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Lance Armstrong podría volver a trabajar para el ciclismo de la mano del máximo organismo internacional, la UCI, después de su escándalo, su confesión y la pérdida de todos sus Tours de Francia.
Según publica la BBC, la UCI y el equipo que preside el recientemente elegido Brian Cookson, habría contactado con el entorno del texano para pedirle que colabore en la lucha contra el dopaje, en una nueva comisión independiente.
En junio y por Twitter, Armstrong pidió al entonces candidato Cookson que creara esa comisión para «entender completamente los errores de las generaciones anteriores«, respecto al dopaje.
Una de las promesas electorales de Cookson era un cambio en la política antidopaje y uno de los pasos sería esa nueva comisión en la que podría tener cabida el exciclista estadounidense.
Por otra parte la UCI publicó una nota de prensa oficial en la que decidió realizar una auditoría sobre la eficacia de su lucha antidopaje y reducir en un 25% el salario de su presidente, el británico Brian Cookson.
La UCI realizará «una auditoría completa sobre los procedimientos utilizados en sus operativos antidopaje, para asegurarse de su eficacia», explicó.
