Le ha sabido a poco?
-Con Vingegaard estuve cerca en Francia; en la Volta a Catalunya, en Romandía con Higuita que hubiera ganado de no equivocarme en el sprint. He perdido por errores no por físico. Hay que seguir aprendiendo pero como sé que soy capaz de conseguirlo. Te queda la espinita, pero es parte de esto. Por eso es bonito que cuando ganas lo valoras.
-¿Qué carencias ha de mejorar?
-Fisicamente en general es seguir mejorando, pero aprendes con la experiencia porque en la misma situación de Romandía ahora no la pierdo. Ya sé que si arranco a 300 metros de la meta ya no se para. Te tiene que pasar para fallar. Hay que seguir corriendo para seguir fallando y mejorando y ya llegarán las victorias.
-Además de las grandes vueltas ¿qué otro tipo de carreras le seducen?
-Fui a la Amstel Gold Race y a La Flecha Valona y me retiré después de estar enfermo y seguir arrastrándome. Pero el ambiente y la forma de correr allí me encantó. No sé si iré aún pero le he planteado al equipo que me gustaría volver a ambas carreras y ganar allí. Lieja está en el aire dependiendo si hago Romandía. El ciclista de hoy en día debe de ser completo y puede intentar ganar La Vuelta, pero también carreras como la Amstel Gold Race, que pese a no ser el polo opuesto como la Roubaix, es algo diferente a una carrera de tres semanas.
-¿Le van los adoquines, la gravilla?
-En Flandes me puedo llegar a ver, pero para la París-Roubaix me haría falta más tiempo. No me veo ahora, pero sí hacer carreras con pavés como este año la Flecha de Brabante me viene bien para cuando haya etapas adoquinadas en el Tour. Un día puede tocar y si para entonces no lo he corrido, puedo sufrir mucho. Este tipo de carreras las seguiré haciendo no para ganarlas, pero sí para poder afrontar el futuro sin miedo y aprender.
-¿El Mundial de Glasgow entre el Tour y la Vuelta entra en sus planes?
-El cambio de fechas es un acierto porque nos juntamos los que vienen del Tour y los que lo preparamos. No estaré al ciento por cien, pero sí al noventa y cinco. Es una fecha que va bien a todo el mundo. No he hablado con el seleccionador Momparler, pero mi idea es intentar ir.
-¿Ya tiene agenda para el año que viene?
-Calendario similar al de este año, empezando por Valencia siguiendo por Catalunya, País Vasco y Ardenas. Quiero cambiar algunas carreras y quizás no vuelva al Dauphiné y vaya a Suiza y Campeonatos de España. Y para preparar la Vuelta imagino que San Sebastián y el Mundial. Mientras se dispute el Tour haré también una concentración en altura.
-¿Tadej Pogacar es su ejemplo a seguir? ¿Cómo es su relación con él?
-Ha conseguido lo que quiero conseguir, es normal fijarse en él. Hay muchas similitudes porque fue tercero en su primera Vuelta como yo, pero luego ganó dos Tours seguidos que es algo realmente difícil. Intento aprender de él porque es el mejor del mundo. Lo que destaco de él es su tranquilidad. Luego es otro compañero más con el que jugar a la play. Es una persona normal como otra cualquiera.
-¿Le gustaría competir más veces junto a él?
-Nos conviene coincidir en una o dos carreras, aunque no sé cuáles serán. Nos podemos aprovechar de ello y nos vendrá bien. Es el corredor más vigilado. Los que me dicen que me he equivocado fichando por UAE estando Tadej para mí no es un problema. Habrá años que no haga el Tour y si vamos los dos, pues haremos como Ineos o Jumbo. Con eso se puede convivir y ahora mismo beneficia más que resta.
-¿Qué pierde el ciclismo español sin Alejandro Valverde?
-Muchísimo. Lo que ha consegudo él es muy difícil que se repita e incluso para gente como nosotros que estamos empezando muy pronto. Llegar a su nivel con más de 40 años dudo mucho de que alcance. corriendo y ganando las mejores carreras. Para mí ha sido un referente junto con Purito y Alberto. Poder compartir carreras con él ha sido bonito.
-¿Además de usted y Rodríguez Cano, hay relevo en el pelotón doméstico?
-También está Raúl García Pierna que ganó el Campeonato de España contrarreloj con 20 años. Hay otros corredores como Arrieta que necesitan más tiempo y acabarán llegando. Es normal que la gente nos vea a Carlos y a mí como cabezas, pero hay bastante gente con buen nivel y con el paso de los años.
-¿Le supone una ventaja tener un rival toda su vida deportiva como Carlos Rodríguez?
-Hemos mejorado ambos gracias a competir el uno contra el otro. Hemos corrido juntos prácticamente desde cadetes y hemos llegado a lo máximo porque somos muy parejos. A mí me ha hechio mejor mucho en cadete y júnior y él podría decir parecido. Estar en una Vuelta a España y vayas con otro corredor y sea él es curioso por un lado y bonito por otro. No puedo decir que Carlos sea mi mejor amigo y le llame para decirle cómo va, pero tengo muy buena relación con él y cuando hace algo me alegro muchísimo.
-A un año y medio de París 2024 es obvio que le gustaría ser olímpico.
-Espero que no pongan unas Olimpiadas llanas porque si no mi gozo en un pozo. Espero que nos manden por los alrededores lejos de París porque mucha montaña no hay. Me encantaría ir, pero antes habrá que ver el recorrido porque si no pinto mucho. Quizás la contrarreloj puedo intentar algo, pero esperaremos. Es otro sueño y hay pocas oportunidades de ir así que hay que intentar aprovechar si se da.