De Gendt se ve impotente ante el ciclismo que se está imponiendo
Leemos unas declaraciones de Thomas de Gendt tras la segunda etapa del Tour en los Alpes
«En la etapa de Le Grand Bornand intenté meterme en la escapada y al final llegué a 28 minutos. Aún así, me siento muy cansado. Muchos ciclistas van más rápidos que yo»
Y prosigue…
«Debe llegar el día en el que los jóvenes sean mejor, pero lo están haciendo de forma muy abrupta. Suele ser gradual pero ahora se apoderan de todo y nos hacen retroceder a los veteranos. Es una declaración dura, pero no puedo mejorar. Si ruedan demasiado rápido, tendré que aceptarlo. Puedo tener un gran día, pero si no… entonces es muy difícil. Tendré que sacar mis conclusiones y si cancelo mi contrato y es hora de otra cosa. Si son mejores, que así sea. Ahora mismo tengo 34 años y cuando termine mi contrato tendré 36. No creo que mejore un 5%»
Thomas De Gendt es uno de los corredores más apreciados del pelotón
En su vida deportiva nos ha regalado momentos antológicos, la etapa aquella del Stelvio que le valió un podio en el Giro, hace nueve años, las victorias en carreras como Volta o Romandía, dando unos registros de vatios que encendían luces rojas, la etapa que consiguió hace un par de años en el Tour con Pinot y Alaphilippe, persiguiendo. Es un lujo de ciclista, una especie que no diría en extinción, pero que se cuenta con los dedos de la mano.
Thomas De Gendt es de hecho el último ganador en el Mont Ventoux, cuando se tuvo que recortar por el viento en la cima.
Artículo completo en El Cuaderno de Joan Seguidor