La AMA castiga a medias al antidopaje español

Logotipo de la AEPSAD

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Fernando Ferrari / Ciclo 21

La Agencia Mundial Antidopaje (AMA) sigue considerando a España y a su Agencia Española para la Protección de la Salud en el Deporte (AEPSAD) como «no cumplidora» con el Código Mundial Antidopaje -en vigor desde el 1 de enero de 2015-, después de la decisión tomada por la junta directiva en su reunión de ayer en la ciudad estadounidense de Colorado Springs. Sí aprobaron el examen -tras los cuatro meses de prórroga- Bélgica, Grecia, Brasil -escenario de los próximos Juegos Olímpicos y Paralímpicos- y Francia. México es la otra nación suspendida.

No obstante, el organismo que preside el británico Sir Craig Reedie reconoce que la actual situación de gobierno en funciones en España desde las elecciones generales del pasado 20 de diciembre plantea»dificultades para la resolución de sus asuntos pendientes en este momento».

La AMA ha decidido que»mientras España siga sin cumplir, se ha llegado a un acuerdo para que los tests sean conducidos por las federaciones internacionales. Esto asegura que se lleven a cabo programas de test efectivos en el camino a los Juegos Olímpicos y Paralímpicos». Es decir, que en el caso del ciclismo será la UCI y no la AEPSAD la que se encargue de los controles internacionales hasta nueva orden.

«La Agencia Española de Protección de la Salud en el Deporte quiere agradecer la comprensión de la Agencia Mundial Antidopaje respecto a la actual situación política española» según expresa en un comunicado hecho público tras conocerse la resolución de la AMA. «Los acuerdos sobre los que se están trabajando actualmente garantizarán el control de dopaje de los deportistas españoles».

Enrique Gómez Bastida, director de la AEPSAD, confirmó a Ciclo 21 que los laboratorios acreditados de Madrid y Barcelona lo seguirán siendo -era una de las posibles consecuencias del incumplimiento- a pesar de esta compleja situación de interinidad a la espera de que se resuelva el futuro político español, que podría demorarse incluso después de la cita olímpica.

Toda esta situación viene presuntamente generada por el anterior ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, que no quiso lanzar en su momento la actualización del Real Decreto -al parecer por la proximidad de las elecciones- para ponerse al día con las normas de la AMA aprobadas desde noviembre de 2013. Ahora la política antidopaje doméstica y sus deportistas pagan las consecuencias con la consiguiente negativa imagen de cara al exterior.

Por otra parte, Rusia, Andorra, Israel, Argentina, Bolivia y Ucrania han sido declaradas no cumplidoras con el código con efecto inmediato.

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